El sueño era realmente dulce, no quise despertar
•••
Hoy estoy almorzando con Uraraka-san. Ya han transcurrido unas semanas desde que trabajo aquí, he hecho amistad con varias personas y evito con constancia chocar con las horas de guardia de Katsuki-san. Cuando lo veo me pongo nervioso y siento cómo mis manos se humedecen, mi corazón late más rápido y empiezo a actuar con mucha torpeza, más de la habitual.
¿Qué pasaría si él se da cuenta de mi comportamiento? ¡Estaría acabado!
- ¿Izuku-kun? ¿Estás bien? Desde hace un rato no estás comiendo nada -me dijo Uraraka sacándome de mis pensamientos.
- Lo siento, pensaba en... ¡Mis horarios! Creo que los dejé en mi habitación, no lo recuerdo... -mentí, no puedo comentarle esto a Uraraka-san, reí y sonreí un poco para disimular.
- Luego te acompaño a buscarlos, quería comentarte algo importante para mí... -susurró con las mejillas sonrojadas y una sonrisa.
- Claro cuéntame, aquí estoy -dije para brindarle confianza, ella soltó una corta risita ante mis palabras.
De repente sentí que una bola de papel comprimida fue lanzada a mi cabeza, giré mi rostro para ver de dónde venía. Un joven rubio me observaba con una amplia sonrisa burlona desde el otro lado del cuarto, no pude evitar sonrojarme, lo observé un poco serio esperando que dijera algo. Su sonrisa se borró y señalo un lápiz que estaba cerca de mis pies.
- ¿Me lo pasas? -preguntó Katsuki-san con seriedad.
Me levanté de mi asiento, recogí el lápiz y caminé donde estaba apoyado. Cuando lo extendí hacía él, él sujetó el lápiz y accidentalmente tocó mi mano. Por vergüenza retiré mi mano y me alejé con rapidez de dónde estaba, me senté con Uraraka-san dándole la espalda a Katsuki-san.
- Gracias Deku -exclamó antes de salir y retirarse.
- ¿Deku? -pregunte más para mí que para Uraraka-san.
-¿Deku? ¿Qué es eso? -pensé para mi mismo esta vez.
- Sí, eso dijo ¿Ustedes se conocen? -preguntó Ochako-san con las mejillas coloreadas y una pequeña sonrisita.
- Solo un poco... -pero antes de seguir hablando ví los extremos de sus labios curvarse hacía arriba.
- ¡¿De verdad?! ¡Magnífico! -dijo con una sonrisa llena de alegría - La verdad es que estoy enamorada de Katsuki-kun, sus ojos carmesí, su cabello rubio, sus músculos ¡Es muy atractivo, kya! -exclamó con una voz melosa y entusiasmada, se movía de un lado para otro con alegría.
Seguí oyendo, pero ya no presté atención a sus alabanzas, mi corazón dolía.
- Quería preguntarte... ¿Me ayudarías a conseguir su atención? -dijo enroscando un mechón de su cabello castaño.
La observé unos segundos. Yo sabía que esto podía pasar, que alguien más también podía enamorarse de él. Pero ¿Por qué tú Uraraka-san?.
- ¡Claro, te ayudaré! -exclamé con una de mis mejores sonrisas.
Terminamos de comer y seguro que Uraraka-san olvidó que iríamos por mi horario por que se despidió y se retiró hacía la cocina, la cuál es su mejor habilidad. Agradecí que se fuera, no pude evitar regresar a mi cuarto y empezar a llorar con impotencia.

ESTÁS LEYENDO
Secuestrado
Fanfiction-Entonces... ¿Solo lo secuestro?. -preguntó el de cabello ceniza con duda. -Sí y vivirá contigo 6 meses, luego nos lo entregaras. -dijo un hombre con semblante misterioso. -Esta bien. -dijo el de pelo ceniza retirándose del lugar. Pero seis meses se...