124.- if i get my way

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ANTES DE LEER: Si no estás dispuesta a leer algo sobre infidelidades por favor no lo lean.

-Leer con la canción que deje arriba<3

(*  *  *)

Si había algo de lo estaba segura que me arrepentiría dentro de un tiempo más, era de ser la <amante> de alguien. Sabía que no era lo correcto y que estaba dañando algo, me sentía miserable y mala persona por eso, no lo niego. Pero también sabía que quería a Rick –demasiado- para ser verdad y de alguna manera u otra él también lo hacía –o eso yo creía-.

El leve toque en la puerta me hizo entender que él ya se encontraba aquí, como lo hacía todas las noches dentro de los últimos ocho meses. Abrí la puerta y me encontré a un Grimes más cabizbajo que los últimos días, tenía leves ojeras y sus ojos se encontraban cristalizados. Tomé su mano para hacerlo entrar y lo guíe a mi habitación, sabía que Rosita se encontraba en la casa y lo último que deseaba era tener que darle explicaciones sobre mi relación con Rick.

— ¿Qué sucede? —pregunté cuando ambos estuvimos sentados en mi cama.

—Michonne y yo... —murmuró—, hemos...

—Para —murmuré y él me miró extrañado—. Está noche no Rick, está noche no quiero hablar sobre ella —su expresión se relajó. Ambos nos quedamos en silencio mirándonos.

Había algo que siempre me preguntaba cuando estaba con Rick y era: ¿Por qué sigo con esto sí sé que nos dañamos además de dañar a otras personas? ¿Era una persona egoísta o más bien alguien masoquista? Sabía que era algo incorrecto pero aun así no lo paraba, seguía ahí.

>>Esta noche quiero sanar tu dolor —murmuré—, porque puedo verlo en tu rostro, tu corazón está roto —tomé una respiración profunda—. Esta noche ya no quiero escuchar su nombre.

Rick se acercó para besarme con cierta intensidad, me sentó sobre su regazo mientras sus manos exploraban el cuerpo que él ya conocía. Estaba harta de ser el hombro en el que lloraba, yo quería ser el hombro en el que descansará. Yo quería ser la persona en la que se apoyará y la única que ocupe sus sueños por la noche, pero eso nunca sucedería porque él tenía a Michonne y yo no era ella.

Me separé para tomar una respiración, despejé todos los pensamientos que se agolpaban en mi cabeza para poder disfrutar –o tratar de hacerlo- porque de alguna u otra manera sabía que esto era una última vez.

Trataba de disfrutar lo que estaba haciendo pero simplemente ya no podía hacerlo, porque en el fondo sabía que no me podía salir con la mía.

Mi mente aún se encontraba en otro lugar cuando ya habíamos terminado, me levanté para vestirme rápidamente, si no acababa con esto ahora, nunca lo haría.

— ¿Sucede algo? —Rick preguntó mientras veía como me vestía. Desvié la mirada y me centré en el pequeño discurso que mi mente había organizado.

—Necesito acabar con esto.

— ¿Qué?

—Necesito acabar con todo esto Rick —repetí.

— ¿Por qué?

<Porque siento que estoy enamorada de ti, y cada vez que vienes en la noche a hablar de ella, mi corazón se rompe un poco más. Porque sé que nunca seré ella y tú nunca me miraras de la misma manera que a ella. Y créeme que si me saliera con la mía, cuidaría de ti.>

—Porque estoy harta de esto —respondí con simpleza—. Necesito que te vayas.

—P-Pero...

—Rick, no me hagas repetirlo por favor —dije con fastidio. El ojiazul me miró extrañado y se levantó para vestirse de manera rápida.

— ¿Estás segura?

—Arregla las cosas con Michonne, Rick —respondí—. Cierra la puerta cuando salgas.

Porque me harte de ser el hombro en el que lloras.

Todos los días, todas las noches.

Porque estoy harta de ser en la que te apoyas.

Porque estoy harta de ser en la que te apoyas

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Rick Grimes »One-Shots ↪EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora