La Potencialidad [JohnTen]

Capítulo 20

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From: unknow number

To: Johnny ❤️

Hour: 8:17

¡Hey! Buenos días, ¿cómo amaneciste? Estoy ansioso por verte, ¿podemos comer juntos hoy? Ah, por cierto, soy Hansol alias el hombre de tus sueños.

⇒New message

From: unknow number

To: Johnny❤️

Hour: 8:17

Quería verte ayer, pero Yuta me dijo que estabas estudiando para un examen. Malditos exámenes que nos separan.

Inhaló profundamente y bloqueó la pantalla de su celular, lo guardo en el bolsillo de su pantalón y se concentró en la clase que ahora mismo le era impartida. Era importante prestar atención en clases, no debía distraerse con mensajes. Debió apagar el celular.

Hansol no era un mal sujeto. Era guapo, carismático, inteligente y seguro de sí mismo, pero tenía el grandísimo defecto de ser  imprudente en algunas ocasiones. John tenía claro que Hansol sabía perfectamente que tomaba clases en la mañana, bombardearlo con mensajes no era sin duda alguna una forma de respetar el espacio personal. El celular le vibraba tanto en el bolsillo que casi parecia juguete sexual, tuvo que sacarlo nuevamente para ponerlo en silencio definitivo y ver que tenía 32 mensajes del rubio, veinte de ellos solo eran emojis de corazones. Bufó pesado.

Cuando tuvo la oportunidad respondió en un solo mensaje a Hansol que él le diría si podían encontrarse o no ese día y que ya había registrado su número. No quería ser grosero ni nada de eso, pero evidentemente tenía sus prioridades y salir cada que Hansol deseara no era una de ellas. Se preguntaba por qué había aceptado salir con Hansol para empezar, pero luego recordó que en su momento no pareció una mala idea puesto que el rubio le agradaba bastante y creía que sería interesante poder intentar conocerlo más y, bueno, quizá la vida le estaba diciendo que dejara su soltería, ¿no? Quizá no sería malo tener una pareja por primera vez en sus veintidós años de vida, tal vez no sería tan odioso como la mayoría decía. Los filósofos no necesariamente debían ser solteros o algo por el estilo.

Las clases finalmente terminaron, más pronto de lo imaginado. Se dirigió hasta la cafetería para comprar lo de siempre —barra de cereal— y luego dirigirse hasta la biblioteca para nuevamente sumergirse entre los libros. Esa semana retenía exámenes y aunque no estaba realmente preocupado por ellos nunca era mala leer un poco más sobre los temas que sería evaluado. Al poco tiempo llegó Ten hasta él, con los cabellos despeinados y un suéter muy delgado que seguro le hacía pasar frío.

—Ya estoy aquí —exhaló y colocó sus cosas sobre la mesa —. Tuve un día pesado, me pusieron un examen sorpresa en la clase de persuasión y opinión pública. Realmente estaba asustado, pero al final creo que he contestado bien todo — dijo esbozando una sonrisa .

—Me alegro por ti, Chittaphon —musitó Johnny, regalándole una apenas visible sonrisa.

—¿Qué tal tu examen? Supe que fue a la primera hora —John le miró curioso —. Escuché a unos chicos de filosofía hablando de eso... No es como que te espíe o algo así —negó vehementemente.

—Estuvo bien, no venia nada que no supiera —suspiró —. Ahora, abre tu libro y lee, en una hora te voy a preguntar y de igual forma puedes preguntarme cualquier cosa —Ten asintió.

Ambos se quedaron completamente en silencio, leyendo sus libros tranquilamente en la quietud de la biblioteca. Ten comenzaba a fruncir el entrecejo en señal de no comprender algunas cosas, anotaba lo que aprecia no entender y luego pasaba la página. Los largos dedos de Youngho se deslizaban por las páginas del libro de filosofía, sus ojos adornados por aquel par de espejuelos se movían de izquierda a derecha con agilidad al leer.