Revelaciones

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Disculpen la demora

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Hiro y Miguel estaban en camino junto con el resto de sus amigos hacia el Lucky Cat Café en el pequeño auto de Wasabi, a pesar que Baymax se había desinflado del todo iban demasiado apretados, a tal punto que los dos menores del grupo se vieron en la ciertamente penosa pero no indeseada necesidad de compartir el espacio en el auto.

Wasabi estaba conduciendo, a su lado Baymax y Fred compartían el asiento del copiloto atrás del cual estaba Gogo, Honey tomo el lugar tras el asiento del conductor dejando al mitad nipón y al mexicano en el espacio central.

Si bien a Hiro le daba algo... bueno, mucha pena estar en esa situación en presencia de sus amigos, aceptaba que le resultaba un poco... bueno, muy agradable tener al mexicano descansando en su regazo, mientras este dormitaba acurrucado en su pecho.

Cada vez que el precavido Wasabi frenaba antes de cruzar una calle, Miguel salía empujado hacia adelante, por lo que Hiro se vio obligado (aunque no realmente) de cobijar con sus brazos el cuerpo del músico atrapándolo en un abrazo, obligando al menor a permanecer quieto en su pecho.

El genio podía sentir el calor de lcuerpo de Miguel, mientras que este se tranquilizaba escuchando los latidos de Hiro, que algo cansado reposo su cabeza sobre el cabello del músico cerrando los ojos un momento.

Había sido un día bastante agitado, habían sucedido demasiadas cosas y al parecer Miguel no lo había pasado mejor, cuando se encontraron no lo había notado, pero en cuanto entraron al auto y Miguel busco cobijo, Hiro se dio cuenta que estaba muy afectado, el cantante siempre hacia esas cosas melosas, pero cuando buscaba cobijo en lugar de darlo era una clara señal de que algo le pasaba.

Hiro no era muy bueno leyendo los sentimientos del resto de las personas, ni siquiera era bueno para darse cuenta de los propios y era aun menos habilidoso para tratarcon esas emociones ya sean las propias o las de los demás por lo que si bien se había percatado del estado de Miguel, no tenia idea de que era lo que debía hacer.

Aunque de alguna manera sentía que ya estaba haciendo lo que el cantante necesitaba, por alguna razón sentía que Miguel estaba tranquilizándose, y el mismo estaba entrando en un estado de calma, eso era lo que necesitaban, pasar un poco de tiempo juntos.

Si bien estaba disfrutando del momento,no podía sacarse de la cabeza la serie de eventos que provocaron el aparente extravío de su novio, aunque si bien según Miguel no se había perdido exactamente, y eso no parece haberle afectado.

Lo que mas le afectaba era básicamente lo mismo que dio las condiciones para que Miguel terminara extraviado, las fans locas, esas dichosas fans, lo estaban siguiendo mucho, prácticamente lo acosaban.

De no haber sido por que "se lo encontraron" en el súper, Miguel no habría que haber tomado ese camino por el callejón y no se habría encontrado con ese gato loco que le hizo tomar otra desviación mas.

Por qué seguían tanto a Miguel, porque llegaban a ese punto en que no lo dejaban tranquilo, Hiro necesitaba hacer algo y necesitaba hacerlo ya, no podía dejar pasar otro día mas esa situación, pero que podía hacer.

H -¡Eso es! - se dijo a si mismo abriendo los ojos y elevando la cabeza, después de meditar por unos segundos los pensamientos que pasaban por su mente

La única razón por la que seguían a Miguel, bueno a parte de lo obvio (si ya saben que, no se hagan), ahora que lo pensaba era lógico, por qué otra razón las chicas lo acosaban sin descanso, en parte era su culpa, y tenía que solucionarlo a como diera lugar.

Anomalía [Higuel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora