Capítulo 12.

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¿Chocolate caliente? Listo.

¿Mantas esponjosas? Listo.

Un guapo Jinyoung que la abrace con sus largos y fuertes brazos. ¿Podría su noche ser más perfecta? En preparación para su reunión con la familia de Jinyoung al día siguiente, Minhee estaba revisando todos los álbumes de fotos que había traído para ayudarle a aprender los nombres.

Sin embargo, fue difícil, no solo porque había doce personas para aprender, sino que seguía distrayéndose con todas las lindas fotografías del joven Jinyoung. Ver las raras fotos que tuvo de él y su abuela y luego la montaña de fotos una vez que fue adoptado, le hizo sentir emociones tan mezcladas. Era tan lindo desde muy pequeño y se sentía más cerca de él porque le mostraba una parte tan personal de sí mismo, pero no podía evitar sentir envidia de él.

Tenía todos estos recuerdos capturados eternamente de su infancia y, en comparación, no tenía nada, solo sus recuerdos borrosos de su hogar de crianza. Jinyoung le acarició la nuca con el mentón, apoyando la barbilla en su hombro para sacarla del aturdimiento.

—Piensa en todos los nuevos recuerdos que vamos a hacer juntos. Todos los recuerdos que ya hemos hecho.—murmuró suavemente en su oído, enviando escalofríos por su espina dorsal.

Minhee se rió un poco, sorbiendo su chocolate caliente lentamente mientras miraba una foto de Jinyoung en su graduación.

—¿Siempre vas a ser tan curioso?—bromeó juguetonamente, mirando por encima del hombro para mirarlo a los ojos.—tendrás que enseñarme cómo me bloqueas de la cabeza algún día.

—No te estoy bloqueando.—respondió en voz baja, su aliento color chocolate se extendió por su cara.—solo tienes que aprender a escuchar más fuerte.—la apretó con fuerza alrededor de la cintura y luego sacó el álbum y señaló una foto de Jinyoung y sus hermanos en una fila en su graduación.—ahora, ¿Quién es quién?

Volviendo a la foto, emitió un fuerte suspiro y sostuvo el álbum de cerca.

—Ese es Yugyeom.—respondió, señalando al chico alto con una sonrisa al principio de la línea.

—¿Derecha?—Jinyoung asintió y le dió una gran sonrisa.

—¿Y ese es Jaebum?—dijo insegura, señalando al chico más bajo con el cabello oscuro.

—No, ese es Jackson.—corrigió Jinyoung, tranquilizándola con un pequeño apretón.—Yugyeom, Jackson, Mark, Bambam, Youngjae, yo y luego Jaebum.—le dijo, señalando a cada persona individualmente.

Suspiró con frustración y pasó la mano por su cabello, tirando de él por encima del hombro.

—¿Por qué tienes tantos hermanos?—exclamó, cerrando los ojos y bajando la cabeza en señal de derrota.—¡Todo éste estudio me está dando dolor de cabeza!—tomando el chocolate caliente de su mano, Jinyoung movió sus manos suaves por sus brazos desnudos, poniendo el calor y la calma en su cuerpo. Casi al instante, el dolor de cabeza desapareció.

—No tienes que preocuparte por recordar todos sus nombres.—murmuró en voz baja, empujando el álbum fuera de su regazo. Hizo girar sus piernas para que se enfrentara a él. Sus manos ahuecaron su rostro suavemente, forzándola a mirarlo.—estaré a tu lado para ayudarte si me necesitas.

—Gracias.—respondió, envolviendo sus brazos alrededor de sus costillas y abrazando su pecho por un segundo.

Su familia era muy importante para él, sabía que necesitaba conocerlos y llevarse bien con ellos. Pero la idea de conocer a tantos a la vez fue desgarrador. Estaba agradecida de saber que Jinyoung permanecería a su lado donde lo necesitaba.

Lonely 《p.jy》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora