Era Cass. Iba vestida tan impecable como siempre pero se había quitado sus gafas vintage. Me sonrío como Cheshire. Y de repente todo se volvió negro. Sentí como unas manos me cogían de las piernas y de los brazos antes de desvanecerme.
- Ya sabes que hacer - Susurró una voz.
Mierda. Sentía que mi cabeza iba a explotar. Intenté mover mi brazo derecho pero algo tiraba de él. Sentí frío en mi muñeca. Intenté abrir mis ojos pero no podía. Había demasiada luz. Escuché una risita. Creo. Luego un puñetazo en mi mejilla. Me intenté echar para atrás. Pero me topé con una pared. Sentí el frío de ella. Intenté protegerme el estomago. Mi bebé. Él estaba en mí. Y yo no lo estaba protegiendo. Empecé a llorar. Y a rogar que no le hicieran daño. A él no, por favor. Siguí rogando. Pararon durante 5 segundos. Y después más golpes. Golpes que no podía parar. Y más llanto de mi parte. Intenté resistir todo lo que pude. Pero hubo un momento en el que volví a perder el conocimiento.
- Debe de haber un error - Era la voz de un hombre. Intenté abrir los ojos pero no podía.
Y nos estoy segura de si me volví a dormir o desmayar. Quién sabe. Lo unico de lo que me di cuenta fue de que al volver a despertarme estaba todo oscuro. Mi primer pensamiento fue que me habían tapado los ojos. Pero me empecé a acostumbrar a la poca luz. Y me di cuenta de que estaba en una habitación pequeña que tenía un sofá en frente de la cama en donde estaba acostada y un taburete al lado. Me intenté sentar en la cama. Pero el dolor me recorrió el cuerpo. Solté un gritó. Escuché pasos rápidos y ordenes. Después como le quitaban el cerrojo a la puerta y el ruido de un arma. Me toqué mi vientre. Lo protegería siempre. Oí susurros y de repende un serie de hombre con las caras tapadas por pasamontañas se dirigieron a mí. Intenté retroceder pero el dolor me impidió sin embargo empecé a pegar puñetazos a diestro y siniestro. Pero me pusieron un saco en mi cabeza y me tomaron de mis piernas y mis brazos. Me intenté librar sin exito. Luego otro golpe y ya no sé más.
Me despierto otra vez y escucho el ruido de un motor. Siento como pasamos un bache. Estoy adentro de un coche pero todo es silencio. Estoy cómoda por lo que me han acostado en los asientos. Con mi mano derecha intento tocarme la cara pero resulta que tengo puestas unas esposas y se escucha como las muevo rápidamente para tratar de ver algo. Forcejeo en un intento de quitarme el saco que me han pusto en la cabeza pero esta atado con una cuerda al rededor de mi cuello. Me desespero.
- Se ha despertado, duermela - Dijo la aterciopelada voz de un hombre. En modo de orden.
Luego sentí otras manos y el olor a cloroformo. Y otra vez nada.
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Hola, ¿Qué tal? Bien me gustaria empezar diciendo mil perdones. Que no he subido porque he estado estudiando para los exámenes finales pero prometo que ahora que ya estoy en vacaciones subir más. Bueno y ahora lo de siempre comentad, dadle a la estrellita y si podeis compartidla. Gracias por leerme
