Le Deux

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Al chico le caían gotas de sudor por la frente mientras que el oficial volteaba a verlo.

– ¿eh...? disculpe oficial.... – dijo nervioso.

El oficial le puso la mirada encima, trataba de reconocer su rostro, pero para la suerte de Lincoln su vestimenta nueva evitaba que pudiera serlo, lo único que mas o menos lo delataba era su pelo blanco como el que habían encontrado y recién robado Red y Blue.

– mmm... – sospechaba el oficial.

– s-sucede algo oficial? –.

– me eres familiar... dime ¿nos hemos visto antes? – decía con su mano en la barbilla.

– c-creo que me confunde con otra persona –.

– si... ¡si! ¡ya se quien eres! – dijo el oficial sorprendido.

Lincoln se veía acorralado, trajo saliva y el sudor le caía por todo el cuerpo, cuando de repente el oficial sacó una imagen para mostrar.

– ¡eres Silincoln Cloud! –.

En eso Lincoln se sintió confundido.

– ¿d-disculpa? –.

– ¡si!, eres tu el rapero Cloud – el oficial mostró la imagen – ¡cielos! mi hija adora tus canciones, jamas pensé que te conocería en un lugar como este –.

Lincoln se sentía algo extraño, pero a la vez bien porque no fue reconocido en su totalidad sino fue confundido con un rapero muy parecido a él, Cookie tomó la foto.

– vaya, Lincoln no me dijiste que eras rapero – dijo la chica.

– ¿así que tu verdadero nombre es Lincoln? ¡debí suponerlo! con el juego de palabras "Silicon" y "Lincoln" –.

Lincoln ahora solo podía sentir confusión y para terminar con todo eso dijo.

– s-si, b-bueno oficial, este será nuestro secreto, nadie más puede saber que estoy aquí o se armaría un caos – dijo el chico.

– ¡claro!, pero primer... – dijo mientras sacaba una pluma de su bolsillo – ¿me podrías dar un autógrafo para mi hija? – dandole la pluma.

Lincoln tomó la pluma y firmo la foto, después de eso se despidieron y continuaron cada quien con su camino.
Mientras caminaban los dos jóvenes miraban las atracciones para ver cual podía ser de su agrado.

– ¿que te parece si vamos a ver el espectáculo de las marionetas? – insinuó Lincoln.

– ¿aun te gustan esas cosas? – rió Cookie.

Lincoln se sintió algo apenado, ya eran las 7:27 de la noche y las luces del lugar empezaban a encenderse, el carnaval se inundo de bellas luces de colores, muchas personas se quedaban viendo mientras que otros seguían con su camino, una corriente de aire pasó por un lado de ellos dos, al notar de donde venía la corriente vieron que enfrente de ellos estaba un mirador que apuntaba a la ciudad donde todas las edificaciones tenían sus luces encendidas dando un lindo espectáculo.

– vayamos a ver – dijo Cookie.

Lincoln y ella fueron y se apoyaron en las rejas que evitaban una caída mortal, los dos estaban fascinados con todo, Lincoln volteo a ver por unos segundos a Cookie y notó que sus ojos brillaban con las luces de un hermoso color ámbar, el chico jamas había notado el color de sus ojos y por primera vez en todo lo que llevaba en el instituto sentía algo de atracción hacía ella.

– me encanta esta vista... – dijo la chica.

– ¿eh? – respondió Lincoln.

– me gusta esta vista, me hace sentir bien – la chica se dio media vuelta – mira todo esto, jamás pensé que un carnaval pudiera ser tan divertido y alegre –.

The friendzoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora