¡Maldito vecino! (Yaoi)

Capítulo 9: Es solo por ayudar...

AIDEN POV

Lo había notado ya desde un largo tiempo, era lo más lógico puesto que la principal persona afectada es mi mejor amigo. Su comportamiento había cambiado ya desde hace un tiempo, desde que se declaró a todos homosexual... Por supuesto eso ya lo sabía, me lo contó el año pasado junto algunas cosas más. Estaba seguro de que lo mantendría en secreto por un tiempo más, sin embargo, esto cambio desde que comenzó a hablar con Noah... Desde ese día, la actitud de mi mejor amigo cambio esporádicamente, me preocupó mucho más el hecho de que se declarara a todos... Pensé en la posibilidad de que estuviera arto de ocultarlo, más no creo que se trate de eso sino de querer reflejarle a Noah lo que siente por él.

¡Pero claro que le gusta! Se le nota a leguas, y no se lo ha podido dejar más claro a Noah, ¡pero claro! Como el tarado tiene la cabeza en otro lugar ni al cabo del asunto.

Suspiré por décima vez, levantándome con cansancio de mi asiento. Estaba en una cafetería cercana a casa, tomandome un café para poder pesar con más claridad y así ordenar mis ideas.

¿Qué podía ganar Kendal declarándose a ese chico? No creo que el castaño se le suba encima y le grite que también lo ama con todo su corazón.

Hice una mueca de sólo pensar en semejante cursilería... No podía ser así... además... ¿Por qué yo estoy pensando en esto? ¿No se supone que ellos deberían decidirlo juntos? Entonces... ¿Qué es eso que me amarra a ellos?

¿Mi amistad con Kendal? ¿El no querer ver al tonto con mi mejor amigo sufrir?

Giré la cabeza de inmediato, dando varias vueltas sin parar. Podía ser cierto que pensé en todas aquellas cosas tan tontas... tan impropias de mi.

Decidí ir a la caja y pagar por lo consumido para luego salir del local y dirigirme de regreso a casa. Sólo esperaba de corazón que Noah haya pensando bien las cosas sobre Kendal. Mi idea se sostendrá ahí siempre. Porque siempre diré que no voy aceptar que le lastimen el corazón, a una de las personas que me dio la mano.

—¿Aiden? ¿Qué haces por aquí? —La reluciente voz de mi amada novia se escuho como música para mis oídos. Sonreí apenas pude verla de cerca. Y sin esperar a que dijera algo más le di un beso.

Sinceramente ella había sido lo mejor que me ha pasado. La amo tanto... Yo que pensé no amar a nadie, ahora me encontraba enamorado de esta maravillosa mujer. Agradezco mucho el día en que me fue a visitar al hospital, de no ser por su presencia ahí no hubiera estado seguro de que era la mujer de mi vida.

—Estaba bebiendo algo antes de regresar a casa —me acerqué y sosteniéndola de la cintura le miré.

Ella se volteó a mirarme con una sonrisa tranquila, mientras acomodaba su cabeza en mi pecho.

—Eso es raro en ti... ¿Algo te molesta?

—Bueno... Pensando en que Noah ya no...

Mis palabras se quedaron ahí ya que la chica a mi lado soltó un gruñido que me dejó muy perplejo en aquel momento.

—¿Qué sucede? —Inquirí sin dejar mi extrañada expresión.

—¿Siempre tienes que estar hablando de Noah? —Respondió algo exaltada—. Cada momento que estamos juntos, en toda conversación lo mencionas.

Sinceramente eso no me lo esperaba...

Y mucho menos había caído en cuenta de que metía a Noah en todas nuestras conversaciones. Me quedé estático, sin moverme. Pensando o tal vez no. Simplemente no sabía que responder a eso.

Sin embargo, ella continuo.

—Dime... ¿Qué te ha hecho ese chico para que lo tengas ahí? ¡En tu mente! A cada rato...