Marc Pov.
¿Quién conocía verdaderamente del amor? ¿Quién me daba pistas para entender lo que estaba sintiendo, lo que estaba haciendo? ¿Quién? Comenzaba a desesperarme, la presión en mi pecho era cada vez más grande y las ansias por tenerlo igual. No podía comprender porque me sentía de ese modo, tampoco lograba hallar la razón de mis acciones, pero ahí estaba.
Buscándolo con necesidad de tocar una vez más sus labios. Con necesidad de acariciar su piel... ¡No! No debería estar pensando en cosas de ese tipo. Me repetía mentalmente. Pero entre más lo negaba más fuerte se hacía.
Siempre me había considerado un hombre supremamente enamorado de las mujeres, de las lindas y delicadas féminas que para mí lo eran todo. Sin embargo, hace una semana atrás después de ver unas jodidas películas en la casa de Noah comencé a sentirme extraño con respecto a Julio. Me había sentido muy tranquilo con el sonido de su respiración y sin que nadie se diera cuenta comencé a acariciar su mejilla.
La verdad era que, Julio siempre fue un chico tierno, con rasgos un poco afeminados y podía pensar que las mujeres no eran su gusto. Pero en ningún momento pensé que yo sería el que quedaría atrapado en esa belleza.
Después de aquella noche volví a encontrarme con él, pero esta vez a solas y en su casa... Nos besamos incontables beses pero a pesar de eso ninguno decía nada. Seguíamos actuando como amigos, pero cuando estábamos solos terminabamos teniendo acercamientos muy íntimos, no sabía cómo tomarmelo, hasta el día que tuve sexo con él... sí desde ese día todo cambió. Porque me confesó lo que sentía por mi pero yo honestamente no sabía que sentía por él, no dije nada y lo hice molestar. Después de eso no hemos vuelto a hablar y me creí fuerte por pensar que pronto se me pasaría, pero la verdad de todo era que no podía sentirme tranquilo. Lo extrañaba como no tenía idea, lo necesitaba. Porque al parecer yo también me había enamorado de él, pero lo ví muy tarde.
Caminé unos cuantos pasillos más y me rendí en uno cuando ya no lo encontraba. Me estaba evitando a la perfección ese maldito, pero no me iba a dar por vencido hasta hablar correctamente con él, necesitaba dejar todo esto de una buena vez claro.
-¿Marc? -La voz de Gledis me asustó, la miré mal por casi sacarme el alma.
-No es momento mujer.
-Oh, lo lamento... Pero ¿Estás buscando a Julio no es cierto?
Me sorprendí por esa afirmación.
-¿Cómo lo sabes?
-Porque hace un rato me dijo que si te veía le dijera. Parece que te está evitando -se cruzó de brazos- ¿Acaso le hiciste algo?
-Uhm... Bueno... No exactamente así... -rasqué mi nuca sintiéndome incómodo- Simplemente no supe que decir en el momento que debía ser...
-Ya... -Gledis suspiró- lo ví hablando con unos sujetos de la clase superior, subió al segundo piso con ellos... Deberías ir. No me dió buena espina esa situación.
Ante esa información no dude en correr hacia el segundo piso, quedándome casi sin aliento, simplemente no podía pensar en cosas buenas cuando hablaba de eso Gledis, porque yo tampoco pensaba nada bueno de esa situación.
-Chicos...por favor no quiero hacer esto...
-¡Vamos Julio! Te quedaría muy lindo.
-Tienes una cintura perfecta, serías una gran maid.
¿Maid? ¿De qué mierda estaban hablando esos bastardos?
-P-Pero eso sería vergonzoso...
-No te preocupes, no serías el primero en hacerle de mujer.
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¡Maldito vecino! (Yaoi)
RomanceNoah parecía tener una vida normal como cualquier joven de 16 años. sin embargo, hay alguien que no le deja vivir en paz, harto Noah decide vengarse a como dé lugar, pero... ¿Sus planes van a salir como quiere? A él no le importa, está dispuesto a v...