—¿Te das cuenta que hemos conseguido a dos de las chicas más buenas de todo Diringher?
Acababa de contarle a James que le había pedido a Emmeline ir conmigo al baile. Obvié que fui antes con Rebecca.
—Mmmm…
—Este va a ser el mejor Halloween desde… bah, a quién le importa.
—En serio —dije incorporándome en mi cama—, ¿qué va mal contigo? Irina Britt está buena, lo admito, ¿pero vale la pena tu obsesión con ella?
James me imitó y dejó su libro de encantamientos. Me miró durante todo un minuto y me removí incómodo en mi sitio.
—¿Lo vale? —dije cuando me di por vencido en el duelo de miradas.
—Sí… por fin he recordado dónde he visto antes a Irina Britt.
Di un respingo.
—¿De qué estás hablando?
James se puso de pie mientras se pasaba una mano por el cabello. Estaba nervioso.
—De un baile.
—No me obligues a sacarte las respuestas a cucharadas, suéltalo.
Algo raro estaba pasando: el chico temblaba. Y empezaba a asustarme.
—Es que… mira, fue en un baile hace mucho tiempo. Una noche que conversamos sobre algunas cosas. No lo entenderías…
—Creí que habíamos establecido que el idiota eras tú.
James se echó a reír alegremente.
—Es que era un baile privado.
Alcé las cejas.
—¿Privado?
—No, es decir… un baile de la aristocracia, de las viejas familias.
—¿En serio la gente rica sigue haciendo eso? —pregunté bufando—. Admítanlo hombre, Igereth ya no necesita nobleza y sangre pura. ¿No hay un acuerdo de la Cofradía sobre eso como… desde hace cinco mil años?
James se encogió de hombros.
—Supongo que sí, pero les gusta mantener esas tradiciones absurdas. No creas que no lo odio, es sólo que cuando te metes en esa mierda, en serio te acostumbras.
—Vale, vale, Irina Britt —dije intentando no desviarme del tema.
—Me dijiste que pertenecía a una familia importante, ¿recuerdas? —asentí—. Bueno, lo estuve pensando. Si la Cofradía ha aceptado que sea un híbrido, debe ser algo grande. Conozco a todas las familias importantes que vale la pena conocer, mi madre me ha llevado a reuniones desde que tengo memoria. Así que sólo repasé las familias de la alta aristocracia y me acordé de ella. Y ese colgante ayudó mucho…
—¿Cómo puedes estar tan seguro? Un baile de la aristocracia… debían ser montones de personas estiradas.
—Sólo había siete familias en ese baile, Kyle.
Pensé que bromeaba pero James estaba más serio de lo que nunca lo había visto.
—Estás de broma —dije incrédulo—. Sencillamente no puede ser.
—Hay grados de nobleza —dijo James. Tenía la mirada perdida—. Pero no importa, son cosas del pasado. Y además no quiero que… ya sabes, me trates diferente por enterarte que soy de una familia rica.
—Ni aunque fueras el rey de los hechiceros voy a dejar de considerarte medio idiota, en serio.
—Bien —dijo James recuperando la sonrisa—. Entonces puedo decirte sobre el grado más alto, casi la realeza. Allí vamos nosotros.
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La marca del lobo (Igereth #1)
FantasyGanadora Premios Watty 2014!! Él: El nuevo rompecorazones del instituto. Ella: La piedra en su zapato y la chica más peligrosa que podrías conocer. Sus amigos: Los testigos de una historia que, de repente, empieza a ir más lejos que la extraña vida...