-¿Rose? ¡Hola! - Dijo alguien interrumpiendo mis pensamientos.
Di media vuelta y ahí vi parado enfrente mío un chico bastante atractivo, con una gran sonrisa viéndome fijamente con sus ojos amielados que me solían parecer muy familiares.
-Disculpa...
(No me había enterado de absolutamente nada acerca de Rose, estaba tan angustiado. tan preocupado tan destrozado.. Esa frase "odio amarte" eso fue lo que derramo la gota del vaso, ¿quién diría? duelen más las palabras que los golpes.. Todo este tiempo viví engañado, nunca supe lo que realmente era sufrir hasta el día de hoy. La perdí y la perdí simplemente la perdí).
(Toc toc toc). - Tocaban la puerta.
- ¿Quién? - Grite.
- Mike, abre. - Se escucho una voz irreconocible.
- Voy.. - Me levante del sofá y abrí la puerta.
*JODER ¿Qué hace aquí la tal Olivia?*.
- ¿Hola?. - Dije confuso.
- Mike, nunca me llamaste... - Dijo enojada. -Pero eso no es a lo que vengo. Ahorita le he visto a Rose.
- ¿Qué hay con ella? - Pregunte asombrado.
- Nada, solo que... Se que tú estas pasando por un mal momento y pues ella la esta pasando de maravilla sin ti.. - Puso una sonrisa de burla.
- ... ¿Qué?.. - Pregunté confundido.
- Tal como haz oído Mike, hable con ella y le pregunte por ti y ella solamente me dijo que para ella ya no existias y que por ella que te fueras al infierno, ya no te quiere...
- .... ¿Estas segura? - Trague saliva.
- Si Mike. No vez, ya no le importas y no sabe de lo que se esta perdiendo.. Cuantas dariamos lo que fuera por estar contigo.. - Dijo con una sonrisa picara.
- ¿Como se que no mientes?
- Porque no crees Mike, aceptalo, eres pasado y ya.
(Pase mis dedos entre mi cabello y me senté silenciosamente en el sofá, y sentí como mis ojos comenzaron a cristalizarse poco a poco).
- Tranquilo Mike, estoy contigo. - Se sentó al lado mío y acariciaba mi espalda. - No sabe de lo que se está perdiendo.
- Bien, ya puedes retirarte Olivia. - Dije friamente.
- Mike estamos en confianza por favor dime Oli, y se lo duro por lo que estas pasando y lo mejor es que estés acompañado.
- Bueno Oli, pero me gustaría estar solo.
- No Mike, no me ire. Tú me necesitas aunque tu lo niegues necesitas a alguien que te acompañe en estos duros momentos..
- Sí, pero ese alguien ya no me quiere. - Una lagrima bajo por mi mejilla.
- Traire un poco de tequila a ver si te tranquilizas.. - Se paró y fue a la cocina. - Valla, valla mira que me he encontrado. - Dijo entusiasmada mientras sostenía una botella de tequila "Don Julio". - Esto te ayudara tanto a ti y a mi.
- Bien, dame un poco. - Dije extendiendo mi mano esperando a que me sirviera.
(Ese poco.. Sinceramente se hizo un poco más de lo que debió haber sido. Es lo único que logro recordar).
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