Capitulo 12

3.2K 114 14
                                    

Narra _______.

Sentí unos labios húmedos por toda mi cara lo cual hizo que me despertara sin ánimos.
Lo primero que miré fueron los ojos de Cornelio.

—Buenos días— me sonrió.

—¿Que tienen de buenos?— pregunté de mala gana.

—¿Que tienes?— me preguntó borrando su sonrisa.

—No quiero hablar contigo.

—¿Por qué? ¿Que te hice?

—Oh, nada más me lastimaste jalandome del cabello, casi me pegas y me amenazas.

—Igual es parte de mi trabajo, eso se supone que hacen los secuestradores ¿No?— dijo de mala gana y me dejó de abrazar. Eso me dolió, el nunca fue así conmigo.

—Haaaa— bufé indignada.— Las chicas tenían razón, ya salió el verdadero Cornelio.

—¿En que tienen razón?— alzó una ceja mientras tensaba su mandíbula.

—Que solo me tratas bien para que me deje coger.— Cornelio estalló a carcajadas.

—Estas loca, si yo quisiera ya te hubiera cogido y punto, nadie se interpondria. Aunque si te traigo una ganas.— me miró con cara de pervertido mientras mordia su labio inferior. Se veía sexy, queria comérmelo a besos pero soy demasiado orgullosa.

(...)

Ahora nos encontrábamos todos en el comedor desayunando, algunos seguían durmiendo y los demás estaban súper crudos incluyendo a Cornelio.

Y como estaba enojada con él no le dirigía ni la mirada.

—Ya terminé— me susurró al oído. No le conteste— Te veo arriba.— sin más se levantó de la mesa y subió a la planta alta.

Yo lo ignoré completamente y seguí desayunando tranquilamente.
Todos iban acabando y se iban retirando, hasta que me quede sola.
Siempre era la última en terminar de comer con mis amigos y familia, aquí no iba a ser la excepción.
Además hace varios días no como bien. Ya parecía pinche anoréxica.

Cuando termine por fin de desayunar y dejar de estar pensando me levanté de la mesa y recogí mi plato junto con el de Cornelio ya que en mi casa me habían enseñado a levantar y lavar mi propio plato.

Lave rápidamente nuestros platos y camine decidida a irme a dormir un rato al cuarto.
Subí las escaleras de la grande casa y camine por el largo pasillo.

—¿Qué haces aquí?— escuché la voz de Cornelio del otro lado de la puerta de nuestra habitación. Abrí un poco la puerta sin hacer ruido.

—Vine a divertirte un poco— Dijo una chica rubia, estaba de espaldas a mí así que no la reconocía. La chica se quitó una bata que traía y quedo solo en ropa interior. Alce una ceja inconcientemente.

La chica empujó a Cornelio a la cama y se subió encima de él provocativa.

—Yo te daré lo que ________ no te ha dado.— esa voz, la conozco.— ¿Porque estar esperando a una niña si puedes tener a una mujer como yo?

—Suena tentador pero no gracias. ________ se me hace más sexy.— dijo Cornelio, me sentí halagada.

—No nos hagamos, solo la quieres en tu cama porque es virgen.

—Salte de mi habitación por favor— bufo Cornelio.

—Vamos Cornelio, podemos divertirnos un rato.— insistió la rubia.

—¿Que no oíste que te fueras de aquí?— entre hecha una furia y con las manos en mi cadera. La rubia volteó a verme. Era Camila. Vaya, con esas amigas para que quiero enemigas.
Cornelio me miró con una sonrisa de lado.

—________— dijo Camila con una risita cínica.— Nos estábamos divirtiendo un rato.

—Ya veo— dije con notorio sarcasmo.

—¿Puedes dejarnos solos?— dijo otra vez esa perra.

—Estoy en mi habitación, váyanse a otra habitación si gustan— me crucé de brazos— Cornelio— dije para que el hablara.

—Ya oíste a mi novia— se dirigió a Camila— ¿Quieres ayuda para salir de aquí?— Cornelio me miró cómplice.

—Lo único que quiero es a ti guapo— dijo mirando a Cornelio y lo beso.

—Bien— deje caer mis brazos a los lados.— Creo que quieres ayuda.

Me acerqué hasta ellos y la tomé del cabello alejandola de Cornelio, baje su cabeza casi hasta el suelo y así la arrastre hasta la puerta, ella apenas y podía estar de pie y caminar. La empuje afuera de la habitación, ella cayó al suelo y yo cerré la puerta de un portazo.

—Esa es mi chica— dijo Cornelio cuando voltee a verlo— Me gusta que defiendas lo tuyo.

—En primera, no soy tu chica, segunda no somos nada y tercera solo la saqué porque quiero dormir.

—Duermes mucho mi amor.

—No me digas mi amor— voltee los ojos y me acosté a su lado ya que él no se había levantado para nada. Sabia que solo lo hacía para molestar.

—Hace rato demostraste todo lo contrario.

—Ya te dije, solo quería descansar— le di la espalda— Puedes irte con ella si quieres, solo déja dormir a esta niña.

—Mi niña— sentí que me envolvio en sus brazos. ¡Maldito! ¿Cómo hace para que lo perdone tan rápido y lo quiera abrazar y besar por horas?

 ¡Maldito! ¿Cómo hace para que lo perdone tan rápido y lo quiera abrazar y besar por horas?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Sigo molesta contigo— dije indiferente.

—Me amas— rió.

—Si claro guapo, te amo demasiado— dije sarcástica.

—Lo sabia— beso mi cachete. — Voltea— ronroneo en mi cuello lo cual me causo cosquillas.— Anda— beso mi cuello. Cerré mis ojos y lo ignoré.
Después sentí muchas cosquillas en mi estamago, me moví retorciendome de la risa y luego sentí a Cornelio encima de mi. Dejo de hacerme cosquillas y me miró a los ojos.— ¿Me perdonas?

—No— dije seca.

—¿Ah no?— me miró amenazante, me tomó de las muñecas con una sola mano y puso mis brazos por arriba de mi cabeza y comenzó a hacerme cosquillas de nuevo.

—Est...está bien, está bien— dije rápido— Te perdono.

—Esa es mi morra— beso mis labios y luego se acostó a mi lado y me abrazó fuerte.— Te quiero celosita.— pronunció. ¿Qué pedo? ¿Dijo que me quiere?

—Cornelio— lo llame y se separó un poco de mi sin soltarme para verme a los ojos.

—¿Si?— me sonrió de lado.

—Pellizcame— le ordené, me miró raro pero con una mirada le dije que hablaba encerio y que hiciera lo que le pedí. Me pellizco la nalga y me dolió un poco.

—¿Que pedo morra?— rió.

—Solo quería asegurarme de que no estaba soñando.

Él estalló a carcajadas, yo me uní a sus risas.

—Tambien te quiero— dije, él me sonrio y me dio un pequeño beso.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Holi, ayer ya no subí porque no tenía ideas jsjsjs pero mi hermana me dio esta idea del capítulo de hoy y pues aquí está, el final se acerca y será inesperado pero habrá segunda temporada 🤙🏼❤️

Gracias por ser pacientes, las quiero plebes. Bonita noche 🙏🏼✨

Stockholm syndrome | Cornelio Vega Jr.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora