Pasaron dos meses desde que sucedieron aquellos acontecimientos que terminaron en esta extraña situación en la que me encontraba ahora.
Dos meses de relación con Aiden... ¿Qué demonios había sucedido conmigo? ¿Dónde quedó todo ese odio que parecía tenerle...
Sí, se fue a la basura junto con mi orgullo y dignidad al ahora estar recibiendo helado de su mano en mi boca.—¡Ya basta Aiden es vergonzoso! —le reproché haciendo un puchero y desviando la mirada—. No soy ninguna nena para que me des la comida en la boca.
—Pensé que te iba a gustar...como te mantienes quejando de que no soy romántico contigo... —rodó los ojos y se metió la cucharada de helado a la boca. Bufé y agaché la mirada ante ese comentario.
Si me quejaba, pero tenía una buena razón para ello.
—No tendría que hacerlo si tan solo le dijeses a todos lo que somos...
Dos meses saliendo y de verdad soy muy idiota por haberme dejado convertir en "la otra". Aiden jamás terminó con Lidia... Me pidió tiempo y es la hora y siguen siendo novios, aunque sé que la usa de tapadera, me hace sentir mal que la abrace y le de ese cariño en frente de todos, cosa que solo hace conmigo cuando estamos solos.
Como en este momento. Y por ende no me interesan sus atenciones, al principio sí me sentía feliz porque era romántico conmigo, me daba detalles y me la pasaba muy bien saliendo con él a escondidas. Pero ahora, siento que solo me busca cuando me necesita... Que me usa. ¿Por qué mierdas no he hecho nada para cambiar esa situación? Porque... Lo amo.
Y al demonio todo soy un maldito masoquista, que con palabras bonitas y besos se deja engañar. Para ser utilizado como un pasatiempo de alguien más... Si tan solo Aiden fuera solamente un "alguien más".
Pero no...
—¿Otra vez con el tema? —apretó los labios, dejando a un lado el botecito de helado que antes comíamos—. Ya te dije...que necesito tiempo para abrirme correctamente...
—¿En serio Aiden? —le miré con desagrado, mucho desagrado—. No quisiera iniciar con esta pelea nuevamente, pero me comienzo a cansar de verte paseando tranquilamente con Lidia por todos lados...
—Noah...
—¡Escúchame! No lo tolero, me entran unas inmensas ganas de alejarla de tu lado, decirle que tú estás conmigo que no la quieres... —me mordí el labio buscando contener el llanto que se quería hacer presente—. Pero me contento porque sé que todo empeorará. Además, desearía que fueras tú mismo el que lo dijera...
—Perdón yo...
—Supongo que no te importo lo suficiente... —me levanté del mueble, para regresar a mi habitación.
Por suerte, la casa de mi pelirrojo "novio" ya estaba terminada y ya no vivía conmigo. Aunque claro, aprovechamos muy bien el tiempo que aún estuvo aquí.
—Noah espera... —me sujetó de la muñeca, suspiré seguramente iba a decirme lo mismo de siempre.
—¿Qué quieres? —dije sin voltearme a verlo.
—Entiende que es difícil para mí...
—Para mí lo es más. —me solté bruscamente de su agarre— así que creo que es mejor dejar las cosas hasta aquí... No quiero ser la otra de nadie Aiden.
—¡Tú no eres ninguna otra!
—No...soy el otro...soy tu amante, porque para la sociedad tú tienes novia...pero nadie sabe que te ves conmigo ¡Lo que haces conmigo!
Calma...
Calma...Sus ojos se abrieron sorprendido, tenía razón no soy suficiente para él.
ESTÁS LEYENDO
¡Maldito vecino! (Yaoi)
RomanceNoah parecía tener una vida normal como cualquier joven de 16 años. sin embargo, hay alguien que no le deja vivir en paz, harto Noah decide vengarse a como dé lugar, pero... ¿Sus planes van a salir como quiere? A él no le importa, está dispuesto a v...