Ustedes se imaginan que ir a la universidad es tan lindo, piensan que conocerán a su compañera de cuarto y se harán amigas, luego conocerás al amor de tu vida y terminaras tu carrera y blablabla.. Pero no queridos amigos, no, eso no fue lo que me pa...
NO QUIERO RECORDARTE, VETE, TE ODIO, NO QUIERO NI SIQUIERA TENER SEXO CONTIGO ADIÓS.
JUEPUTA. Desperté por el sudor y las lágrimas que caían sobre mi frente y párpados. Qué mierdas acabo de soñar? Dios mío, la he cagado pero feo ahora.
Camila, cuándo dejarás de cagarla tanto?
Me levanté de la cama y me metí en el baño, miré a mi reflejo en el espejo y qué puto asco. Estaba toda mojada, con unas ojeras que ni se diga, creo que unos tipos podrían vivir ahí. Me mojé la cara, cepillé mis dientes y bajé a desayunar.
Al llegar abajo todo estaba tan... Sofocante. Volteé a ver a Jasmine y llevaba puesto un short de playa, con su traje de baño por dentro, unas gafas de sol y un sombrero como el del señor que le vendía droga a mi hermano por el parque. No sé por qué ese señor llevaba un sombrero para playa si ni siquiera nos quedaba cerca el mar. Bueno, fruncí el ceño al ver a Sabrina vestida exactamente igual a su hija, siendo abrazada por Chase mientras se mete a la boca unos cuantos trozos de banano. Ojalá se ahogue. Chase, para mí sorpresa, también iba vestido igual! (Me refiero a estilo playero, sería extremamente raro si fuera igual que Sabrina y Jasmine). Oh por Dios, me tienen que estar jodiendo. ¿Chiff? Ahora sí me considero perdida.
¿Qué está pasando?
- Oh, Camila, estás despierta- dijo Chase con un tono totalmente distinto al de anoche. ¿Hum?
Asentí extrañada por el comportamiento de todos los putos locos que viven en esta casa.
- ¿Qué está pasando?- pregunté sentándome en el sillón al lado de Chiff.
- Vamos a la playa- respondió Chase dándole un beso en la mejilla a Sabrina.
Oh, you didn't.
Entrecerré mis ojos, creo yo, disimuladamente. Digo "creo yo" porque conociéndome, soy tan discreta como la niña del exorcista. Odio esa película.
- Deberías de ir con nosotros, hay espacio en los Jeeps- ¿Díganme qué no lo acaba de decir en serio? ¿Dos Jeeps? ¿Esta mujer acaso caga dinero o es traficante de drogas?
- ¿Estás hablando en serio? No creo que quieras que yo, Camila Williams, los acompañe a ustedes dos, y menos a tí- la señalé acercándome nerviosa. :-.. ya qué me odias, me detestas!- chillé. Oh no, Camila, no acabas de chillar. Aclaré mi voz para que no sonara como una niña de 7 años a la que no le dan su maquillaje artificial de los anuncios de televisión.
- Pues.. hoy amanecí de muy buen humor- dijo mientras Chase "discretamente" le mordía el lóbulo de la oreja.
No Camila, no vomites, no aquí.
- ¿Vas o no?- preguntó por último.
- Tienes que ir, no te deberías de perder toda la.. diversión- dijo abrazando más a Sabrina y dándome esa mirada. La mirada. Esa mirada que se dan las perras de las escuela cuando se declaran la guerra.
Chase acaba de iniciar una guerra, la cual estoy dispuesta a ganar.
Le di la mejor sonrisa de perra qué tengo, agarre un trozo de banano y dije:- Bueno, alistaré mis cosas enseguida- metí el trozo de banano a mi boca y me fui moviendo las caderas como la perra qué soy. Me siento como Blair de Gossip Girl. Debieron ver su cara, se miraba tan enojado y preocupado. Tal vez no lo recuerde, pero cuando quiero ser una perra imbécil odiosa, lo soy. (Me acabo de dar cuenta de que acabo de decir "perra" como 4 veces en el mismo párrafo, wow, soy buena en esto!)
Chase, acabas de firmar tú sentencia de muerte.
Me metí en mi cuarto y me dí cuenta de que no traje ningún traje de baño. Genial!
Me acerqué al barandal y grité.
- Sabrina!!- ella subió las escaleras.
- ¿Si, qué pasa Camila?- preguntó.
- No traje ningún traje de baño, me podrías prestar alguno?- pregunté con cierto tono de superioridad.
- Claro, ven conmigo- entramos a su cuarto y abrió su closet. Mierda, podría vivir ahí y tener 7 hijos y aún así alcanzaríamos todos. Ok.. no tanto así, pero si era grande. :- Elige el que quieras- dijo yéndose.
Camila, lúcete.
Elegí el más elegante y sexy de todos. Mire que Sabrina tenía una foto de ella y otra mujer con el mismo traje, JA, nunca me lograré mirar así de bien. Pero, por qué no intentar? No tengo tan mal cuerpo. Vamos a ver.
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Pues, en mí no se mira elegante pero si sexy.. espero. Me puse un mini shorts y una camisa transparente también negra. Tomé mi bolso, metí todo lo que tenía que meter, agarré mi valentía y salí.
Mientras bajaba las escaleras, me sentía como si me estuviera moviendo en cámara lenta, como si todo el mundo me estuviera viendo con la boca hecha babas, me sentía hermosa, sexy, salvaje pero todo eso terminó cuando me doblé el pie izquierdo en el último escalón, estaba por caerme pero caí sobre Chiff. Todo bien amigos, Chase no vino a rescatarme. Me levanté de él y volteé a ver al ya mencionado, tenía cara de "mierda, debí de haber hecho algo", le sonreí y salí.
- Ten, maneja tú uno de los carros- dijo Sabrina dándome las llaves de uno de los Jeeps.
- Ojalá lo choque contra un poste- dije con frialdad. Arrebaté las llaves con una sonrisita y lo encendí.
El día solo está empezando.
Créanme, al final de este día, Chase no aguantará más. O tal vez yo no aguante.. nah, soy Camila Williams, por favor, nadie me gana.
Puse los lentes de sol que le robé a mi abuela y arranqué.
Chase, estás perdido.
CHASE POV.
Estoy oficialmente perdido.
Se miraba tan sexy bajando por las escaleras, maldición.
Sé que estoy jugando con fuego, pero enserio me lastimó y quiero que lo sienta, quiero que sufra como yo sufrí.
Trataré de que deje su orgullo y me diga qué es lo que realmente quiere conmigo, siento que la conozco y al mismo tiempo no tengo ni puta idea de quién es. Necesito saberlo, necesito saberlo todo. Recuerdo solo estando con ella, pero cómo confiar en alguien a quién no recuerdo? Pónganse en mi lugar.
Camila, estoy perdido... Pero estoy dispuesto a que me encuentres, solo tienes que lograr hacer que lo diga.
