Cualquier canción sonaba en la radio, lo cual fue algo a mi favor y lo usé para distraerme mientras Alex tenía la mirada fija en el camino al conducir.
Sí, había acabado en su coche siendo llevada a cualquier lugar para cumplir la petición de Alex: Hablar
-¿Ya me vas a hablar?-preguntó rompiendo el silencio tenso que habíamos generado.
-¿Debería?-respondí con otra pregunta sin mirarlo
Bufó estacionando el coche al meterse en el estacionamiento de un restaurante que ya estaba cerrado. Eran la 1:20 AM, mi celular no tenía carga y estaba segura de que mis papás iban a matarme al llegar a casa
-Si no quieres estar aquí conmigo, no te voy a obligar. Si quieres daré la vuelta y te llevaré a casa- sugirió rendido ante mi indiferencia y yo me apoyé en la puerta del coche mirando el restaurante con detenimiento
-Ya estoy aquí, dime de qué tanto insistías en hablar- dije rodando los ojos al sentir su mirada en mi y lo miré- Amenazaste a Jed para que viniera, debe de ser importante, ¿no?
Alex quitó la mirada de mi y la posó en el restaurante que teníamos en frente y suspiró al final
-Lo siento- dijo sin más y se creó otro silencio incómodo que ninguno de los dos parecía querer romper
Al diablo.
-Si no me dices lo que tanto tienes en mente ahora, juro que me voy a bajar y llamaré a un taxi o lo que sea para irme a casa- amenacé con seguridad y cansada de tantos de sus juegos.
Alex alzó las manos inocente al escucharme.
-Hey, tranquila. En primera, no te dejaría bajarte a estas horas e irte con cualquier persona y en segunda, me pones tan nervioso que hasta miedo me da hablarte- habló con sinceridad y solté una leve risa desganada, ahora yo daba miedo.
Wow
No dije nada cuando escuché como colocaba el seguro de niños para evitar que me bajara
-Habla- ordené
Por millonésima vez, Alex volvió a suspirar hasta que su boca se abrió mientras su mente pensaba en qué decir o por dónde comenzar
-Mi intención no era hacerte daño. Sé que no me crees y sé que es lo bastante obvio porque tu concepto de mí no es grato pero no quiero que pienses que lo hice para un fin malo..- lo interrumpí -
-Ya deja de repetir lo mismo, no te creo ¿Para qué querrías hacer eso?-pregunté del mismo modo que lo hizo Jed hasta ser interrumpida por el rubio
-¡Para ganar tu amistad!- exclamó desesperado y me miró antes de que yo hablara- Cállate por favor y déjame hablar
Estaba molesta, no me tragaría sus palabras de que solo era por una maldita amistad pero como no me quedaba de otra me quedé aquí sentada esperando a escuchar qué más tenía en mente para decirme
-Como dije, sé que tienes un mal concepto de mi pero yo no tengo la culpa de eso. Soy un chico de 20 años que está en la edad de querer experimentar cosas nuevas, enamorarse y cometer estupideces como cualquiera. Soy como tus dos amigos que se fueron con esas chicas y no dijiste nada pero sé que la causa es mi reputación, nosotros no obligamos en ningún momento a la gente para hacernos populares y ahora que lo somos, cuando llega un estudiante nuevo y escucha la palabra popular hacia nosotros lo primero que piensan es que somos arrogantes, pervertidos, idiotas y mujeriegos pero no somos así. Aunque Kyle tiene su personalidad, él no es arrogante ni idiota pero ese es el maldito estereotipo que la gente conoce al ver a alguien que destaca- explicó y al callarse aproveché para hablar yo

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Oh no, Alex.
Novela JuvenilAlex, André, Yoshua y Kyle han sido inseparables amigos desde pequeños al ser vecinos en la misma calle, uno al lado del otro. Cada uno tiene su propia esencia y son la clase de chicos por los que las mujeres matarían por tener a su lado. Lo que n...