capitulo 6

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· Todo el camino, me la pasé viendo a la pareja de tortolitos, a veces ya me cansaba de verlos, pero tenía que aguantarlos hasta llegar a la fiesta, donde me sentaría en la mesa del fondo a comer y tomar lo que sea que halla. No estoy de humor para fiestas. Lo bueno de esto es que estaba sumida en mis pensamientos, que el recorrido en el auto de Peter se terminó rápido.

- Bien llegamos. Dijo Peter, abriéndole la puerta a Sara. La verdad es que él era muy caballeroso con Sara.

- Emily, amiga por favor baila con alguien, ni se te ocurra sentarte en la mesa del fondo, si es lo que estabas pensando; estaré cerca de ti con Peter para vigilarte, debes divertirte el día de hoy. Me dijo Sara y se fue, bueno no sin antes de que yo respondiera.

- Bien. Dije. (no sé cómo hace para saber que pienso, ahora tendré que bailar, solo espero que algún chico se apiade de mí y me invite a bailar, pienso que sería muy vergonzoso si tuviera que invitarlo yo. Ah de solo imaginármelo me dan ganas de vomitar).

Por suerte cerca de la pista de baile, había una mesa desocupada. Así que me senté a comer galletas y tomar ponche... luego de comer y beber, fui al tocador a revisar mi maquillaje, pero me tardé como quince minutos debido a la larga fila que había. Cuando salí, un chico disfrazado de príncipe enmascarado, me dijo que si quería bailar. Supongo que sería el único que se atrevería a invitarme porque nadie más me había invitado... intimido demasiado a los chicos con mi belleza no es así? Así que le dije que sí, y para mi buena mala suerte justo estaban pasando una canción lenta.

- Gracias por sacarme a bailar. Le dije en su oído porque la música estaba muy alta.

- No es problema, estaba observándote y como estabas tan sola decidí invitarte. Me dijo.

    No dije nada.

- Supongo que no estás muy cómoda con esas ropas no es así? No te gustaría ir a fuera. Me dijo después de que terminara la canción.

- Supongo. Contesté y salimos al jardín trasero donde había una linda fuente, lo peor es que estaba vacío. Solo estábamos él y yo.

Cuando estábamos frente a la fuente, se arrodillo como en esas telenovelas cuando van a pedir matrimonio y me pareció raro, que me hizo sentir tanto incomoda como nerviosa; y entonces besó mi muñeca, luego se levantó.

- Lo siento. Me dijo y se quitó la máscara, era Thomas.

- Por qué? Le dije, aunque no pude evitar mi cara de asombro.

- Por haberte besado el otro día, es solo que me dejé llevar. Sabes tú belleza es deslumbrante.

- Creo que eso ya no tiene por qué importarte, supongo que si algún día nos casaremos es natural que eso suceda, es solo que ese era mi primer beso y no supe cómo reaccionar y mucho menos con mi cabeza a punto de explotar con esas cosas que me habías dicho. (vaya que sincero lo que acabo de decir, a veces hablo de más que idiota que soy, como que mi primer beso?).

- Yo... no me dijo nada, se tensó y luego de un rato me dijo:

- Veras, siempre fui yo quien te vigilaba, desde que tuviste ese accidente, siempre entraba por la ventana del hospital a verte y cuando saliste del hospital en tu casa, cuando dormías. Solo quería saber quién eras y como eras, nunca pretendí asustarte, pensé que te darías cuenta de quién era, y no es que me molestes, tampoco quise gritarte aquella vez en la U, pero no supe cómo reaccionar, tú estabas en mi pensamiento todo el día y no sabía porque, si solamente te había quitado a ese chico de encima y habíamos hablado 1 minuto y no lo entendía porque siempre te había estado viendo de lejos y eso no sucedió nunca.

Luego mis padres me explicaron que tener contacto con una ninfa provoca que solo pienses en ella debido a su belleza y su gran destreza de palabra, pero sé que no es solo aquella sangre que corre por tus venas, es por lo que eres una chica extremadamente inteligente, decidida, tierna y todo lo relacionado contigo. Por eso discúlpame por lo que sucedió en la U y por ese beso que robé de tus hermosos labios.

- Yo, bueno, lo que quiero decir, es que ya todo eso pasó. (le iba a decir que no importaba y que dejara las cosas así aunque si estaba un poco nerviosa y confundida por la situación, pero me interrumpió un enorme ruido que venía del bosque). Que es todo ese ruido? Le dije.

- Eso debe ser el bosque llamándote, el bosque te necesita, es por eso ese enorme ruido, aunque debo decir que los seres humanos no pueden escucharlo. Es por eso que te he contado todo desde el principio, una serie de cosas extrañas están pasando en el bosque y se está extendiendo poco a poco. No sabemos con certeza a que se deba pero al parecer están buscando algo.

- Algo como qué y para qué?

- Algo como a ti y para qué? No estamos seguros, pero como tú eres una mezcla de diferentes especies, eres una raza fuerte y hay algo que quiere evitar eso o crear una raza más fuerte creando descendencia contigo es por eso que no estamos seguros de que o quién está detrás de esto y porqué.

- Ja al parecer tengo una suerte malísima. Dije

- Tranquila, no te pasará nada si haces lo que te diga. Solo debes aprender a luchar y expulsar todos los conjuros y hechizos que debes saber para poder defenderte.

- Por qué todo esto me pasa a mí? Emily no termina de comprender esta situación. Ah como la odio. Grité.

- Calma todo estará bien.

- Como puedes estar tan seguro?

- Porque me tienes a mí.

- Ah que engreído que eres.

- Es natural que lo esté. Soy muy guapo, y tú no te quedas atrás; eres preciosa y ese traje que tienes te queda genial.

- Eres un pervertido, como le dices eso a una chica. Dije haciendo una mueca.

- Tranquila, no pienso hacerte nada hasta que seas mi esposa, hasta que aceptes que eres y serás solo mía por toda la eternidad y debo confesar que a pesar de todo no sabía que ese fue tu primer beso, aunque debo admitir que me encantó entonces habértelo robado.

- (oh Dios como me dice eso con tanta tranquilidad, siento que debo estar roja de la vergüenza que me causan esas palabras, aunque no lo crean si soy muy tímida a pesar de ser tan altanera, vaya a fin de cuentas también soy una chica)-mmmm. Fue lo único que dije.

- Me encanta que estés nerviosa y algo avergonzada. Vamos debes venir a mi casa, yo vine a buscarte por que debes empezar tu entrenamiento desde ya, el tiempo no da espera. Me dijo tratando de evitar su sonrisa debido a mi estado.

- Yo solo asentí y nos fuimos en su auto.



Chicos, estoy super feliz por haber vuelto. Pronto publicaré un nuevo capitulo. Besos.

EL CONTRATO DE EMILY (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora