*Importante nota al final*
JACK
Aunque hacía rato las lágrimas ya no brotaban de sus ojos, su semblante seguía triste y apagado, la única luz que se podía distinguir en el interior de sus ojos era la determinación por encontrar a Lance para devolverlo al castillo, el hecho de que el sujeto no le agradara no era suficiente para dejarlo morir en el interior de una cueva. Pasó por encima de pinos y montañas, lagos y ríos, todos congelados por el frío del invierno. Volaba bajo, a unos pocos metros del suelo, ya que estaba demasiado distraído como para ver lo que estaba haciendo. Recuperó la compostura al chocar contra la copa de un sauce llorón, sus ramas, llenas de gotas de rocío heladas, tintinearon en una melodía divertida.
"Una cosa a la vez, Jack" se repetía a sí mismo cada vez que cruzaba por su mente la idea de desviarse tan sólo unos metros hacia donde Elsa se encontraba, rescatarla de la soledad montañosa, acunarla en sus brazos, contarle lo que le sucedió al pequeño Olaf y decirle que todo iba a estar bien. El temor de caer ante tal tentación nunca escapaba de sus pensamientos. Consciente de la abrumadora situación, supo que debía tomar las cosas con calma, sino podría volverse loco, por lo que comenzó a recitar esa frase, centrándose nuevamente en su objetivo.
La cueva no estaba tan lejos como recordaba, quizás simplemente estuvo tan desconcentrado al viajar que poca atención le prestó al vuelo o al camino recorrido, tal era su descuido, que casi pasa de largo la gran roca que escondía al rey. Bajó con delicadeza, y, con un movimiento, derritió la gran pared de hielo que tapaba la entrada de ese oscuro y húmedo lugar, pero se sorprendió al no encontrar a Lance a primera vista.
Tuvo que esforzarse un poco para poder distinguir desde dónde eran originados esos lamentos y quejidos que no paraba de escuchar. Una vez que sus ojos se acostumbraron a la penumbra del lugar, no le fue tan difícil reconocer un bulto del tamaño de una persona desparramado casi en el fondo.
-¿Lance?- preguntó a las sombras, pero, como esperaba, estas no respondieron. El joven resopló hastiado de que nadie pudiera verlo u oírlo cuando le pareció haber percibido un movimiento. Sus oídos se pusieron en alerta cuando el sonido del rozar de una tela contra la roca comenzó a sonar por el lugar.
-¿Qui...quién anda ahí?- preguntó una voz temblorosa con esfuerzo. El hombre se había parado con mucho trabajo, permitiéndole al chico escuchar sus jadeos llenos de agotamiento.
"Bien, puede verme, esto hará las cosas más sencillas" agradeció sin siquiera preguntarse por qué podía creer en él.
-Mi nombre es Jack Frost. Soy amigo de la princesa Anna- no sabía si mencionar el nombre de Elsa, podría causar que el rey de Rebinsten perdiera el control, por lo que decidió mencionar solamente a su pequeña hermana, quien, él sabía, había formado una relación lo bastante sólida con aquel sujeto como para que pudiera confiar en Jack- Fui enviado a buscarte por los demás embajadores, debemos volver inmediatamente al castillo...
-¡No!- lo interrumpió con una especie de grito ahogado- Yo... no puedo ir a ese castillo...
"Ahora no, por favor" pidió a nadie en particular, lo último que le faltaba era tener que cargar con Lance noqueado en su espalda por forzarse a acompañarlo de forma pacífica. Se acercó unos pasos con sigilo.
-Tranquilo, está bien, te entiendo. Sólo déjame llevarte a Arendelle, podrás entrar en calor y...
-¡No lo entiendes! Elsa es... ella...
-¡Créeme, te comprendo! Ahora sujétate de mi mano.- él le ofreció una palma, esperando que la aceptase, sin embargo, Lance la golpeó con poca fuerza.
ESTÁS LEYENDO
Los guardianes del invierno (Jelsa Fanfic) [Terminada]
Fanfiction¿Qué pasaría si Elsa no hubiera aprendido los secretos de sus poderes ella sola? ¿Qué tal si te dijera que tuvo un profesor con el que compartía sus poderes? Jack Frost viajaba tranquilo buscando llevar los inviernos consigo, cuando alcanza el rei...