Una nueva vida (GOT7)

El reencuentro

Por fin na un poco pude volver al colegio, no sabía a quién pa lo que le quería ver más, si a Jesús, que se pasó todo este tiempo escribiéndome, a pesar de que le dejaba en visto, o a Joseca, que de él lo que no sabía má nada.

De tan grande que era el colegio, me perdí na un poco, en la sección de artes sique ya estaba. Hice gua'u como que estaba recorriendo nomás, ni un cara de desesperación porque ya había sonado la campana y era la única bobasa fuera de clases. Me fui y me senté nomás en uno de los banquitos, esperando a que sea el recreo, y en eso aparece un pirú chalái, no sé de dónde sacó tanta fuerza para estirarme luego hasta un pasillito escondido.

-Nde, ¿no tenés piko miedo de que te pillen las monjas? -Nderakore, cierto que ijargel ko kuñases. -Además, esta no es tu sección, sos nueva, ¿verdad?

-El primer día nomás vine y me olvidé dónde quedaba mi curso... -Ndofaltái ko la pelada desde que llegué a Asunción, espero nomás que no se ría de mi este mitã'i piernas de palito salado.

-Con razón, normal eso es cuando sos nueva. ¿Cómo te llamás? Yo soy Bartolomé, no te digo mi apellido porque re hendy es. Por tu uniforme veo que sos de Sociales... -Hesú che dio, no se callaba el Bartolito, apenami le pude decir mi nombre que él ya seguía hablando, mientras me acompañaba hasta mi sección, me contó toda su vida en un sapy, le miré un rato y re que se arreglaba mejor que yo.

Resumiendo, la profesora ajeja'o porque llegué tarde, no es nomás luego mi día, encima me hizo sentarme al fondo, lejos de Joseca, apenami veía su cabeza desde acá. Otro también que no se callaba un segundo, tanto que la profesora terminó echándole de la clase.

Pasaron los meses, ya era junio, y todo el colegio se estaba preparando para el festejo del "San Juan". Seguro quieren saber qué pasó en todo ese tiempo, mba'eve, ya no escribía más tanto con Jesús, conseguí el número de Joseca gracias al grupo de whasap del curso, el único con el que hablaba era con Bartolito, no sé si debería decir que se volvió una "amiga", porque todo mariposa luego vuela por él.

Volviendo al San Juan, si o sí todas las secciones tenían que preparar su estan ma'embo, y a mi sección le tocó preparar las comidas típicas, gloria al cielo, para comer nomás iba a estar presente ese día, mba'e cuidar el estan piko, hay que degustar.

Y bueno, llegó el día, había tanta gente que si me pagaran por pisar y chocar personas, hace rato ya que no iba a necesitar de mi beca. Andaba hina con un pastel mandi'o en una mano, y un pajagua en la otra mano, hasta que siento que alguien me tocaba la espalda, ayna, justo ko ahí me picaba.

-¿Vos sos Ermelinda? -Nde tavy, era la kuña que estaba en el perfil de Jesús, cómo gua'u me conocía, me voy a hacer nomás de la desentendida.

-Sí soy, ¿te conozco? -No sé qué lo que quería, pero su cara no me daba buena espina, parece que hace rato ya hizo pelota tatá de mi en su mente.

-Una cosa nomás te quiero decir, y quiero que le dejes de escribir a mi novio, nde campañera. -Sabía luego que le gustaban mayores, pero... ¿mba'e la he'iseva? Cuando estaba por agarrar mi pastel mandi'o y meterle por su ojo, apareció Jesús. De lo que te salvaste nde mal teñida.

-¿Abril? ¿Qué haces con Ermelinda? -Angana él ko no sabía que su novia vino a interrumpir mi momento de paz y engordamiento.

-Le estaba preguntando si no te vio nomás, te estaba buscando por todos lados. -Le dijo con su carita más falsa de jagua'i mojado, se puede piko ser más caradura, encima me miró y me sonrió, como si hace rato no me haya dicho "nde campañera".

-Bueno, ahora que se encontraron, les dejo solos... -Intenté irme, porque ya me daba todo pyahái, pero alguien más me atajó, olí nomás su perfume y casi escupí todo mi empanada.

-¿No me vas a saludar luego? -Añarakopeguaré, Yiñon.

-No sabía que ibas a estar por acá...

-Jesús me invitó, y me contó que estaban en el mismo colegio, y... te quise ver. -Mi corazón hizo todo shururú otra vez, por favor na que se le caiga el Judas Kái por su cabeza.

Adelanto del próximo capítulo...
-Erme, tenemos que irnos a San Pedro del Ycuamandyjú, tu abuela se tropezó con una gallina y se sacó de lugar su cadera. -El karma por mentirme ese es.