You & Me.

Sorpresa

La pareja se bajo del taxi que los llevaba hasta el hotel, esta vez el más alto obedeció a su esposo y decidió alojarse en un hotel común y corriente, y no en uno cinco estrellas. Park estaba encantado de todo lo que veía le habían hablado de lo lindo que era ese lugar, pero aún sus ojos no cree lo que ve, el mar, las estrellas, el pequeño pueblo alumbrado por pequeñas luces, todo era tan perfecto.

-Jimin ayúdame con las maletas.-El mayor luchaba por llevar todas las maletas, pero cada vez que salían por unos cuantos días el pequeño chico daba por entendido que se mudarían y metía miles de cosas en estas .

-Lo siento-El menor rió avergonzado, ayudando a su esposo.

Entraron a su habitación, que por suerte para Park estaba casi en el ultimo piso. Así tenia una vista mucho mejor de parte de la maravillosa isla. No dudo ni un segundo y sacó su teléfono para tomar algunas fotos. El mayor al ver lo entretenido que estaba su esposo, decidió dejarlo así y comenzar a desempacar él solo.

-¿Qué haremos mañana?, escuché que había un lugar cerca de aquí que tenia muchas flores, ¿O montaremos a caballo? Eso seria muy genial-Kim sonrió y se acercó a su pequeño chico, que aun seguía observando la bonita noche desde la ventana de la habitación, lo abrazó posando su barbilla en uno de los hombros del menor.
-Haremos lo que quieras, por mi esta bien-El mayor unió mas sus cuerpos.

-También deberías decidir, después de todo es "nuestra" luna de miel-Park infló sus mejillas, cosa que hizo perder la cabeza al mayor.

-Es que ya yo tengo algo planeado, hermoso-Susurro cerca del cuello de Park haciendo erizar sus vellos.

 El mas alto metió sus manos dentro de la playera de Park acariciando lentamente todo a su paso, mordió la oreja de este, logrando que el menor perdiera el control con todas las caricias propinadas por su esposo.

-N..Nam, d..deberíamos c..cenar primer..o- Mentiríamos si dijéramos que Kim hacia mal su trabajo, con solo susurros ya tenia a Park comiendo de su mano y eso le encantaba.

-Claro que cenaremos pequeño.

Las grandes manos se dirigieron al borde del pantalón de Park, las cuales jugaron un rato con el borde de este, de vez en cuando frotaba su miembro del gran trasero de su pequeño chico, mordiendo su cuello y metiendo al fin sus manos en el pantalón del menor para así masajear su tesoro.

-Mierda Jimin, me pones mucho.

El mayor volteo a su chico bruscamente para así atacar los gruesos labios, alzándolo para que rodeara con sus piernas su cintura y se mantuviera así. Park quitó de igual manera en que su esposo lo trató la estorbosa camisa, entrelazando sus pequeños dedos en el cabello del mayor jalándolo suavemente.

-Es..pera-¿Que ocurría?-D..debo hacer algo rápidamente.-El mayor no quería dejar hacer nada a su esposo, y quería terminar esto de una vez por todas, ¡No aguantaría tanto tiempo!.

-Mierda Jimin, mejor que sea rápido.

 Park tenía una agradable sorpresa para su esposito, pero no pensaría que se la daria tan pronto