Anomalía [Higuel]

Tomando medidas

Ya era de noche y ambos chicos reposaban en la cama del moreno, el medio japonés le había dicho pedido a Miguel el convencer a su familia para quedarse por algún tiempo y que pagaría que eso no sería problema, el chico mexicano no tuvo problemas con eso, realmente deseaba que su nuevo amigo se quedara más tiempo.

Cuando le presentaron la petición al resto de la familia ninguno tuvo objeción, era lo menos que podían hacer después de salvar a Rosita, podría quedarse el tiempo que quisiera, lo único es que no tenían habitaciones, pero Hiro esperaba que Miguel pudiera compartir su habitación con él, claro mientras estuviera de acuerdo, la respuesta por parte de Miguel era más que obvia, no le importaba y de hecho deseaba que se quedara en su habitación.

Después de pedir permiso a la familia Rivera, el pequeño genio pasó el resto de la tarde haciendo llamadas, tendría que avisar a su tía que estaría fuera algún tiempo por un trabajo escolar, tuvo que pedir a Krei que le ayudara a cubrir el tema de la universidad y que le enviara algunos aparatos, ya que tenía una teoría y quería comprobarla antes de sellar la anomalía.

Krei no estaba seguro en un principio, pero no podía decir que no a Hiro, después de todo él le había salvado la vida, además confiaba en su buen juicio, así que hizo los preparativos necesarios, también hablo con el resto del equipo les menciono que era algo que tenía que hacer, no necesito más explicaciones aunque en un principio les pareció extraño tenían plena confianza en su pequeño genio.

M- Y ¿entonces? -Pregunto intrigado el pequeño moreno, ya que después de su visita al altar Hiro no le explico a Miguel lo que había querido decir, y no es que no le haya preguntado, pero cada vez que lo hacia Hiro solo le respondía que luego - ¿Ya es luego?

Hiro sabía a lo que se refería, en un principio no sabía cómo explicarle a Miguel lo que tenía en mente, pero ya que el mexicano se había sincerado desde un principio, el decidió hacer lo mismo.

-Muy bien, sé que dices la verdad, sé que ese mundo de los muertos existe y sé que podemos ir ahí

Miguel se le quedo viendo a Hiro, era una combinación de alegría y escepticismo - Ya sé que me crees, eso me quedo claro en la tarde, Quieres ver a tu hermano ¿verdad?

Hiro se quedó viendo a Miguel, ¿acaso había sido tan obvio? Se preguntó con una expresión de duda en el rostro - Si - contesto con una pequeña sonrisa mientras miraba al suelo.

M- Oye, sé que tu hermano está ahí y estoy seguro que estaría feliz de verte, pero... -Miguel dudo por un segundo, no quería darle falsas esperanzas a Hiro pero tampoco le quería decir que eso era imposible, aquella vez había sido un accidente y si le decía eso quizás decidiría irse.

El mexicano tenía una expresión de preocupación en su rostro -veras lo que pasa es que

H- No sabes cómo ir ¿cierto?

M- Lo siento pero no, ya te había dicho que aquella vez fue un accidente, fue porque me cayó un hechizo familiar - decía Miguel con una expresión de tristeza

H- No te preocupes, eso déjamelo a mí, pero si ocupare tu ayuda

M- ¿Cómo?, ¿Mi ayuda?

H-Pues veras, aun no sé cómo pero estoy seguro que con tu ayuda podremos hacerlo, aun no estoy seguro pero creo que tú y la guitarra son la clave

Hiro creía que si Miguel y la guitarra se unían, la energía que ambos emanaban se podría asemejar a la de una anomalía y entonces habría una manera de abrir un portal al mundo de los muertos.

M- ¿Yo y la guitarra?, ¿¡Te refieres a la guitarra de mi papá Héctor!?

H- Si exactamente esa, veras cuando te conocí estaba investigando una anomalía que es capaz de crear una distorsión espacio temporal que fue creada accidentalmente por un incidente que paso en mi ciudad, resulta que la anomalía no era una anomalía...

Hiro se detuvo, la cara de Miguel era de total confusión, parece que no le había entendido una palabra de lo que el genio había dicho, Hiro busco la forma de explicarlo de manera sencilla, entonces vio la guitarra y se le ocurrió algo

H- ¿Me permites? - señalando a la guitarra

M- Claro - Miguel tomo la guitarra y se la entregó a Hiro - ¿Vas a tocarme algo?

H- Jajaja como crees, no se tocar guitarra, pero mira -Hiro toco una cuerda haciendo que sonara - imagina que esta cuerda es la guitarra - el moreno afirmo con la cabeza, entonces Hiro toco otra cuerda - ahora imagina que esta otra cuerda eres tu

M- Ok pero sigo sin entender

Entonces Hiro toco las dos cuerdas al mismo tiempo - Ahora imagina que esto es una anomalía - Hiro observo a Miguel el cual parecía haber entendido

M- ¿Dices que yo y la guitarra somos una animal?

H- Anomalía, y si por así decirlo y una anomalía puede abrir una puerta a otro mundo, en tu caso eres como una puerta al mundo de los muertos

M- Ya entendí, pero aun así no sé cómo me abrirás - Dijo miguel sonriendo, haciendo referencia a que él era una puerta

H- No te preocupes ya encontrare una manera, tal vez tocando - regresando la sonrisa, que provoco en el moreno un sonrojo- pero primero debemos resolver una cosa, debemos recuperar la guitarra de tu Familia

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Un pequeñocapitulo como complemento del anterior, como podrán notar soy pésimo colocando títulos pero es lo que tengo hehehe, de nuevo agradezco los comentarios y los votos sube moral y como no podía faltar cualquier sugerencia y/o crítica para mejorar el relato será bien recibida.