Un cuervo, que había robado un pedazo de carne en el pueblo, fue a posarse sobre un árbol.
Lo vio una zorra, que deseando apoderarse de aquella carne, lo halagó largo rato. Después de elogiar su oscuro y brillante plumaje, le dijo:
- ¡Oh!, cuervo, tú serías el rey de las aves, si tan sólo tuvieras una fuerte voz...
El cuervo, para demostrarle a la zorra que no le faltaba voz, soltó la carne de su pico y comenzó a gritar muy orgulloso. La zorra, sin perder tiempo, cogió la carne del suelo.
- Amigo cuervo, si en lugar de vanidad tuvieras inteligencia, sin duda, serías el rey de las aves.
"No le hagas caso a quien quiera impresionarte con adulaciones."
ESTÁS LEYENDO
Fábulas de Esopo
AcakUna recopilación de aproximadamente 100 fábulas con sus respectivas enseñanzas Los publico porque me considero un gran fanático de fábulas desde mi niñez, y ¿qué mejor que mantener estas pequeñas historias en pie? Esta más que claro que no me perten...