24. "Objetivo Localizado

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-¡¿Qué rayos?! - lancé la hoja que tenía en mis manos al suelo, por razones comunes, la hoja comenzó a caer poco a poco a una distancia no tan lejos de mis pies.

¿Por que me asusté de esa manera?

Donald, Donald, Donald...

Ese nombre no dejaba de dar vueltas en mi cabeza.

Me recargue en la pared junto al baúl, ignorando el dolor de la rodilla y caí al suelo, rendida.

- ¿Qué demonios está sucediendo? - me dije a mi misma. - esto es...¡una locura!

Me abrace con mis propios pies, la hoja permanecía a centímetros de mi. ¿Donald Boston? ¿Quien podría ser? La misma edad, el mismo apellido, misma primera letra...
Aunque pensándolo bien, la edad y la Primera letra del nombre sólo podrían ser casualidad.

- Algún alumno expulsado.- Encogí los hombros para convencerme a mi misma de que esto no estaba pasando, por que esa letra era sin duda al de Daniel pero, ¿un proyecto de 6to grado a los 21 años y con la letra de mi mejor amigo muerto? Pero, ¿no tenía entendido que para salir de este instituto sólo constaba con tener 18 años? ¿Quien era este sujeto?

Nada concuerda aquí y ¿que hacen esos papeles en unos túneles secretos?

-¡Todo es tan ilógico! - hundí mi cabeza entre mi cabello y manos mostrando en otro ángulo mi frustración y confusión total.

Todo esto está fuera de la realidad, ahora no sólo tengo que parar con Kevin y la pelirosa, si no también descubrir quien es "Donald Boston" y...lo que me pone la piel de gallina.

¿Daniel está vivo?

***

- ¡¿Que idiotez estas diciendo?!

Antonio se encontraba calmado, pensaba que la chica se encontraba en buenas manos, al día siguiente iría a casa y nadie podría lastimarla, pensaba, pues Axel y Dante rompieron su tranquilidad.

- Yo estoy igual o peor que tú. Te lo puede asegurar.

- ¿Sabes lo que estas diciendo? Es Hen, Kevin podría encontrarla en cualquier momento y para eso será demasiado tarde.

- Oye, tranquilo. Todos sabemos aquí que Shuky es una testaruda, no se mantendría de brazos cruzados. Ahora, tenemos que hallar la forma de decírselo a Eiden, no le va a caer en gracia que su hermana se haya fugado. - habló el serio del grupo.

- Dante tiene razón- continuó Axel. - y tengo una idea.

- ¿Cuál caballero?- lo fulminó con la mirada. -¿Como rescatarás a tu princesa de la torre?

El comentario de mal gusto de Antonio no le cayó nada bien, a veces podría sacarlo de quicio y eso, no era para nada bueno.

- Eres un...- Se acercó a él, pero una cabellera entre roja y negra se interpuso entre ellos.

- Oigan, no es momento de estar con sus niñerías, tengan en cuenta que mi hermana está en riesgo.

Axel suspiró.

- Tiene razón, cuñadita.

- ¿cuñadita?

- ¡Ya! - se acercó Marco interrumpiendo la discusión. Desvío la mirada hacia la única chica que se encontraba. - Qu-uiero decir... Tenemos que, que movernos ya.

- ¿estás nervioso? - preguntó esta, provocando un color escarlata en el rostro del recién aparecido.

- ¿Y Eiden? - siguió Axel. - no se supone que deberías estar distrayéndolo.

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