Pensando el león en cómo capturar un toro muy corpulento, decidió utilizar la astucia. Le dijo al toro que había sacrificado un carnero y que lo invitaba a compartirlo. Su plan era atacarlo cuando se hubiera echado junto a la mesa.
Llegó al sitio el toro, pero viendo solo grandes fuentes y asadores, y ni asomo del carnero, decidió irse sin decir una palabra.
El león le reclamó por qué se marchaba así, si nada le había hecho.
- Sí que hay motivo – respondió el toro –, pues todos los preparativos que has hecho no son para el cuerpo de un carnero, sino para el de un toro.
"Observa y analiza tus alrededores, así podrás prevenir muchos peligros."
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Fábulas de Esopo
RandomUna recopilación de aproximadamente 100 fábulas con sus respectivas enseñanzas Los publico porque me considero un gran fanático de fábulas desde mi niñez, y ¿qué mejor que mantener estas pequeñas historias en pie? Esta más que claro que no me perten...