La Música del Cambio ( DRAVEN X SONA)

Unidos

Draven, aún convalenciente, no dejaba de pensar en Sona. Tan sólo unos minutos después de verla, ya la extrañaba...

-Darius.-Dijo antes de que su hermano  desapareciese.
Éste se dio la vuelta.-Me gustaría que ella se quedase, ya sabes, por si me vuelve a aparecer el dolor...

-Creo que puedes estar tú solo. Si quieres llamo al doctor, pero a ella no.  Ya te he dicho que no me gusta.

Draven se cruzó de brazos y no dijo más, sabía que Darius era muy suyo e insistir en que la chica se quedase con él sería discutir a lo bobo.

-Está bien, me quedaré solo.

-Bien.-Dijo Darius saliendo de la habitación de su hermano.

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La noche asomaba, la casa de los hermanos a los cuales se conoce como sanguinarios estaba más tranquila, aunque el menor no dejaba de moverse en su cama.

-Joder... Me aburro demasiado...-Dijo en voz alta.
Se dio la vuelta y miró por la ventana. Era una noche bonita, estrellada y con una luna creciente que brillaba como nunca. Draven respiró hondo y pensó en lo que su vida se había convertido desde que conoció a aquella demaciana de pelos azules.
Sentía que ahora su vida estaba un poco mas llena, que el amor que sentia sólo hacia él ahora lo comparte con una muchachita dulce, amable y bella.
Serían como las 11 de la noche harán como unas cuantas 6-7 horas desde que la vió.
"La necesito"-Pensó.
Decido, se levantó de la cama y aun con pinchazos en el abdomen, consiguió ponerse de pie. Se apoyaba en las paredes para caminar, se movía pero lento.

-Debo...Verla...-Se autoanimaba.

Silenciosamente Draven recorría los pasillos de aquella casa hasta llegar a la puerta que conducía a un pasadizo para llegar a las celdas de presos.

Ese tunel era largo, unos 10 minutos andando.
El joven poco a poco atravesaba el pasadizo. A veces le daban pinchazos y tenía que parar, pero seguía adelante. Simplemente para ver la cara de Sona, aunque no fuese para tocarla, sólo quería verla...
Tras varios minutos largos y dolorosos, Draven llegó a las celdas y buscó la de Sona.

Cuando llegó vio a la muchacha sentada en el suelo apoyando los brazos en sus rodillas y la cabeza gacha.

-Sona-La llamó.

Esta miró hacia arriba. Se le ilumimaron los ojos al ver a aquel hombre. Se levantó y rápidamente fue a abrazarle y aunque los barrotes sepraban los cuerpos, no sus almas.

La muchacha acarició la cara de Draven, el cual cerró los ojos para sentir el tacto suave de la chica.

A Draven se le ocurrió una idea para calmar su sed de Sona:

-Un momento-Dijo lléndose por donde vino.

La muchacha lo miró irse extrañada.
A los pocos minutos volvió con unas llaves de la mano.¿ Iba a dejarla libre?. Draven sonrió desde el otro lado de las berjas mientras abría la celda de Sona la cual esperaba impaciente. Al dar la llave la última vuelta, se miraron mutuamente, abrieron la puerta y ella se echó en los brazos de él.
Draven le acarició el precioso cabello de color añil y la miró a los oceanos que tenía por ojos.
Sona por su parte  no pudo contener las lágrimas, pues al fin estaba junto al hombre al que amaba.

Ese abrazo duró demasiado tiempo, aunque para ellos fue corto.

-Vamos-Dijo Draven llevándola hacia la salida.

Sona desvió la mirada, y se quedó quieta, Draven lo entendió.

-Nadie se dará cuenta, vamos, hoy hace una noche preciosa, quizá como la que nos conocimos...

El escuchar eso, hizo que Sona se animase mas y aceptó en salir a la calle.

El viento soplaba pero no muy fuerte, este hacía que el pelo largo de Sona hondulease a su son y le diese un tono mas "divino"  a la chica.

-Ah, se me olvidó, te traje papel y una pluma.

Ella sonrió, pues tendrían mas comunicación. Sona cojió el papel y simplemente hizo un pequeño dibujo y le entregó de vuelta la hoja al ejecutor el cual al ver ese dibujo se lazó a besar a la chica. Quién hubiese sabido que en la hona sólo había un corazón a trazo de tinta negra.

Draven besó a Sona muy dulcemente, ella cerró los ojos y se dejó llevar por el momento, puso sus brazos alrededor de los hombros de su amado uniendo sus cuerpos aún mas.

-Te quiero-Susurró Draven al oído de ella.

Sona sólo sonrió.

-Ven, vamos. Sé un lugar para estar mas tranquilos.-Comentó Draven llevándo de la mano a su novia. Ella le siguió..

Andaron unos pocos Kilómetros hasta llegar a un lago donde la luz de la Luna se refllejaba de tal manera que parecía artificial.

-En este lago me he bañado con mi hermano muchas veces... Es un ambiente muy relajado, nadie nos molestará fijo.

Sona se quedó mirando ese espacio, era un campo abierto con árboles alrededor de un precioso lago de agua cristalina dond se podía respirar pureza y tranquilidad.

De repente miró a su derecha y vió a Draven quitándose la ropa. Ella se sonrojó.

-"¿Qué haces..?"

-Bañémonos juntos.-Dijo acercándose a ella.

Sona lo alejó posando sus manos en su desnudo pecho.
Draven la agarró por el mentón obligándola a que la mirase.

-Que no te de vergüenza.-Dijo sonriéndole y después dándole un beso en la.nariz.

Sona se ruborizó.

El noxiano se metió en el agua. Llevaba unos calzoncillos para no incomodar a la chica, pero si por él fuese se hubiese metido desnudo, pues sorprendentemente ese lago tenía un agua muy limpia.

-Vente, está tibia.

Sona aún pensaba qué hacer. Quería a Draven pero el desnudarse delante de él era otro nivel.

Draven extrañado salió del agua. Ella al verle de ese modo se puso aún mas roja .

-Eh- dijo mirándo su inocente rostro ruborizado-No tienes por qué.
Lo siento, no quiero forzarte a hacer nada.
Tras eso la sonrió y se fué a recojer su ropa para ponérsela. Draven se sentía mal, como si hubiese obligado a Sona a desnudarse ante él.

Ella pensó que Draven era el amor de su vida y que le amaba tanto que quería que descubriese cada parte suya, asique mientras él estaba de espaldas a ella para vestirse, se desabrochó la cremayera que sujetaba su vestido a su cuerpo, dejándola en ropa interior.

Draven al oír su vestido caer se dio la vuelta. La luz de la Luna y su figura llena de curvas le hizo pensar estar en un sueño. Sona se acercó a Draven y posó sus manos en la cara del guerrero. Le besó. Él reaccionó posando sus manos en su pronunciada cintura. Ese beso fue largo y lleno de sentimientos.

Poco a poco llevó su mano a la venda que llevana Sona para sujetar sus pechos y se la.quitó lentamente.

No vió nada, ya que seguían besándose. Sólo los sintió en su pecho de guerrero ahora ya no tan egoísta...

Poco a poco se fueron agachando. Quedando de rodillas y luego Sona se recostó en el césped. Draven recorría su cuerpo con su boca y sus manoslentamente mientras a veces ella se retorcía, pero de placer.
Tras llegar a su abdomen, pensò en seguir pero creyó estar en el límite asique no continuó. Deseaba a Sona por lo mas alto, pero era claro que ese no era el momento...

Al acabar, Draven volvió a mirar esos ojos y volvió a repetir esas dos palabras llenas de sentimientos:

-Te quiero.

Tras eso  se tumbó al lado de Sona la cual apoyó su cabeza en el pecho de este y cerró los ojos oliendo el aroma imponente de el hombre que tenia al lado, el que quizá ahora ya podía llamar su hombre.

Draven se quedó unos minutos viendo cómo Sona dormía, pues le parecía lo mas hermoso que había visto en la vida, y con ese pensamiento también cerró los ojos.