Estas muy cerca Alicia. (capitulo 22)

568 49 20
                                    

-Alicia, escúchame, por favor resiste falta muy poco amor, ya lo entiendo todo, solo resiste por favor no te vayas, te amo.

-¿Tarrant?,-dije sin fuerzas-.

-Si amor, solo debes despertar,-dijo con la voz quebrada-, Tienes que luchar.

Desperté de golpe y con la respiración muy agitada, estaba todo oscuro, me encontraba acostada así que intenté sentarme pero un dolor en mi torso no me permitió hacerlo, al tratar de ver que era lo que me causaba ese malestar me percaté que tenía una venda rodeando toda mi cintura, me dio algo de miedo, estaba recordando todas las cosas que me habían pasado en el último tiempo que estuve despierta y recordé que estaba escapando y que me lastimaron, rápidamente pensé en Cindy, ese último momento en que la vi ella no se quería ir, no sé si logró escapar si la mataron o... no lo sé, la preocupación era evidente en mi, pronto a eso una voz interrumpió mi estado, esta salió de las oscuridades.

-Eres estúpida,-esa voz causó escalofríos en mi nuca y en mis brazos , miré lentamente en dirección a donde se produjo esa voz infernal y ahí estaba... era Luzack viéndome furioso, sentí en ese momento que esto no saldría bien, ya no lo veía como él, era alguien muy diferente-, ¡RESPÓNDEME!

-No,-dije esforzándome mucho para que se escuchara algo-.

-¡Entonces!... ¿Qué hacías tratando de escapar de este castillo?... ¡matando a uno de mis mejores caballeros!, a caso en algún momento creíste que podías sobrevivir fuera,- tomó una pausa-,  y te diré una cosa sobre esa maldita perra que logró escapar, de seguro ya se la devoraron y debió sufrir mucho ,-Cindy escapó, eso me alivia mucho hay una posibilidad de que siga viva, deje de estar preocupada por ella-.

-Eso no es verdad, Cindy es fuerte,- mi voz era seca-.

-¡No estamos en un mundo lindo Alicia!, lo único que sacaste de tu estúpida aventura fue perder a la única persona que te apreciaba en este maldito mundo, a parte de las comodidades de una cama y la poca compasión que yo podía sentir por ti, ahora este juego irá según mis reglas, escuchaste,-Yo no quise responder,  sinceramente cada segundo que mis ojos ven su tonta cara lo llego a odiar cada vez más, él se paró rápidamente y presionó la herida de mi torso provocando un grito muy esforzado, sentí que me estaban clavando una flecha nuevamente, él se acercó a mi oreja y pregunto-, ¿Escuchaste? ,-yo afirmé con mi cabeza demostrando el dolor que sentía-, Entonces... que comience el interrogatorio... hace ya mucho tiempo que te estoy pidiendo que reveles el maldito Oraculum y tú sigues sin hacerlo así que si no lo revelas correrá sangre por estos suelos ¡escuchaste!, el tiro el Oraculum arriba de mi cuerpo-, estoy esperando.

-Luzack, nunca pude hacerlo,- tosí un poco y continué-,  ni cuando quise salvar a Tarrant, ¿qué esperas que haga ahora?

-¡Qué no escuchas!,- se acercó a mi y me tomó del vestido para levantarme-, harás lo que te pida aquí y ahora o simplemente morirás.

-Señor,- Escuché la voz de otra persona, el lo ignoró por completo por mirarme con odio aun sin soltarme del vestido-, ¿Señor?

-¡¿QUÉ?!,-Grito soltándome al fin, me golpeé la cabeza fuertemente y me quejé-.

-Esta todo listo.

-Déjalo a lado de ella,- lo dijo sin dejar su alteración, pronto sentí algo de calor y vi que era un horno pequeño-, Mira Alicia, te daré cinco oportunidades para que hagas tu trabajo... escucha bien esto, si tú llegas a la seis tendré que decirte que ya estarás muerta, no llegues a la seis si quieres vivir, así que habla.

-Luzack, no lo recuerdo.

-Esto es una pena,-el tomó mi brazo y me sentó de forma brusca, para luego tomar un fierro que estaba en el horno, me vio a los ojos y rápidamente las puso en mis manos, siento que al fin me salió la voz, grité más fuerte que en toda mi vida, sentía el olor a carne quemada, el dolor que  provocaba que mis manos tiritaran  y a la vez como se sedaran mis brazos, mi rostro estaba lleno de lagrimas,- Luzack me vio, tiró el fierro y gritó como un Lunático -, Cada día te odio más, quiero ser yo y no me dejas, ya no puedo hacer esto, ya no quiero sentir esta culpa por hacerte daño, eso me hace débil, si te mató será solo una vez y ya,- comenzó a darse vueltas por el lugar en silencio, lo único que se escuchaba era mi sollozo, esto duele mucho, porque debo pasar por esto... nunca quise esto-, tendré que hacerlo... debo hacerlo, así todo acabará,-el me observó con angustia pero pronto se perdió esa humanidad que aparece de vez en cuando-, ya esta decidido... no habrá otras veces, encontraré la forma de revelar este maldito papel,-el sacó un cuchillo y me dijo-, Hasta siempre Alicia.

Alicia, vuelve Alicia.  (Tarrant y Alicia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora