Volvimos a besarnos y después él me recargó en la esquina de la piscina, con una mano me sostuve del barandal de la escalera y lo rodeé con mis piernas por su cintura y él entró en mí al igual que un poco de agua que hizo más placentera la sensación. Puso una de sus manos también en el barandal y comenzó a moverse exquisitamente mientras me miraba con esa sonrisa retorcida que adoraba.
Yo trataba de gemir lo más bajo que se pudiera, pero a veces no podía reprimirme por lo intensa que era la sensación de su cuerpo y el agua chocando contra el mío. No dejábamos de mirarnos, nos lamíamos los labios y exhalábamos en nuestras bocas, sentí que perdí el control de mi cuerpo cuando ambos llegamos al clímax y Jungkook me mordió el labio inferior.
– Te amo ____ –dijo mirándome fijamente todavía en mi interior.
– Yo también te amo Jungkook, con todo mi corazón.
Volvimos a besarnos y después nos abrazamos y salió de mí. Nos quedamos abrazados hasta que nuestras respiraciones volvieron a su curso normal y después salimos de la piscina, temblando de frío. Jungkook me cubrió de inmediato con la toalla y después él se puso una también, nos secamos, tomamos nuestra ropa y entramos a la casa. Subimos las escaleras y al llegar arriba nos encontramos a Suga que venía caminando por el pasillo y quise que la tierra me tragara.
– Ah que muchachitos –exclamó Suga con una amplia sonrisa.
– ¿Y tú adónde vas a esta hora? –preguntó Jungkook para desviar el tema mientras yo me ponía detrás de él para tratar de cubrirme.
– Yoona tiene antojo de limones así que voy a la cocina por unos... aunque me doy cuenta que no es la única con antojos en esta casa –dijo de lo más divertido.
– Buenas noches, Suga –respondió Jungkook ignorando el comentario.
– Buenas noches jóvenes, no se desvelen mucho que mañana desayunamos temprano y no quiero que se estén durmiendo en la boda.
– Espero que a ti te deje dormir Yoona o serás tú el que se esté durmiendo.
– De ningún modo, yo soy fuerte, descansen, ¿eh?, recuerden que la habitación en la que estoy está al lado de la suya así que sabré si están dormidos o no.
Jungkook movió la cabeza negativamente y seguimos caminando, yo ni siquiera quise voltear cuando pasé al lado de Suga que bajó las escaleras.
– Que vergüenza.
– No te preocupes corazón, ignoralo como yo.
– No podré mirarlo a los ojos mañana.
– ____, no quiero que vuelvas a decir eso, no tienes nada de qué avergonzarte, eres mi novia y ya te dije que no estábamos haciendo nada malo.
– No, pero, es tu casa y siento que le hemos faltado al respeto.
– Tranquila corazón, créeme que aunque Suga y Yoona no sean de mi familia y vivan aki siempre también tienen su historia y no nada más en esta casa, una vez los pillé en la biblioteca en la de Seattle cuando Yu Jin los invito a ir de vacaciones con la familia.
– No quiero detalles, por favor.
– Ok, solo te lo digo para que no te alarmes.
– ¿Así que eso de exponerse a que los descubran es muy normal aki?
– Creo que sí, al menos del lado masculino, nunca he pillado a Yu Jin y más le valía.
– Ay, tu lado machista tenía que aflorar –dije moviendo la cabeza negativamente.
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¿Estas libre esta noche? "Jungkook & tu"
Fanfiction-No nombres -No preguntas personales -No lazos afectivos Tres reglas a seguir pero no imposibles de romper... *Adaptación* (con algunos cambios)