Vale:
Sentí que alguien me hacia cariño en el pelo y me desperté de un golpe.
-¿Que mierda?- abrí los ojos con paja. No había nadie en la pieza y yo solo estaba acostada, no llevaba el pijama, solo la ropa del día anterior.
Me dió un poco de miedo y salí de la pieza.
-Despertaste.- sentí una voz.-Tenemos que hablar.- se paró del sillón acercandose a la cocina.
-¿Hablar de que?- respondí cortante y fui a preparar café.
-De nosotros.- se calló, pero continuó.-Vale, no estamos bien. Estamos peleando por puras hueás y hace rato ya no hacemos lo que haciamos antes. Cambiaste.- se apoyó en el mesón.
-No, cambiaste tú.- contesté a la defensiva.
-No eres la misma, he estado detrás de tí desde que tenemos quince años y recién hace un año me hiciste caso.- se desordenó el pelo frustrado.
-Erai terrible hueón po.- tomé una taza y le eché dos cucharas de café.
-¿Al menos sabí que día es hoy?- me miró dudando, sus ojos cafés me pusieron nerviosa.
-¿Sábado?- serví el agua y tomé un sorbo del café.-¿Es tu cumpleaños? Chucha, me olvidé.- moví la cabeza negando.
-Cumplimos dos años juntos.- sentí que dejé de respirar.
¿Cómo chucha no me acuerdo?
-Perdón, no me acor...- me interrumpió.
-¡Está claro que no te acordaste po!- pateó una silla.
Chucha, la cagué.
-Perdón, no sé donde mierda tengo la cabeza.- susurré. A pesar de que me había olvidado, no me sentía culpable y no sabía por qué.-Si quieres...podemos salir.- intenté decir, tenía miedo de lo que pudiera responder.
Suspiró y se desordenó el pelo, de nuevo.
-Ya, salgamos.- se fue a la pieza y cerró la puerta.
[...]
Nos subimos al auto y no sabía donde mierda íbamos.
-Maneja más lento.- el hueon iba demasiado rápido.
Estaba enojado, sus ojos demostraban eso.
-¿Podrías dejar de estar enojado?- lo miré preocupá.
-Chucha, perdón.- suavizó su expresión. Me dí cuenta de que ibamos a comer.
Se estacionó en un lugar, nos bajamos del auto y fuimos a comer. Una vez allá, comenzamos a pedir algo para comer.
-No me gusta que peleemos.- me tomó de las manos.
-A mi tampoco, pero perdón por olvidarme.- hice un puchero y él me sonrió.
-No importa, yo también me olvido de muchas hueás.- me besó.-¿Podrías guardar mi celular en tu cartera?- me preguntó pasandome su celular.
Sí.-le sonreí y lo guardé. Cambié de tema.-Te amo y gracias por hacerme feliz estos dos años.- le contesté y le dí un beso de devuelta.
-Yo igual te amo.- contestó. Separamos nuestras manos porque llegaron nuestros platos.
Hablamos de cosas que habíamos pasado antes y de muchos recuerdos que teníamos juntos.
-Tengo una sorpresa, pero está en la casa.- el corazón se me aceleró caleta cuando escuché eso.
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¿Me enganché de un mateo? [CHILENSIS]
Historia Corta¿Que pasa cuando la Vale es la hueona yeta que ve a sus amigos ser felices en el amor y ella no? ¿Que pasa si lo yeta se acaba?