capítulo 25

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Me despierto sintiendo mis ojos muy pesados, me levanto muy perezosamente, nunca me ha gustado levantarme temprano.

Veo para todas partes, y nada, Emma no está aquí.

Reviso mi celular, tampoco tengo ni un mensaje ni una llamada suya, esto de verdad me esta empezando a estresar.

Ahora que recuerdo, Emma me había comentado algo de que mañana comenzarían las clases.

Por lo menos se que mañana estará ahí.

Estudio todo el apartamento, es pequeño, pero linda, ahí está la mesa donde siempre comemos, la cocina en donde siempre anda preparando algo, y a mi me encanta verla hacer eso, ver cómo usa el dorso su mano para mover las pequeñas gotas de sudor que se acumulan en su frente, ver cómo frunce su ceño cuando algo no le sale bien, ver como se ríe cuando hago un mal chiste, ver cómo pestañea, ver cómo mueve sus labios cuando habla y es que, son esas pequeñas cosas las que más me gustan de ella, todo eso que me vuelve loco y me hace amarla.

Salgo del departamento, tengo que ir a mi casa, a Hayley no la veo desde ayer, y si no está preocupada, esta pensando en que Emma y yo hicimos algo, y no es el caso.

A parte de que también desde ayer no me baño, y no es que sea precisamente un adicto a la limpieza, pero si me gusta bañarme.

Salgo del apartamento un tanto atormentado, ¿algo tan malo le habrá echo Aarón? ¿vale la pena hacer un drama por tal cosa?

Con esas, y mil preguntas más dentro de mi cabeza me monto en el auto.

Voy directo a mi casa.

Me decido por llamar a Hayley.

Un tono, dos tonos y contesta.

-Hola guapo- dice riendose, no está ni un poco preocupada, no se por que no me resulta raro, ruedo los ojos.

-Hola Hayley, ya voy para la casa dile a Ángela que me preparé algo por favor- digo, estoy exhausto y tengo sueño.

-Claro ya le digo- dice y cuelga, de verdad que no tiene ni idea de lo que pasa con Emma.

Me decido por llamarla, quiero ver si está vez contesta.

Un tono, dos tonos, tres tonos, cuatro tonos y...

-Emma, porfin me contestas no sabes lo preocupado que estaba, de verdad no quería que eso pasara- digo rápidamente, no quiero que me cuelgue y no pueda decirle nada.

-Jack, no es tu culpa- dice en un susurro y acto seguido suelta un sollozo.

-No llores mi amor, y claro que es mi culpa, dime dónde estás y voy- digo, pausadamente, pero creo que la desesperación en mi tono de voz es bastante notable.

-Jack, no quiero seguir haciendote daño, yo te quiero, no lo mal intérpretes, pero c-creo que lo nuest-tro no va a funcionar- dice en susurros y sollozos.

-No, claro que no, lo nuestro va a funcionar seguiremos juntos pase lo pasé, dime dónde estas- pregunto.

-Jack lo siento pero tú no me conoces- dice y corta la llamada.

Las lágrimas caen por mis ojos, me paro en una esquina, lo menos que quiero es chocar ahora, es que, ajj, ese estúpido que le habrá echo.

La vuelvo a llamar, quiero que me explique eso de que "no la conozco".

Pero igual que antes, me desvía la llamada.

No, me tiene que explicar por qué no puede estar así toda una vida conmigo ¿verdad? y sé qué pronto la podré ver y no es que no la quiera ver ahora si no que sé que tengo que  dejarla respirar y que entienda que
puede contar conmigo Yo la quiero pero si ella no quiere estar conmigo ahora, qué puedo hacer no la puedo obligar.

Lágrimas salen de mía ojos con completo descontrol, ya no se que hacer, Emma no me quiere.

Nota:

Holaaa, lo siento por la tardanza es que se me olvidó que tenía que subir doble cap, y ya no lo hize, pero prometo darles pronto un maratón.

Les invito a leer mi nueva historia "Viviendo Con Las Playgirls [proximamente]"

Espero que les haya gustado el capítulo, esta muy corto pero el próximo estará más largo.

He decidido cambiar los días de actualización de miércoles a sábados, así que el sábado nos leemos con otro capítulo.

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Pasen por mi otra historia, y sin más que decir me despido, los quiero nos leemos el sábado.

Tiene Un SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora