Instintos Asesinos

29 4 0
                                    

Cuando recobre el conocimiento estaba en la cama donde me disponía a dormir antes de que Ian llegara, el estaba intentado despertarme por todas las maneras posibles, se veía adorable todo desesperado y muerto de miedo por mi, cuando se dio cuenta de que por fin había reaccionado, se abalanzo hacia mi encerrándome en un fuerte abrazo un gruñido de dolor se escapo de mis labios y el se separo bruscamente de mi.

-Lo siento, no quise lastimarte

-Estoy bien no tienes por qué preocuparte

-Una mierda, estas como basura reciclada ahora mismo me dices que te sucedió y porque estás aquí

-Yo preferiría no decirte eso

-Pues no me importa lo que prefieras, cuéntame ahora

-No me hables así porque ya sabes cómo me pongo cuando me levantas la voz

-No estoy para tus jueguitos Alanis dime que te paso ahora, dios solo de verte siento ganas de llorar.

-Antes debes prometerme que no harás nada estúpido

-Como si fuera a prometerte tal cosa, ahora habla

-Está bien solo recuerda que te necesito a mi lado y si sales a matar al hijo de puta que me hizo esto me dejaras sola y es posible que tenga un intento de suicidio o algo así

-Jamás podría dejarte sola en condiciones como esta, no intentes llenarme de tu psicología barata, dime por favor que esto no le lo hizo tu marido

-Lamento tener que hacerlo

-¡HIJO DE PUTA!

Se levanto y comenzó a golpear las paredes con una fuerza impresionante sus nudillos ya sangraban y ahora iba a destrozarse las piernas corrí y lo sujete de los brazos

-Para, por favor detente, te necesito conmigo, además necesito que cures algunas heridas y endereces los huesos que rompió, con las costillas no hay nada que hacer supongo que sanaran solas, además no se si las costillas perforaron algún órgano, necesito que te concentres en mi, si yo puedo soportar el dolor por qué no lo harías tu

-Porque eres lo que más amo en la vida, verte así me mata no lo entiendes, ¿Qué sentirías tu si me vieras así? Vamos dímelo, no querrías matar con tus propias manos a la persona que lo hizo

-Claro que querría hacerlo, pero no lo haría por la simple razón de que eso nos alejaría para siempre, no mas juegos Ian estarás preso y entonces si jamás podrás cumplir esa promesa que me hiciste hace años

-Estoy comenzando a perder las esperanzas

-Dijiste que nunca lo harías

-Mira no quiero hablar más de eso, dime porque te golpeo y que más hizo

-No necesitas saber más

-Claro que necesito saber más, necesito saberlo todo

-Está bien, el abuso de mi

-¡Hijo de perra voy a matarlo!

-No

-¿Qué?

-Dije no

-¿Por qué no?

-Ya obtuve mi venganza

-Si claro como si pudieras vengarte de lo que te hizo vamos cariño dime como tomaste venganza

-Le arranque con los dientes un pedazo de su miembro

-¿¡que hiciste que!?

-Lo que escuchaste, ahora me siento tan mal que quiero morir lo menos que quiero es pelear contigo si me permites me dormiré más o menos ahora

-Eres increíble pastelito, déjame un lugar a tu lado ahora regreso

Cuando regreso me examino e hizo todo lo que estuvo en sus manos para curarme y asegurarse de que me encontraba bien, insistió en que al día siguiente iríamos a un chequeo le dije que si solo para que pudiéramos volver a dormir, me tomo suavemente entre sus brazos y así nos quedamos completamente dormidos.

Al día siguiente sonó la puerta de una manera alarmante yo sabía quién era, me levante de un salto de la cama y me dispuse a levantar a Ian también

-Vamos cuchi cuchi despierta

-No quiero, vamos caramelo quédate un poco más en la cama

-IAN levántate ahora mismo de la cama, camerón esta tocando y si no abres derrumbara la puerta ahora, tomare mis cosas y me meteré en esa caja vieja que siempre nos reusamos a tirar aun la tienes ¿cierto?

-Claro que si, a veces cuando no soporto tu ausencia me meto dentro de ella para recordar los momentos felices que vivimos dentro

-No hagamos esto ahora, mas tarde haré lo que quieras por el momento, toma todo lo que pueda ser un indicio de que estuve aquí y vacíalo sobre mí una vez esté dentro de la caja después pon algunas colchas en la parte superior y por ultimo unas encima de la caja, así si me encuentran verán que no hay nada

-No dejare que entre a nuestra casa

-Tienes que dejarlo, para que este seguro de que no me encuentro aquí ahora anda mueve el culo

Hizo todo lo que le dije, después bajo a abrir la puerta, escuche como discutían

-¿Por qué tendría que estar tu mujer en mi casa?

-Oh vamos no creerías que soy tan estúpido sé lo que hubo entre ustedes en el pasado

-Tu lo has dicho es pasado y debe quedarse ahí, mira si no me crees entra y revisa

-Eso haré

Escuche ruido por toda la casa, estaba sudando frio, si me descubría era mujer muerta y lo peor que Ian también podría ser hombre muerto, escuche cuando entro al armario me quede muy quieta y sin aliento, si movía un solo musculo de mi cuerpo él me encontraría, no sabía muy bien como podía moverse tanto después de lo que le hice la noche pasada, yo estaba muriendo de dolor por la posición en la que me encontraba, la caja no era lo suficientemente grande para una mujer adulta, escuche como se acercaba cada vez más a la caja quito las cobijas que estaban en la parte de afuera para encontrarse con mas cobijas

-Esto es ridículo y lo sabes, no la encontraras aquí

-Eso parece, lo que no entiendo es porque sigues durmiendo en este cuchitril

-En primera no es un cuchitril es una casa hermosa y en segunda duermo aquí porque me gusta la sensación de esta casa. Ahora si me permites estaba en medio de una siesta

-¿Qué te paso en la mano?

-Me agarre a golpes

-¿Con quién?

-Eso a ti ya no te importa

-Tienes razón, solo una cosa más, nuestra sociedad queda disuelta, oh y si resulta que ella se está escondiendo aquí o con tu ayuda acabare contigo

-No me amenaces, el día que me necesite estaré ahí para ella, tus amenazas no me asustan

-Deberían.

Cuando Cameron salió de la casa, me quede congelada en el lugar en donde estaba, el miedo me invadió por completo más que por mi por Ian, Cameron no bromeaba si descubría que él me escondía lo destruiría, lo dejaría en la calle o muerto ya no sabía de lo que era capaz ese monstruo, no me di cuenta de en qué momento Ian quito las cobijas y abrió las cajas, tampoco me di cuenta en qué momento comencé a llorar ya que estaba realmente  sollozando, el dolor invadía todo mi cuerpo como si una fuerza extraña me empujara hacia el infierno, el me tomo en sus brazos y me saco de las caja me cargo hacia la cama una vez ahí me deposito como si de la joya más preciosa y delicada se tratase jamás en la vida me había tratado con tanto cuidado como ahora, en sus ojos podía ver mil emociones apenas contenidas, ira, dolor, frustración, pero lo más importante era un amor infinito, en momentos como este quería volver el tiempo atrás para nunca haberlo dejado ir, para nunca haberlo lastimado como lo lastime, sabía que yo era un veneno para él y si lo que tenía que hacer era desaparecer de su vida lo haría.

Mi obsesión por las bodasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora