¿Always Together? (Siempre juntos)

CAPÍTULO 41

Wow eso si fue impresionante.

Escucharlo decir aquello sólo hizo que sintiera un pinchazo de culpa.

Me preguntaba qué pensaba, que pasaba por su cabeza. ¿Que estaba loca? ¿Que sufría de bipolaridad?¿Que era incapaz de entenderme?.

Bueno, aquellas eran cosas que yo pensaba de él ocasionalmente.

Me sentía desorientada, muy pérdida no sabía que responder sobre aquello. Pare de leer, cuando todo aquello volvió a tornarse demasiado para mi.

Mi única intención era saber la verdad, acaso eso era algo malo para él. O quizás ya me estaba acostumbrando a sus respuestas maleducadas.

Quizás yo le estaba dando demasiadas vueltas al asunto.¿ Era raro que se sintiera la tensión entre nosotros a pesar de no estar frente a frente?.

¿Por qué sentía esa necesidad de saber toda la verdad? ¿Por qué me importaba tanto?.

Mi mundo se paralizó en ese instante. Miles de ideas venían hacia mi cabeza.

Aunque ya sabía que no obtendría respuesta alguna por parte de él, no dejaba de pensar si todos esos abrazos, besos, salidas e incluso promesas que me había echo eran ciertas; o eran tan falsas como él.

Entonces llegué a la conclusión, de que estuvo fingiendo todo este tiempo.

Pero no tenía sentido engañarme así, porque algún día me daría cuenta de aquello.

Si, dirán que fui una tonta y que no me di cuenta. Que estaba más que claro que él ya no sentía nada por mi.

Sé que es una locura , pero realmente estaba enamorada de él.

Solo había una cosa, solo una ultima cosa por saber.

Quería saber si cuando nos juramos "juntos por siempre" era real, o solo una mentira más. Me sentí usada, vacía, sólo fui acaso una distracción?.

Y me di cuenta.

En realidad yo no le importaba, nunca le importé y saberlo de esta manera derrumbó lo único bueno que quedaba en mí.

Y el dolor se convirtió en rabia.

Decidí enviarle un último mensaje, algo corto y claro.

-Devuélveme todas las cosas...
***************************************
Tardó unos cuantos minutos en contestar. Cada vez me ponía más nerviosa.

-¿Por qué?

Suspire derrotada.

Esa era su magnífica respuesta……

.- Mmmmm, Ok entonces no piensas responder.

Al parecer nuevamente ignoró mis mensajes. Me carcomía saber que estaba conectado y que no quería hablar conmigo.

Qué patética soy.!

Su fría respuesta confirmó mis sospechas, quería enviarle un último mensaje para que así supiera que aún existo.
Pero no! Hice todo lo contrario.

No podía cometer el mismo error dos veces. No era tan tonta.

Pase algo de tiempo mirando vídeos en YouTube, pero me aburrí muy rápido.

Mandé un segundo mensaje como un intento patético de arreglar lo que había dicho en el primero. Enrique no contestó, lo cual me hizo sentir peor.

Lo sé, lo sé.

Dije que no sería tan tonta, como para volverle a enviar un mensaje nuevamente.

Pero que les diré! Pues caí, si caí bajo el efecto de enamoramiento masoquista.