CAPÍTULO XXIV

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No sabría explicar como terminé sentada en la sala del apartamento de Azael a las 12 de la noche hablando con un detective que no es quién llevó mi caso.

Azael se puso como loco cuando le conté acerca de todos  los avisos que he recibido acerca de Elliot y de la llamada que mi madre me hizo.

Llamé a Chloe cuando venía para indicarle que cierre las ventanas y puertas, tan pronto termine con esto me iré.

—Por ahora no podemos proceder a detener a nadie, pero voy a colocar la seguridad que me pide en el apartamento de su novia.

Azael extiende su mano y el rubio frente a nosotros la estrecha- Gracias detective, no escatime en los gastos, solo necesito que se sientan seguras.

El detective es un hombre muy reservado y con una presencia que intimida, es bastante joven pero según Azael es el mejor de Miami.

—Así será Señor Baker, si me disculpan me retiro, manténgame al tanto señorita Wells de cualquier cosa que pase... buenas noches.

—Lo acompaño.

Azael lo lleva hasta la puerta y yo me quedo en el sofá pensando en todo lo que esta pasando, no puedo bajar la guardia Elliot ya me desmostró que esta a un paso más de mí.

Los papás de Chloe vendrán el fin de semana para hablar sobre Amy, quieren llevarla con ellos a New York pero justo ahora no quiero separarme de ella.

—¿Te sientes mejor?—Él se sienta a mi lado y coloca un mechón rebelde de mi cabello detrás de mi oreja.

—Sí... gracias por todo lo que has hecho por nosotras.

—Haría todo por protegerte...si quieres venir aquí puedes hacerlo con Amy y Chloe.

—¿Me estás pidiendo que viva contigo?— Alzo una de mis cejas y él sonríe.

—Sí...pero sé que es muy pronto para ti...es solo que no quiero tenerte lejos y menos ahora Amelie.

Coloco mis manos en sus mejillas y dejo un beso casto en sus labios—Estaremos bien amor, lo prometo.

—Quédate conmigo esta noche...

—Amy y Chloe están en casa no quiero estar lejos de ella...

—Al menos déjame...—Habla pausado cerca de mi oído dejando corrientes de electricidad sobre mi piel— ...amarte y luego te llevo.

Une sus labios a los míos en un beso suave que luego se torna apasionado y yo le respondo.

Nuestras bocas se mueven en una perfecta sintonía, su lengua exige la mía y le doy paso, nos levantamos del sofá y me separo un poco de él para tomar aire.

—Estás muy apasionado Baker.

Él sonríe de medio lado y me toma por mi cintura—Estoy embobado Wells.

Intenta besarme nuevamente pero me rehuso en un gesto divertido—Estabas muy encantado con la pelinegra tomando vino.

Alza una de sus cejas en un gesto incrédulo y muerde su labio inferior-¿Estás celosa?

—Es difícil no estarlo... ¿te has visto en el espejo?

—Me sonrojas Amelie Wells.

—Estamos a mano entonces.

Sin dejarme reaccionar me eleva del piso cargándome en sus brazos y llevándome a su habitación.

Me acuesta sobre la cama y sonrío al verlo poco a poco desnudarse ante mí, me levanto para ayudarlo y se apodera de mis labios mientras con un movimiento ágil se deshace de mi vestido.

Hurting [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora