Pide un deseo » joel pimentel || TERMINADA

11.

—Responde, Joey ¿En verdad soy tan hijo de puta?

—Pues...

—¿¡Qué quieres decir con ese "pues"!?

—Pues no es que seas un hijo de puta... simplemente, eres así...

—¡Joel!

—Vamos a ver... ¿recuerdas qué fue lo primero que te dijo?

—Que era un mimado que siempre obtenía lo que quería cuando quería. —dijo analizando sus palabras. —Eso no es cierto.

—¿Cuántas veces le pediste un auto a tu padre?

—No recuerdo...

Arqueé una ceja.

—Pediste un auto rojo para tu cumpleaños 18. Y eso fue lo que obtuviste.

—Eso no prueba nada.

—Llama a tu madre.

—¿Qué? -dijo totalmente confundido. —Puede que esté en una junta de la oficina.

—Si es así, te llamará después, anda, llámale.

Sacó su celular aun desconfiado y seleccionó el contacto que decía "Mamá"

—¿Qué le voy a decir?

—Pídele algo material. —me miro incrédulo. —Sí, un nuevo celular, laptop, dinero, lo que sea.

—No entiendo qué pruebas con esto, pero está bien. —dijo encogiéndose de hombros, presionó la tecla para llamar, y puso el teléfono en altavoz. La señora Vélez contestó al cuarto timbre.

"Hola, cielo ¿Ya no te quedarás con Joel?" saludó su madre al otro lado de la línea.

"Hola, mah". Sí, aun está en pie ese plan... en realidad llamaba para preguntarte algo"

"¿Qué pasa?"

"Pues... antes de ir a casa de Joel pasamos por el centro comercial..."

"Ajá" dijo amablemente incitándolo a continuar.

"Acabo de ver un teléfono muy bueno, es nuevo el modelo, y pues, no sé, me preguntabaaaa, si podrías prestarme dinero para comprarlo, ya sabes que..."

"Mándame el modelo por mensaje, en cuanto lo hagas le voy a pedir a alguien del personal que vaya por ella" en otra situación Chris habría sonreído entusiasmado.

"Gracias, mah"

"De nada, bebé. Nos vemos mañana en la mañana. No llegues tarde. Tenemos cena con los Villafuerte, y ya sabes que ese trato nos conviene"

"Sí, voy a estar ahí a las 12 del día, tal vez antes"

"Perfecto. Nos vemos, salúdame a los Pimentel"

La llamada finalizó y Chris se quedó mirándome.

—Soy un niño consentido.  —dijo mirando hacia su celular.  —Trabajo de lunes a jueves... cuando me da la gana, sólo unas cuantas horas y mi padre me paga como a un ejecutivo... gano lo mismo, o más que algunos trabajadores y estoy ahí mucho menos tiempo que ellos.

—Por eso tienes tantos pesos en tu tarjeta. —dije asintiendo. —No te sientas mal, Chris. Es la vida que te tocó vivir.

—Tengo mi propio dinero y aun así no puso peros para comprarme la maldita cámara...

Volvió a presionar le botón de llamada y se puso el teléfono en el oído, no comprendí porqué.

"Hola otra vez mami... eh, es que lo pensé mejor, y... bueno... tengo mi propio dinero, no es necesario que gastes más en mí... yo sé, mamá, sé que no te molesta, pero creo que voy a empezar a comprar mis cosas, ya sabes, con mi dinero... excepto los regalos de Navidad y cumpleaños" soltó una risita después de su última frase. "Ok, mah. Adiós".