Los regalos, no siempre se habrán a medianoche.
La tradición siempre dictaba que los regalos se abrían siempre a medianoche del 24 de diciembre, sin embargo, esa regla no era en la vida Conner Kent, el actual estudiante de periodismo en la universidad de Gotham City, la cual en esos momentos estaba cerrada por la época de vacaciones de invierno para tanto sus estudiantes como el profesorado del lugar.
El joven adolescente de 19 años caminaba por las calles nevadas de Gotham, viendo a la gente pasar de aquí y allá aún visitando la casa de sus conocidos, familiares u amigos que no pudieron ver por las cuestiones familiares o estar muy lejos para ir el día anterior, y Conner era uno de ellos porque iba a visitar a una cierta persona en esos momentos de la mañana la cual le llevaba un regalo que con mucho esfuerzo logró conseguir, pero eso no impedía que una sonrisa alegre se formara en sus labios al pensar lo feliz que estará su pareja al tener su regalo.
Era extraño según para el joven adolescente porque el desde un inicio se creyó heterosexual hasta tuvo muchas novias mientras cursa la escuela secundaria y preparatoria, pero cuando llegó a la universidad descubrió que en realidad era bisexual al enamorarse de su pareja, un chico serio y algo arisco pero con su tiempo y dedicación logró sacarlo de su caparazón para ver esa sonrisa alegre como su risa. Al inicio creyó que sería muy opuestos en gustos pero se equivocó, porque descubrió que su novio también disfrutaba de los deportes y el aire libre hasta supo que este sabia diferentes tipos de artes marciales, manejo de armas hasta que estuvo en la milicia un par de año antes de conocerse.
-Solo espero que ande de buen humor hoy-comentó entre risas el adolescente al recordar que su chico tenía pésimo humor después de una reunión familiar porque siempre era él, el señalado por ser el chico rebelde y de,as cuando era el chico quizás más tranquilo que conoció a pesar de su carácter tosco y pintas de matón.
Siguió su rumbo con tranquilidad hasta que finalmente se encontró frente al complejo de departamentos en el que vivía su pareja, y subió hasta su departamento claro saludando alguno de los vecinos que se encontraba a su paso los cuales alegre le devolvieron el gesto, ya acostumbrados de ver aquel chico por allí y más el saber de quién era novio. Cuando por fin quedo frente a la puerta de su chico toco la puerta y espero tranquilo, hasta pensativo de que será el regalo que le de su actual pareja.
-¡Feliz Navidad, Jason!-dijo alegre Conner al mayor con una sonrisa cuando salió a recibirlo, notando el ceño fruncido que tenía como la cara de haber sido despertado de su sueño y mataría al responsable algo que miro con nervios el pobre Kent por tener la ira de su pareja en su contra.
-No grites muy alto que me duele la puta cabeza... Pasa-con eso dicho el chico de ojos esmeralda, mientras entraba en el departamento desordenandose más su cabeza como una medida un poco simple y sencilla de menguar algo de su dolor de cabeza no causado por resaca sino más bien de estar aguantando a su familia toda una Santa noche buena, solo por el deseo de Alfred de que pasara Navidad allí.
Conner entró en el departamento y le dio algo de pena ver a sí a su chico que sin mediar palabra dejó su regalo de lado en la mesita en la entrada del hogar pequeño, para luego abrazar por detrás al chico mayor y luego cargarlo en sus brazos no obtuvo quejas ni nada de ello sorprendido le el nivel en el que estaba de cansado, adolorido y molesto que estaba el mayor como para ya importarle un rábano lo que le hiciese, lo llevo al cuarto y lo dejo encima de su cama y sin esperar nada le bajó los bóxers dejando libre el miembro ajeno que sin esperar lo devoro con rapidez.
-Joder, Conner... ¡Ah!-gimió con fuerza Jason hechando sobre sus almohadas su cabeza, olvidando su incesante dolor de cabeza por el placer producido por la boca ajena y la devoción con la que lo atendía. Sus manos tiraban de los cabellos ajenos como movía sus caderas creando un par de embestidas, las cuales Conner no renegó ni rechistó nada.
Las succiones fuertes y rápidas como las embestidas hechas por parte de Jason siguieron un buen tiempo hasta que el mayor dejó libre su semilla, que fue tragada en un dos por tres por Kent que se acercó al rostro de su novio para besarlo en lao labios como dejar un pequeño beso en su frente. El adolescente se acostó aún lado del otro pelinegro creyendo que estaría cansado y dispuesto a volverse a dormir y el como todo buen novio se quedaría allí a su lado abrazándolo y acompañándolo a estar en los brazos de Morfeo pero, Jason sonrió de forma perversa y llena de malicia antes de invertir posiciones quedando encima del regazo ajeno sin ninguna prenda cubriendo su virilidad y trasero aún si llevaba puesta su camisa sin mangas, porque esta le quedaba justo en la cadera siendo imposible que lo cubriera en algo.
-Disfrútalo por esta vez Kent todo lo que quieras hacerle a mi cuerpo, porque después tú serás el que muerda las sabanas el resto del próximo año-le advirtió con malicia el ex militar mientras movía sus caderas contra el miembro erecto y viril que tenía el otro, viendo como el nombrado gemía y tomaba sus caderas con ambas manos para embestirlo por sobre su ropa para no ser el único que estuviera disfrutando de ese juego sucio que inició Jason.
-Pues será un delicioso precio a pagar, porque no dejaré que salgas de la cama desde hoy-advirtió Conner aceptando el reto que le dio Jason que ahora se comenzaba a arrepentir con la idea que no saldría de la cama un buen tiempo no por el hecho después de tener relaciones sino por el hecho de que Conner no lo dejaría descansar.
~...........................Lunes 25 de diciembre.............................~
Dedicado a: anita_yukino_ghouls
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Una Navidad al puro estilo Robin.
Fanfiction«La pequeña como disfunciónal y funcional familia Wayne, estaban preparándose para la festividad más alegre y llena de felicidad en una de las épocas donde la nieve cubría todo el pavimento y techos, las patrullas se volvían más pocas por qué tambié...