Quebrándome

Ruptura.17

—¿Es que soy idiota verdad?, ¡¿Cómo se me ocurre subirme a su coche?!— Pensé alterado mientras disimulaba al ver por el paisaje que pasaba por la ventana, —Me subo al auto de este loco solo porque no quería hablar con Leo pero...¿no es esto peor?— Me cuestione pero ya no tenía caso arrepentirme a esta punto. En algún momento comenzó a darme sed cosa que lo noto mi sumbae y me ofreció una botella de juego, le agradecí pero después de eso no volvimos a hablar, solo le daba algunos tragos al jugo hasta que después de estar sumergido en mis pensamientos me percate de que el auto se había detenido, al mirar con atención por la ventana vi la arena y el constante oleaje de la marea pero el estar ahí con sumbae no me hacía sentir cómodo, —N ¿podríamos hablar?— La voz de mi sumbae se hizo presente obligándome a voltear a verlo y aunque hubiera preferido no hablar con el supongo que es lo más lógico hacerlos si incluso vine hasta acá con él, —Adelante sumbae— Le respondí forzando una sonrisa, —Se que mas has estado evitando pero no entiendo el porque, ¿te lastime?— Me pregunto pareciendo sinceramente preocupado, —...Solo se me complico el seguir ayudándole sumbae, teniendo que liderar a vixx consume todo mi tiempo— Le explique queriendo que aquello fuera suficiente pero park hyo shin se veía algo irritado, —Se que no es solo eso, ¿Por qué me mientes?— Me reclamo pero aunque intentara mantenerse calmado era evidente que su humor había cambiado, —No estoy mintiendo, solo quise dedicarme a mi grupo porque— No me dejo ni terminar de explicarle cuando me alzo la voz molesto, —¡¿Crees que soy idiota?!— Me pregunto asiendo que me asustara sin embargo mis parpados se me estaba asiendo cada vez más difícil abrirlos pero el admitir que me daba miedo mi sumbae me resultaba algo patético pero esa era la verdad. Después de que se alterara llevo sus dos manos al volante y lo apretó con fuerza como si reprimiera su ira, respiro profundamente para voltear a verme una vez ya más calmado, —¿Te comportas a si conmigo solo porque te dije que tuvimos sexo aquella vez?— Me hizo esa pregunta como si para el le resultara ilógico e incluso me sonrió con ironía pero mi visión se estaba volviendo borrosa —N eres un adulto, ¿aun te asustas por algo como eso?— Me pregunto dejándome ver una sonrisa burlona, —¿Qué sucede?,...¿quieres ir a dormir tan pronto? pero si apenas estoy comenzando— Me dijo con cierto orgullo en la voz pero al escucharlo comprendí lo que sucedía, —...¿Me drogaste?— Le pregunte molesto pero en realidad me encontraba aterrado, quería salir de su auto pero mis piernas no me respondían, es más, casi no podía seguir despierto, —Siempre exageras las cosas N, simplemente es un somnífero,...¿o quieres acusarme con Leo?, no te encariñes con el, solo tengo que decirle al CEO que es mala idea que ustedes mantengan una relación y te obligaran a romperla, tal y como hice con Ravi— Aquello fue lo último que escuche antes de que mis parpados se negaran a abrirse de nuevo pero el coraje dentro de mí se había trasformado en odio, —Fuiste el culpable de que terminara con Ravi...— Y con ese sentimiento perforando cada parte de mi perdí la conciencia.

La sensación de lo que parecía una sabana cubría mi cuerpo y debajo de mi podía diferenciar un colchón firme, al estar consciente de que me encontraba en una cama me senté rápidamente abriendo los ojos ampliamente, al ver a mis lados sube que aquella habitación será sin dudas la de un hotel y al saberlo mi cuerpo comenzó a temblar, tenía miedo, tenia asco pero sobre todo me sentía profundamente enojado, quería partirle la cara a park hyo shin. Eran tantos los sentimientos que mis ojos comenzaron a picar, —Por culpa suya yo...termine con mi relación...y lo peor es que lastime a Ravi tal y como él deseaba— Aquel pensamiento me abrumaba a un punto que no lograba soportarlo, eso superaba a gran medida mi capacidad de soportar el dolor y sumándole que lo más probable era que park hyo shin me había violado solo una solución cruzo por mi mente cuando vi la puerta corrediza de la terraza de la habitación, me quite la sabana sobre mí con brusquedad y me puse de pie, sentía el frio recorrer desde las plantas de mis pies hasta mi espalda asiendo que mi piel se erizara pero no sentía dudas por lo que estaba a punto de hacer, ya había tenido suficiente, no entiendo porque debo soportar tanto dolor y tampoco es como si hiciera falta, hongbin tenia a hyuk para hacerlo feliz, Leo tiene un gran talento...y Ravi tienen a ken a su lado, ya nadie me necesita, no, nadie me necesito desde un principio.