capítulo 07

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Al llegar a la mansión Kim...
Apenas había JunMyeon estacionado el automóvil, Cuando Stephanie abrió la puerta y se bajó rápidamente, caminando a toda prisa hacia el interior de la mansión sin volver la vista atrás.

El mayor la observó sorprendido, nunca esperó esa reacción por parte de ella.
Sin embargo, internamente lo agradeció,
Estaba demasiado confundido y no sabía cómo enfrentar lo que había sucedido.

Stephanie entró rápidamente sin prestar atención a nada a su alrededor.
Pasó de largo por la sala sin percatarse que sus padres y su futuro suegro, estaban ahí.
Fué directamente a su habitación y se encerró en ella.
No quería hablar con nadie.

JunMyeon entró momentos después y su padre le pidió acercarse.
El joven estaba serio y los mayores intuyeron que la cena no terminó bien.
Sin embargo, no hicieron preguntas,
Cosa que JunMyeon agradeció, no tenía ganas ni ánimo de dar explicaciones a nadie.

Se despidió cortésmente y subió a su recamara.
Al pasar por la habitación de Stephanie se detuvo un momento frente a ella.
Deseaba entrar y hablar con ella, No sabía que podía decirle, sólo sabía que en ese momento tenía una extraña necesidad de verla.
Se recriminó su actitud y se alejó rápidamente, No tenía ningún sentido estar ahí.

Ya en su habitación, la cabeza de JunMyeon era un completo caos.
No podía apartar de su mente la imagen de Stephanie, mientras tanto, la chiquilla se encontraba en la misma situación.

No dejaba de pensar en JunMyeon y en el beso que le había dado.
No podía descifrar los sentimientos que ese hombre le provocaba.
Sólo sabía que algo no estaba bien.

✳️❇️

Los días siguientes antes de la fiesta de compromiso.
JunMyeon había evitado a toda costa ver a la chiquilla, aunque debía reconocer que se moría por verla, no entendía que le sucedía, Se sentía demasiado inquieto y se decía a sí mismo que sólo era la presión por la boda y todo lo que tendría que enfrentar después.

No dejaba de pensar en el beso que le había dado esa noche en el auto.
Aún tenía la dulce sensación de los labios de la chiquilla sobre los suyos.
Y aunque ya había tenido su muy caliente y desenfrenada reconciliación con MinAh , los labios de Stephanie, eran imposibles de olvidar.

La chiquilla tampoco había tenido mucho tiempo libre esos días.
Los preparativos de la boda y la fiesta de compromiso, la habían mantenido ocupada y llena de estrés.
En realidad Stephanie agradecía el no haber visto a JunMyeon esos días.
La idea de casarse le causaba cada día más temor, y ahora un sólo pensamiento era el que rondaba en su cabeza, llenándola de angustia.

Tendría que ser su mujer.

La sola idea le aterraba, ella nunca había llegado a nada más de un beso, nunca había pasado a segunda base.
Nunca había hecho el amor.

Se preguntaba si JunMyeon la entendería.
Si la trataría bien.
De sobra sabía que el mayor era un hombre apasionado, Pudo notarlo esas veces que la besó.
Pero también era posesivo y además, según ella, también era un Playboy.
¿Como se suponía que ella iba a tratar con un hombre así?.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos por la señora Cho, quién venía a avisarle que la esperaban para cenar.

-¿Señora Cho, está el señor JunMyeon en casa?-

Preguntó temerosa, la amable mujer la miró con ternura.

-Si señorita, el joven llegó hace un rato, También está esperando en el comedor -
Respondió la mujer con una sonrisa.

-¿Podría decirles que estoy dormida, por favor?-
Pidió suplicante y la señora Cho tomó sus manos para tranquilizarla.

-¿Sabe señorita? Lo mejor es enfrentar los problemas de frente y con valentía -

Dijo la sabía mujer mientras le sonreía cálidamente.

- Yo no soy valiente señora Cho -

Respondió la chiquilla con los ojos inundados de lágrimas.

- Oh...¡Por supuesto que lo es!...No cualquiera hace lo que usted hará por su padre -
Dijo y la chiquilla la miró con asombro.

-¿Usted lo sabe?-
Preguntó confundida.

- Lo siento si parezco entrometida señorita, pero llevo muchos años en esta familia, sé todo lo que hay que saber. No se preocupe por nada, yo estaré aquí para ayudarle siempre que lo necesite -

La chiquilla sonrió agradecida.

-¿Entonces les dirá lo que le pedí, por favor?-

- Claro señorita, no se preocupe, eso les diré-

la mujer salió de la habitación, dejando a Stephanie sumida de nuevo en sus pensamientos.
Temiendo por el día de mañana.
Temerosa de enfrentar a toda esa gente desconocida y aceptando un compromiso que estaba muy lejos de desear.

JunMyeon no pudo disimular la decepción que sintió al ver a la señora Cho regresar sin Stephanie al comedor.
Aunque se negara a sí mismo, se moría de ganas de verla.
No creyó para nada la excusa de que la chiquilla estaba dormida.
Sabía perfectamente que ella no quería verlo, y de alguna forma, eso le dolió.

✳️❇️

Era casi medianoche, cuando Stephanie salió de su habitación.
No podía dormir y para colmo, moría de hambre.
Se arrepintió de no haber bajado a cenar y decidió ir en busca de algún bocadillo, al fin que a esa hora, no esperaba que hubiera nadie rondando por ahí.

Estaba distraída terminando de preparar un sándwich, cuando una voz detrás de ella la sobresaltó.

-¿Podrías preparar uno para mí también?-

escuchó decir y se giró para ver de quién se trataba, aunque en el fondo, sabía perfectamente quien era.
JunMyeon estaba cruzado de brazos, recargado en el marco de la puerta, mirándola atentamente y con una sonrisa que la chiquilla no pudo descifrar.

Stephanie se quedó muda al verlo, no esperaba que hubiera nadie levantado a esa hora, y mucho menos él.
De pronto se dió cuenta de que sólo vestía su pequeña y muy infantil pijama.
Se sintió apenada, al punto de sentir como sus mejillas cambiaban de color.

JunMyeon se acercó a ella lentamente, sin dejar de contemplarla.
la chiquilla algunas veces le parecía irreal.
¿Cómo podía lucir tan adorable e inocente, y al mismo tiempo, tan sensual y seductora?

- Estaba seguro de que no dormías ¿Acaso no querías verme?-

Preguntó mientras le quitaba el sándwich que ella estaba por comer y le daba una mordida.
La chiquilla frunció el ceño y lo miró mal.

-No has respondido -
Insistió él.

La chiquilla no dijo nada y trató de marcharse, pero JunMyeon la tomó de la muñeca, haciendo que se detuviera.

-Mañana serás oficialmente mi prometida, ¿Seguirás ignorándome?-

Preguntó y en su voz había verdadero interés por su respuesta.

Stephanie tragó saliva, quería responder pero nada salía de su boca.
JunMyeon estaba demasíado cerca y además, no dejaba de mirarla de esa forma que la ponía nerviosa.

- Es tarde, debo ir a dormir -

Logró decir la chiquilla apenas con voz audible.
Se soltó lentamente del agarre del mayor y salió rápidamente de la cocina.

JunMyeon la observó mientras se alejaba.
Era absolutamente perfecta.
De pronto sintió algo parecido a una sacudida dentro de él, Cómo si apenas acabara de comprender su situación.

Esa chiquilla sería su esposa.

¿Cómo iban a funcionar si apenas se dirigían la palabra?
Era obvio que Stephanie no confiaba en él, Podría decirse que incluso, le tenía miedo.
Se preguntó cómo podría acercarse a ella, romper esa barrera e intentar conocerse.
A su mente vino el recuerdo de la única vez que la vió sonreír y no había sido a él.
Maldijo preguntándose qué tenía ese mesero insignificante que había logrado lo que él no.

Un Amor Inesperado (Kim JunMyeon)© #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora