CASAMIENTO POR INTERES!!! (+18)

Visitas inesperadas de...

Edward POV

Llegué a Brasil por suerte sin contratiempos, cuando estaba todavía en el avión llamé a Bella pero me contestó Alice, diciendo que estaba ocupada, que si no quería que la torturara más de la cuenta, que la llamara al día siguiente, resignado trabajé un rato con Jane en línea.

Al llegar me estaba esperando Zafrina, ella había quedado al mando de todo el proyecto, al principio hubo algunas malas caras de los inversionistas, pero yo no era para nada machista en esta cuestión, por lo que la dejé de todos modos, no me decepcionó era la persona indicada.

Me hospedé en uno de mis hoteles y de inmediato comencé a trabajar, necesitaba estar ocupado, ya que no dejaba de tener ese presentimiento de que no todo estaba bien con Bella.

En la mañana siguiente Zafrina había arreglado un encuentro con las personas que no querían vender su terreno, allí me encontré con una señora mayor junto con su hija, la hija había dado su palabra que venderían, pero la señora no quería desprenderse de su casa, porque en ella había un árbol que perteneció a su esposo, lo habían plantado juntos antes de que él muriera, me pareció tan tierno y debería buscar una solución rápida y que no molestara a esta señora.

Hable con unos viveros que Zafrina tenía contactados y me confirmaron que podrían mudar el árbol hacia donde ella quisiera, por lo que arreglamos todo y pusimos en marcha la búsqueda de una casa nueva para las mujeres y su árbol, lo que me resultó fácil, porque como dije, Zafrina tenía todo solucionado.

En plena mañana llegó un mensaje de Alice que decía.

"Alice"- listo el pasaporte, viajamos antes de tiempo, no te pongas loco si no te contesta va en camino, salimos a las 12 hs., hora local.

Tenía que estar tranquilo, Bella estaría en mis brazos en no más de once o doce horas, después de todo solo dos días sin besarla o amarla.

En la tarde fuimos con Zafrina y unas personas contratadas del vivero para mudar el árbol, todos trabajaban para que se hiciera lo más rápido posible, ya que teníamos todos los permisos y tramites autorizados para comenzar con las construcciones.

La señora Mónica, la dueña de la casa, nos trató de forma muy amable y estuvimos hablando un buen rato mientras los empleados trabajaban para retirar su más preciado valor, ella no hablaba mi idioma, por lo que lo hacía a través de su hija y Zafrina, me hubiera gustado que estuviera Bella para que ella me tradujera, de solo imaginar lo sexy que se vería hablando en portugués, me fui a ayudar a los empleados con el árbol.