.....¿Acaso no sabía que entre más me prohibiera tener sentimientos por el más egocéntrico, estúpido, cretino, charlatán, delicioso, hermoso e IDIOTA de Kwon Ji yong.. mayor se volvía mi atracción?
||Historia con todos los derechos reservados a Sue_...
Al día siguiente me fui a la galería más temprano de lo habitual, olvidé por unos días todo el asunto de mi vecino pervertido y el nuevo dueño del edificio. Todos mis sentidos estaban puestos en la exposición.
Todo transcurrió un tanto agitado, ultimando los detalles del evento. Fui la encargada de recibir las muestras del pintor japonés Korehiko, hice una inspección rápida. Muestras muy hermosas, la gran mayoría mostraban a los protagonistas con ojos y bocas muy abiertas. Los ojos se encontraban inexpresivos mirando hacia la nada. Una combinación entre lo psicótico y lo inocente. Frialdad, entornos brillantes y colores llamativos.
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Cada uno de nosotros sabía muy bien que hacer, en mi caso, tenía a cargo la exposición y al final tendría que fotografiar a las pinturas, los famosos, políticos y artistas.
El resto del día transcurrió tranquilo, solo tuve que guiar a 3 grupos de turistas. El día me pareció largo y cuando llegué a mi departamento todo se mantuvo igual, tranquilo. Como si hubiera sido escuchada por los dioses dormí tranquila y sin ningún ruido ni gemido habitual.
***
Amanecí tranquila, me bañé, desayuné un jugo de frutas con unas tostadas con mermelada que me había antojado la noche anterior. La exposición estaba prevista para las once de la mañana.
Vestí un pantalón negro ceñido, una blusa color esmeralda manga tres cuartos con pedrería en el cuello, un abrigo negro, me puse mis zapatos de tacón negro "Valentino" y mis argollas medianas. Me hice una coleta alta y me maquillé resaltando solo mis labios. Cogí mi bolso, mi teléfono y salí del departamento en dirección a la galería.
Cuando las puertas del ascensor se abrieron me di cuenta que en la entrada se encontraba mi vecino el pervertido hablando por teléfono, caminaba de un lugar a otro. Tomé valor y me dirigí a la entrada, fingiría no verlo. No quería que nada fastidiara mi estado de animo. Caminé tranquila y cuando pasé por su lado se apartó de mi abruptamente como si apestara, traté de no darle importancia y seguí mi camino.
Llegué a la galería y me puse a coordinar los últimos detalles con mi jefe.
Su asistente el Sr. Jung parecía del FBI por que no dejaba de dar indicaciones por medio de su handsfree. Había una cantidad numerosa de jóvenes que darían información y folletos con las muestras.
