Deseo, Sexo y Juegos a Ciegas ❤

Capítulo 21, Parte I.

______'s POV.

-Tomate esto.-me ordeno Anthony hablando entre susurros. El dolor de cabeza que tenía era increíble. No volveré a beber mientras vida tenga. Pensé. Quite las manos de mis sienes y cogiendo el vaso me lo lleve a la boca el primer trago y eso hizo que me dieran nauseas.

-Pero... ¿y qué coño tiene esto?-pregunte gritando y provocando que mis sienes palpitaran.

-Cálmate, esto te pasa por llevarte de la señorita vive la vida loca.-dijo él reprochándome, mirando a Erín quien no podía ni hablar de dolor de cabeza.

Coloco sus palmas en sus oídos y nos hizo una seña de que calláramos.

-¿Cómo supiste donde estábamos?-pregunte bebiendo un trago del horrible zumo.

-No supe. Iba en camino pero llegaron con tu amigo.-dijo el dándome la espalda.

-¿Qué amigo?-pregunte alterada.-no me digas que tuvimos sexo sin siquiera saberlo.

-¿Tuvimos sexo?-hablo preguntando por primera vez Erín.

-Cálmense. No tuvierón sexo, al menos que yo sepa. Tu amigo las trajo y se fue. Por cierto le vomitaron el traje.-dijo el riendo. Me mordí el labio.

-Seremos el cotilleo de los medios.-hablo Erín. Y rió con malicia.-espero Tom lo vea, claro que me vea con el amigo.-dijo ella riendo y borrando su sonrisa.- ¿era lindo?-Anthony rodo los ojos y se encogió de hombros.

-¿Lo conoces tú?-pregunte sin mucho interés.

-No. fue la primera vez que lo vi. Su nombre es Linux.-dijo. Mi ceño se frunció.-dijo que eran amigos en la secundaria.-mis ojos se abrieron.

-Linux.-dije mirando a Erín.-claro el chico del Not Cracker.-dije acordándome de solo esa parte de la noche y nada más.

Luego de que bebiéramos la porquería que nos había preparado Anthony para quitar la resaca, dormimos, él se quedó a cuidar el niño, a veces creo que él es más madre para el niño que yo. Cuando nos despertamos Erín y yo, ya era de tarde comimos algo y luego fuimos a jugar con Devlin. El chiquillo solo reía, le encanta estar con la tía Erín.

Las puertas del elevador se abrieron y por ella salió Alejandro Cooper. Nuestro manager. Oh estábamos en problemas.

-¿Quiero saber en qué pensaban ustedes al ir a un bar de mala muerte a beber y a gritar como locas?-pregunto arrojándonos dos revistas y un periódico con nosotras bebiendo y saliendo del bar con Linux quien se veía relajado y con otro chico.

-Lo sentimos.-dijimos Erín y yo al mismo tiempo mientras estábamos sentadas en la sala de la casa siendo sermoneadas por nuestro sexy y guapo Manager.

-Saben las piezas que tuve que mover para que TÚ.-dijo señalándome.-no salieras en las noticias casi comiéndote al idiota de la foto.-dijo el mirándome con ira. Me estremecí.

-¿Qué?-grite.- yo no hice nada malo. No que recuerde.-dije luego retorciendo mis manos en mi regazo.

-Bien lo dijiste, que tú recuerdes. Y tú.-señalo a Erín.-en la próxima no te pongas esas pantaletas tan feas si piensas abrirte de piernas en público.-dijo él. Ella se sonrojo. Y yo reí a carcajadas. Él estaba molesto pero no le duraría mucho. Él nos ama. Se sentó de golpe en el sofá que estaba enfrente de nosotros. Puso sus manos en las sienes.-me van a volver loco.-dijo frotando su cara repetidas veces.

-No te enojes Cooper.-dije yo parándome subiéndome a su regazo como tenía por costumbre hacer. De forma que la planta de mis pies junto con mi trasero quedaran en cada una de sus piernas. Y me acomode recostándome de su pecho. El me abrazo y beso mis sienes.