Quebrándome

Ruptura. 27

Hyuk como Hongbin se encontraba mirando desde la puerta de la habitación lo que estaba ocurriendo. Toque las mejillas de Leo sintiendo la temperatura. —Ustedes vigilen a Leo mientras yo voy a la farmacia por medicina— Les dije a mis maknaes pero cuando me disponía a pararme de la cama mi muñeca fue tomada por la amplia mano de Leo.

Voltee a verlo creyendo que a lo mejor había recuperado la conciencia pero sus ojos aún seguían cerrados sin embargo sujetaba mi muñeca con firmeza.

—¿Leo?... — Dije su nombre al intentar quitar su mano para poder ir por la medicina pero este no me soltaba.

Respire profundamente soltando un gran suspiro, resignado volví a sentarme en la orilla de su cama. —¿Hyuk podrías ir a la farmacia y comprar la medicina para la fiebre?— Le pedí de favor ya que si Leo no me soltaba al menos buscaría otra manera de curarlo.

Hyuk sin dudarlo salió de la habitación para vestirse he ir a la farmacia mientras que a Hongbin le pedí que trajera un recipiente con agua fría y un trapo para poder ponerlo en la frente de Leo evitando que se pusiera peor.

Esos dos hicieron lo que les pedí y en solo diez minutos después hyuk había vuelto con la medicina. Por mi parte me aseguraba que el trapo húmedo con el agua fría no se le cayera de su frente y aunque mis pensamientos estaban en desear que Leo no empeorara no podía ignorar el hecho que aunque estuviera dormido siguiera sujetando mi muñeca sin aflojar su agarre.

—Hyung aquí está la medicina— Me dijo Hyuk al entregarme la bolsa de plástico pero ahora me enfrentaba a un nuevo dilema...¿Cómo le iba a dar el jarabe?.

Al pensar en una forma de poder hacer que Leo se tomara su medicamento vino a mi mente las miles de películas en la que la chica le pasa de su sangre al vampiro inconsciente para que pueda sobrevivir mediante un beso...

Tal opción me hizo sentir avergonzado de solo pensarlo,...yo besando a Leo...eso si que seria raro...pero ya no se trataba de mi o de cómo pudiera sentirme al respecto si no de la salud y bienestar de el por lo que deje de pensar en eso y tome una decisión.

—Ustedes dos ocúpense de preparar algo de avena para que coma Leo una vez que despierte y si quieren también preparen para que pueden comer ustedes, yo estaré con él y si los necesito les llamare, ¿ok?— Les explique con calma comportándome como su líder y que no notaran que me preocupaba que Leo llegara a empeorar.

Ambos salieron de la habitación y Hongbin cerró la puerta para que Leo pudiera descansar en silencio. Una vez solos voltee a ver al dormido de Leo y me mentalice para darle la medicina aunque eso significara besarlo...

Leí las instrucciones del frasco la cual decía que se debía dar al paciente dos cucharadas dejando pasar un minuto de la otra y así sucedidamente cada cuatro horas. Mentalmente calcule cuando del jarabe debía de retener en mi boca para que fuera una cucharada y una vez que deduje que sería como un trago pequeño me dispuse a abrir el frasco con algo de dificultad ya que Leo estaba tomando mi otra mano.

Termine abriéndola con ayuda de mis dientes, deje la tapa a un lado sobre la mesita de noche y mire a Leo antes de darle el trago al jarabe. —...No hago esto por gusto, no hay más opción ¿ok? Y aparte es tu culpa por enfermarte así que me debes una disculpa— Le dije quejándome al mismo tiempo que me sentía avergonzado.