Lucy y Sakura volvieron a estar en la enfermería, aunque en un mejor estado que la última vez. Y no solo existía aquellas diferencias, si no, que a sus lados aguardaban los chicos que tanto amaban.
Los chicos que no podían recordar.Natsu estaba nervioso, observando el rostro rasguñado de su amiga. Quizás debía de comenzar a pensar que Lucy era una maga de Fairy Tail, por lo que implicaba entrar en batallas. Batallas en las que él no siempre podrá estar, ahí, protegiéndola.
En cambio, el Uchiha no estaba nada preocupado. Sakura era fuerte y era algo que sabía. Aunque no imaginó que pudiese formar un equipo con alguien de otro mundo. ¡Vaya locura! La Haruno jamás dejará de sorprendernos.
Ella y sus ganas de proteger a quien quería.—Están bien. Unos simples rasguños, pero el principal problema es que se terminó su magia—informó Wendy.
—Y su chakra—interrumpió Sasuke, sin apenas dar una expresión precisa.
A Wendy no le gustaba nada aquel chico, no para su amiga. Había escuchado lo mucho que Sakura le quería, pero estaba segura que no escuchó todos los sucesos.
La peliazul pensaba que era de ese tipo de chico que era frío, no diría nunca "te quiero" y que sería capaz de empuñar un arma contra sus amigos. ¡Qué hombre más cruel!
Wendy quería más para aquella pelirosa que no paraba de sonreír. Quizás alguien como Sting—aunque claramente también tenía sus cosas, y además estaba enamorado de Yukino—o alguien como... ¿Tauro? No. ¡Aquella vaca era toda una pervertida! Quizás Loke era el indicado. O Gray si no fuese por Juvia.—¿Entonces cuándo se podrán bien?—preguntó el Dragon Slayer pelirosado.
—Esta noche dejémoslas descansar, para mañana estarán bien.
—Gracias por todo, Wendy—susurró Natsu. Sasuke solo asintió bajo la mirada de aquella niña.
—Seguramente debes llevarte bien con Sakura.
—¿Saku-chan? Sí, ¿por qué?—se interesó.
—Según lo que me han contado, ella es la mejor médico de todas las aldeas.
—Según lo que me han contado...—repitió Wendy. Primero lo susurró por sus finos labios y después, lo repitió en su mente.
Ella mismo lo confirmaba; Sasuke no era de su agrado.
La puerta se abrió de una forma desesperada. Todos miraron a quien provocó tal revuelo; era Levy.
La enana de vestido suelto observó a sus amigas. No era el mejor estado, ¡pero estaban vivas! ¡Vivas!
Corrió sin importar que estaba en la enfermería y estaba siendo observada.
Quedó en medio de ambas. Sus ojos estaban muy abiertos, derramando lágrimas de alegría.—Chicas...
—¡Están bien, Levy-chan!—sonrió la Dragon Slayer.
Se le escapó una sonrisa de alivio.
Estaban bien, pero aún había algo que resolver.Los ojos de Lucy se abrieron poco a poco. Todos fueron testigo de cómo aquella maga estelar mostraba su color chocolate brillando.
Observó todo el lugar con calma, pero se desesperó al ver que no estaba ahí.—¿Estoy en... Fairy Tail?—murmuró.
Los demás se acercaron, pues su tono de voz era bastante bajo.
—Sí, Lu-chan. Ya estás a salvo. ¡Lo prometo!—fue su mejor amiga quien no tardó en darle la mano, sonriendo.
—¿Dónde está él...?

ESTÁS LEYENDO
DESTINY
Fiksi PenggemarA veces el destino siempre juega con nosotros. Quiere saber hasta qué punto estamos dispuestos a desafiarle aunque nos llevemos mil heridas por el camino. Sakura Haruno es de esas chicas que siempre esperó, esperó, y siguió esperando. Y cuando al f...