Y graznarán las aves al tañido de un reloj que ya no marca las horas,
funestos cuervos negros esperan en mis ventanas,
señales de una muerte anunciada
son vestigios de una inocencia truncada,
despertarán mis temores si los llamas
más alejarlos no puedo pues nacen de mis entrañas
y se apoderan de mi en pesarosa noche cerrada.
Y graznarán las aves cuando caigan las últimas hojas,
llorarán los sauces con sus ramas
el rocío del crepúsculo en sus faldas
y los cánticos se fundirán en lágrimas saladas
más la noche siempre eterna nos aguarda,
así será mañana y siempre
sea o no mi afligida alma presente.
ESTÁS LEYENDO
Fragmentos
VampireFragmentos de varios escritos sobre vampiros u otras criaturas, relacionados con mi novela principal o no.