Lonely 《p.jy》

Capítulo 15.

—Uno de estos días, vas a tener que mostrarme cómo te ves con tu uniforme.—dijo Jinyoung con un suspiro de anhelo mientras se estacionaba frente a la estación de policía.—podría desarrollar algo.—agregó, moviendo las cejas sugestivamente.

Minhee puso los ojos en blanco, se desabrochó el cinturón de seguridad y se volvió para mirarlo.

—Ya me has visto con mi uniforme.—respondió, refiriéndose al hecho de que estaba en el trabajo cuando se unieron. Jinyoung estaba sacudiendo la cabeza de inmediato.

—¡Eso no cuenta! Estaba extremadamente intoxicado.—exclamó, reclinándose en su asiento.—ni siquiera podía recordar mi nombre esa noche.—sus labios se arrugaron rápidamente en un puchero mientras trataba de tirar de ella la expresión de perro cachorro.

—Tal vez deberías tratar de ser arrestado nuevamente.—bromeó, inclinándose sobre la palanca de cambios para besar sus labios listos.

Sus dedos ahuecaron su rostro para profundizar el beso, tratando de obtener la mayor cantidad de su toque posible antes de que tuviera que irse. Lamentándose con pesar, suspiró en silencio y volvió a su asiento, agarrando su bolsa por los pies.

—Te buscaré ésta tarde.—prometió, alargándose para dar un último beso antes de que Minhee abriera la puerta.—¿Noche en la comida china?—salió del coche, cerraste la puerta y se asomó por la ventana.

—Suena perfecto.—respondió suavemente, soplándole un beso antes de que se pusiera de pie y lo viera alejarse.

Ya lo extrañaba, el dolor en su corazón latía implacablemente. Cuando entró en la estación, le bombardea un cuerpo que la aprieta alrededor de la cintura.

—¿Ese amante te dejó?—preguntó Chaeyoung con entusiasmo, su cabello rubio oscureciendo su vista mientras se arrastraba hacia la entrada de la estación.—¿Alguien tuvo una pequeña pijamada anoche?

Empujándola, le echó el pelo hacia atrás y dió largos zancadas en la estación.

—¿Y qué si lo hice?—respondió, sacándole la lengua mientras apuñalaba el teclado con el código.—ya soy grande.

Durante los últimos días, logró ponerse a trabajar antes que Chaeyoung, así que no tiene que lidiar con tantas preguntas de Jinyoung durante el día. Pero ahora que los había visto a los dos juntos, ella iba a ser imparcial con la conversación todo el día.

—No sabía que fuera tan grave.—exclamó Chaeyoung, poniéndose a su lado mientras las dos caminaban hacia el vestuario.

Chaeyoung comenzó a sacudir los hombros hacia adelante y hacia atrás.

—No puedo creer que aún no lo haya conocido.—su burla de dolor casi sonaba real si Minhee no la conocía tan bien. Minhee rodó sus ojos.

—¡Lo harás!—imploró, antes de hablar en una voz mucho más tranquila.—finalmente.

—¿Por qué me estás torturando?—chilló Chaeyoung, con el labio inferior sobresaliendo.—intento vivir indirectamente a través de tu relación, pero necesito detalles.—continuó, dejando caer la cabeza sobre su hombro.

En la cabeza de Minhee, encontró la presencia de Jinyoung y la abrazó, notando que ya estaba en el estudio. "Mira lo que tengo que soportar por ti. Chaeyoung no me va a dejar sola todo el día", él estaba sonriendo. No necesitaba ver su cara para saber que eso era lo que estaba haciendo. "Déjame verte en el uniforme y te dejaré a una cuadra de distancia mañana", respondió, dándole un ultimátum antes de que se alejara de su mente.

¿Por qué las dos personas más especiales en su vida también fueron las más tercas? Suspirando pesadamente, empujó a Chaeyoung al vestuario.

—Vamos a prepararnos.—le dijo, ya girando el dial para desbloquear su casillero.—el turno es en diez minutos y realmente necesito un café antes de eso.