Close your eyes

CAPÍTULO 12

- HERMANO -

( En la actualidad... )

— ¿Aún sigues guardando esa vieja canción? — Pregunta el pequeño Thomas con aire vacilante.

Conecto mi mirada con la suya. Noto esa extraña sensación que inunda los ojos de mi hijo. La compasión, el dolor, pero también la curiosidad. Por más que mirara sus ojos nunca me cansaría de ellos.

Por supuesto que había guardado durante tantos años aquel papel mustio. Arrugado, amarillo y con las letras casi ilegibles. Meto mi mano bajo el bolsillo de la rebeca y lo saco al exterior.

— ¿Quieres leer lo que pone en ella? — Alargo el brazo extendiéndole así el folio.

Sin pensarlo dos veces, Thomas, agarra el folio y se lo acerca a la cara. Lo desdobla delicadamente y empieza a leer en voz alta.

— I know, darling.

Everyone comes with scars but you can love them away.

I told you that I wasn't perfect, you told me the same.

I think that's why we belong together and unashamed.

I told you that I wasn't perfect, I know darling.

Al terminar de leer las letras de la canción que hace muchos años atrás me compuso Verónica, no puedo evitar derramar una lágrima.

— ¿Estás bien amor? — Agarra fuertemente mi mano.

— Estoy bien, no te preocupes. — Dije intentado restar importancia al echo de que estaba llorando.

Thomas respira hondo, vuelve a doblar el papel y lo deja sobre la mesa de roble. Él entiende perfectamente lo que esto me afecta, pero necesito soltar a fuera todos esos recuerdos que me queman el alma. Hace mucho tiempo que me perdoné, pero en mi interior aún existe ese remordimiento que me atormentó durante aquellos horribles años.

Sé que no debo pensar en el pasado, pero el mirar atrás y poder sonreír con orgullo sin derramar ni una maldita lágrima, es algo que me debo a mi misma. La superación. Mi superación. Aunque no lo hice sola, claramente. La persona con la que comparto ahora un anillo, un compromiso, una promesa, siempre estuvo a mi lado. Y siempre lo estará. Hasta que la muerte nos separe.

— Thomy. — El ojiverde gira la cabeza hacía donde yo me encuentro. — ¿Estás preparado para lo que viene ahora en la historia? - Pregunté seriamente, a la espera de su respuesta.

Él afirma con la cabeza lentamente, como si temiera saber más sobre la cruda realidad de mi historia. Pero Thomas estaba decidido a escucharla. Lo sé ya que fue él quien me lo pidió.