Cita

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Hiro no tenía idea de lo que estaba haciendo ni cómo es que llego a esa situación, lo cual era raro, por lo general sabía perfectamente cómo manejar cualquier situación, si bien no siempre lo hacía de la manera correcta él al menos sabia elegir un curso de acción, pero en ese caso estaba totalmente perdido.

Era fin de semana y ya había planeado analizar los archivos que Baymax había conseguido, en cambio estaba sentado en la banca de una plaza, podía ver claramente la expresión de Miguel, él se sentía igual.

-¿Y qué te gusta hacer?- pregunto Rosa mientras se prendía del brazo de Hiro

Rosa le había pedido una cita a Hiro, este no supo cómo contestar, de hecho no recordaba cuando le dijo que sí, pero a juzgar por su situación actual no podía negar que la respuesta había sido afirmativa.

H- Pues emm, ¿diseñar y construir robots?- decía mientras observaba a Miguel

Miguel por su lado, tenía el deber del chaperón, y no es que los Rivera no confiaran en Hiro, de hecho era Hiro a quien Miguel estaba cuidando, y no es que desconfiara de ella, pero conocía a su prima.

R- Que interesante, háblame más de eso

Sabía cómo era capaz de acechar a los chicos que le gustaban al punto de hacer que se alejaran de ella, y peor aún a los que se atrevieran a rechazarla, Miguel tenía miedo, cualquiera de los dos casos podría hacer que Hiro se alejara, y tan solo pensar en eso le hacía sentir un dolor en el pecho.

En todo caso debía de cuidar que su prima no fuera muy "encimosa" y cuidar la forma en que Hiro la rechazara, aunque podría no rechazarla, pero por alguna razón pensar en esa posibilidad le provocaba el mismo sentimiento.

H- Pues ...- Hiro comenzó a hablar sobre sus proyectos de la universidad, rosa le miraba tratando de entender lo que le decía, mientras Hiro le miraba algo serio, sin interés.

La tarea de Miguel se dificultaba por la "petición" de su prima y decir petición era solo por llamarlo de forma amigable, lo correcto sería llamarlo orden bajo amenaza mortal, su prima le había "sugerido" que mantuviera su distancia de ellos o si no...

Bueno realmente no lo había amenazado, pero la intriga de no saber de lo que sería capaz su prima era más intimidante que una amenaza

Rosa notaba como Hiro no tenía interés, ya lo sospechaba por eso no se había ilusionado, estaba segura de saber lo que pasaba frente a sus ojos, pero necesitaba intentarlo, después de lo que paso aquella mañana pensó que podría tener una oportunidad.

La expresión en el rostro de Hiro se iluminaba cuando miraba a Miguel y solo a Miguel, cuando volteaba trataba de sonreír pero aun así Rosa veía claramente como se le opacaban los ojos.

Rosa dio un suspiro mientras miraba al piso –Ya que – murmuro, volteo con Miguel y con señas le indico que se acercara, su primo se acercó con miedo en la mirada –Sabes Hiro creo que serás un gran novio, pero no será conmigo.

Hiro lucia confundido ante las palabras de Rosa –¿Ehh? – Mientras Miguel se acercaba temeroso –Y creo que mi primo también será un gran novio -¿Ehh?- Ahora Hiro realmente no sabía de lo que hablaba Rosa, -Ohh parece que aún no se dan cuenta –decía con una sonrisa de cómplice –No se preocupen yo les guardare el secreto

M- ¿Que paso Rosa? - Pregunto el moreno con algo de miedo

R- Ya me voy, nos vemos en la casa

M- ¿Ok? – ¿eso era todo?, ¿Sin berrinche?, ¿Sin una escena?, Se preguntaba Miguel mientras Rosa se alejaba - ¿Qué paso Hiro?

H- No lo sé, en serio que no lo sé, no entiendo a las mujeres

M- Ya somos dos... ¿Y qué hacemos?

H- ¿Continuamos la investigación? –pregunto mientras le sonreía al mexicano

M- Me leíste la mente –Le respondió devolviéndole la sonrisa al Mitad nipón.

Anomalía [Higuel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora