Blow Your Mind ♡ Bill Skarsgård.

Capítulo 12.

Me revolví en la cama un poco incomoda dado al dolor de cabeza que estaba comenzando a sentir. Me levanté, caminé hacia el baño y unos minutos más tarde me dirigí hacia el living. Lo primero que mis ojos divisaron al bajar, fue a Bill durmiendo plácidamente en el sofá. Si, lo hice dormir en en sofá. Una de las tantas reglas básicas que tengo para esto de "amigos con derechos" es NO dormir juntos, ya que los mimos, las caricias y los abrazos luego de tener relaciones siempre llevan a algo más. Me quedé quieta durante unos minutos mirando su increíble espalda y notando su relajada respiración...quería tirarme encima de él y llenarle la cara de besos...

-Nonono Emma, no pensaste eso -me dije a mí misma en voz alta y me metí en la cocina a preparar café. Una vez listo, me dirigí hacia donde él estaba y lo desperté.

-¿Qué hora es? -pregunto restregándose los ojos.

-Nueve menos cuarto -dije observando el reloj en mi teléfono. El me sonrió y tomo la taza de café que le ofrecí.

Despues de desayunar Bill se fue porque tenía que llevar su auto a lavar, también tenía que ir a ultimar algo con su agente, ya que el lunes comenzaba a grabar una nueva serie. Me bañe y salí hacia la oficina, después de estar unas horas atascada de trabajo comencé a sentirme mal, tenía un dolor de cabeza insoportable y no podía dejar de estornudar. «Gracias a la lluvia», pensé. No veía la hora de salir de ahí y tocar mi cama. Estaba terminando de corregir un documento cuando Sophie entra a mi oficina; como siempre sin golpear.

-Me dijo Samantha que te sientes muy mal.

-Deberías golpear... podría estar haciendo otras cosas.

- Lo único que te falta es traer a Bill a la oficina -dijo y la miré levantando una ceja-¡jodeme que ya lo trajiste!

Comencé a reír, su expresión fue muy graciosa.

- No Sophie, no quiero perder mi trabajo.

-De vos espero cualquier cosa... - le tiré con uno de mis pañuelos usados -¡Que asco Emma! -dijo parándose para que el pañuelo callera al piso, luego se volvió a sentar-¿como te sientes?

-Fataaal, quiero irme a casa ya.

*******

Las horas pasaron y una vez que terminó la jornada laboral me encontraba en el auto de Sophie rumbo a mi casa, ella se había ofrecido a llevarme. Una vez adentro de casa tomé una aspirina, cambié mi ropa por el pijama y me metí a la cama. Sophie estaba a punto de irse cuando suena el timbre.

- ¿Quién es? -escuché que dijo contestando el portero-ok, ahí te abro.

Genial, ahora ¿quién demonios es?. Tape mi cabeza con la almohada, solo quería dormir.

-Hola -la voz de Bill entrando por mis oídos. Saque la almohada de mi cara y lo miré.

-¿Qué haces acá?

-Como no contestaste mis mensajes llame a Sophie, me dijo que estabas mal, entonces vine -dijo el acercándose a la cama y se sentó a mi lado.

-¿Dónde está Sophie?

-Se fue...- agregó- ¿necesitas algo?

-mmm...comida-respondí.

- Ok. Te voy a preparar algo. Una sopa, lo mejor para la gripe.

- No, no me gusta.

-la mía sí -dijo guiñando un ojo. Se puso de pie y salió de la habitación. Me destape, salí de la cama y me puse una bata para ir tras de él.

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BILL

Prepare una sopa para Emma mientras ella observaba todos los movimientos que hacía. Una vez lista, le serví y ella la bebió.

-Debo decir que...está buenísima Skarsgård.

-Te lo dije, nadie se resiste a mis dotes culinarios-ella rodó los ojos ante mi comentario y yo solo reí.

-Miremos una película -propuse y me miró entrecerrando los ojos - solo como amigos Em.

-Esta bien, pero primero limpiemos esto.

Después de limpiar todo, fuimos hacia su habitación. Pusimos una película y no sé en qué momento nos quedamos dormidos. Me desperté por la luz del sol que daba en mi cara. Ella estaba abrazándome recostada sobre mi pecho, comencé a acariciar lentamente su cabello, se veía muy linda y tierna cuando estaba relajada. Debido a mi tacto Emma empezó a despertar lentamente, levantó la cabeza y cuando su mirada chocó con la mía sonrió dulcemente, pero cuando se percató de la posición en la que estábamos se apartó rápidamente de mí.

-No Bill, esto está mal...dormimos abrazados y vestidos que lo hace mil veces peor.

- Si, vestidos que horror-dije de forma sarcástica llevando los ojos al cielo.

Se quedó pensando un momento y después volvió a hablar.

-Va a ser mejor que no nos veamos por un tiempo... -soltó y la miré sorprendido.

- No lo vamos a dejar solo por esto Emma.

-Si. Pero no.... podrías conocer a alguien más, no se, tener sexo con otras chicas.

-¿Estás loca? ¿Vos escuchas lo que estás diciendo? -le respondí algo molesto, no podía creer lo que escuchaba.

-No, creo que esto se está confundiendo Bill.

-¿Entonces quieres que salga por ahí y me acueste con cualquier desconocida? -le pregunté cruzándome de brazos y cerré los ojos unos segundos tratando de mantener la calma.

-Si. Yo tendré sexo con otra persona también... -respondió y una punzada en el estomago me hizo cambiar el semblante. Sin decir más salí de su habitación para bajar las escaleras.

- Se que esto va a ser bueno para nosotros. -La escuche hablar detrás de mi.

-Si, genial Emma. -contesté sin mirarla, abrí la puerta y al salir la cerré con fuerza detrás de mí. Quería irme lo más rápido posible de ahí, no quería seguir escuchándola.

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Después de eso pasaron dos semanas. Dos semanas en la que no supe nada de ella.