Un amor que nació de una traición ( Versión Español) (Concluída)

Todo se acabó...

Llegando a casa, Rafael fue entrando en la habitación en busca de Ana pero no la encontró.

Rafael: Ana, ¿dónde estás? Ana? (gritaba por la casa)

Larissa: Papá, ¿por qué estás gritando de esa manera? ¡La mamá no está aquí! Ella salió hace tiempo, estaba bien nerviosa.

Rafael: ¿Dónde está tu hermano?

Larissa: ¡Debe estar llegando! Ai no dijo (apuntó a puerta, mientras que Rodrigo entraba).

Rodrigo: Hola familia !!!

Rafael: Necesito hablar con ustedes !!!!

Larissa: ¡Papá, me estás dejando preocupada! ¿Qué está pasando?

Rodrigo: ¡Sí papá, que pasá!

Rafael: La madre de ustedes me traicionó con Pedro. Fernanda los descubrió, parece que pasaron el fin de semana juntos. Ella nos  mintió  diciendo que iba a ver a su tío. Por eso necesito que ella aparezca y hable porque nos traicionó de esa manera.

Larissa y Rodrigo: No, mamá no puede haberlo hecho eso con nosotros.

Los dos abrazan al padre y los tres lloran de decepción, tristeza.

~ * ~ * ~ *

Pedro, después de haber conversado con Fernanda llamó a Ana y contó que habían sido descubiertos, ella se desesperó y resolvieron irse a otro lado juntos. Pero Pedro corrió tanto que acabaron perdiendo el control del coche y sufrieron un grave accidente. Los dos resultaron gravemente heridos. Pedro fue sometido a algunas cirugías, teniendo que permanecer en la UTI y Ana, desafortunadamente falleció en el lugar del accidente pues estaba sin cinturón de seguridad y debido al impacto fue arrojada muy lejos.

El hospital entró en contacto con Fernanda y Rafael y la desesperación se apoderó de los dos, la noticia del accidente los sacudió aún más.

Fernanda: ¡Qué pesadilla, Dios mío! ¡Además de traicionarnos, iban a huir juntos!

Rafael: Ella estaba embarazada de él, Fernanda! ¡Murió embarazada, de ese maldito !!! (lloraba de rabia)

Fernanda:No puedo más, Dios mio!!!! ¡¡¡Quiero morir!!! (lloraba mucho también).

Y se abrazaron ...

Los hijos de Rafael y de Fernanda estaban tristes y decepcionados, sabían que lo que sus padres habían hecho no era culpa de ellos y eso no podría interferir en su amistad, por el contrario ellos tendrían que ayudarse unos a otros y más aún tendrían que ayudar a sus padres a seguir la vida.

Sofía: ¡Amor, tienes noción! Mi padre y tu madre iban a tener un bebé, íbamos a tener un hermano en común. ¿Qué sería de nosotros?

Rodrigo: ¡No lo sé! Pero no vamos a pensar en eso. Mira cómo tu madre y mi padre están sacudidos, lo que esos traidores malditos hicieron no tiene perdón.

Sofía: ¡No!

En ese instante la abuela de Sofía, llega al hospital y encuentra a Fernanda y Rafael abrazados.

Helena: ¿No tienes vergüenza, Fernanda? Tu marido está casi muerto en ese hospital y todavía tienes el coraje de quedarte aquí con tu amante.

Fernanda: Primero la traidora de la historia no soy yo, su hijo está aquí porque estaba huyendo con su amante, según Rafael no es mi amante,tercero la amante de su hijo era esposa de Rafael y murió embarazada. Usted iba a tener otro nieto, Helena.

Helena: No es novedad, que mi hijo haya ido a buscar en otra persona lo que su esposa no daba. Siempre supe, que nunca sería una buena esposa para él.

Fernanda es tomada por la ira y acaba abofeteando a Helena. Ella iba golpearla más, pero Rafael la contuvo por estar en un hospital y porque Helena ya tienia una cierta edad. Fernanda comenzó a llorar, pero antes de salir puede oír las amenazas de Helena:

"Eso no va a quedar así, va a tener consecuencias graves, espere por noticias mías".

Fernanda: Ahora esa vieja de mierda, va a molestarme aún más. Sólo espero que ella no se meta con mis hijos, porque ahí no respondo por mí.

Rafael: ¡Fer, quédate tranquila! ¡Estaré con usted para hacerlo!

Sofía: Mamá, ¿estás bien? Gracias, Rafa por haber sacado a mamá de allí. La abuela cuando quiere ser insoportable, supera todas las expectativas.

Fernanda apenas asintió con la cabeza y Rafael la abrazó. Fernanda se sentía segura con Rafael, él siempre estaba del lado de ella en los momentos en que ella más necesitaba.

Fernanda: ¡Gracias, Rafa! ¡Tú sufriendo con la pérdida de tu esposa, está  aquií apoyándome! De verdad, muchas gracias!

Rafael: ¡No hay que agradecer, Fer! Tu eres la persona más sincera y noble que conocí, no podría actuar de otra manera. Tu eres más fuerte de lo que piensa y yo siempre estaré aquí.

Fernanda sonrió a Rafael y llamó a los niños a comer algo, pues aún tenían que organizar las cosas del entierro de Ana y ella no pensaba en dejar a Rafa solo con eso. Él iba a necesitarla y ella estaría de su lado.

Sofía quedó pensativa y Enrique se acercó a la hermana y se abrazó.

Henrique: Que basura!!! Papá traicionó a mamá con la esposa de su amigo, que es madre de mi amigo, además sería su suegra. Todavía tenía el coraje de dejarla embarazada. Como si no bastase, todavía tenemos que oír la abuela llamando a la mamá de infiel, siendo que el traidor de la historia es el papá.

Sofía: Estoy muy enojada, Rique! Mamá no merecía eso, pero sabe algo bueno en todo. Mamá ganó un compañero, y sinceramente, sé que no es el mejor momento, pero quería mucho que mamá y  Rafa pudieran redescubrir el amor juntos. Él hace muy bien a ella, está siempre de su lado en las horas difíciles.

Enrique: Pienso lo mismo, Sofi!

Los dos continúan abrazados, conversando. Helena se acerca a ellos e intenta de todas formas hacer que se queden contra su madre, pero se rompe la cara porque ellos estaban más unidos que nunca con Fernanda. Ellos sabían dónde realmente estaba la verdad y Fernanda no tuvo culpa.

Mientras tanto, Fernanda ayudaba a Rafael a resolver las cosas del entierro de Ana. Él estaba muy perdido y muchas cosas habían ocurrido al mismo tiempo, entonces no sabía ni por dónde debía comenzar.

Rafael: Debe ser difícil para ti, ¿no?

Fernanda: ¿Qué? ¿Ayudarte? De ninguna manera, Rafa debemos saber separar las cosas. Ana traicionó mi confianza sí, pero yo no sería capaz de dejarlo en la mano en una hora de esas y al contrario de ella, yo sí la tenía como amiga.

Rafael: ¿Tu no existe, Fer?

Fernanda: ¡Cómo no existo, estoy aquí de carne y hueso delante de tí! (dijo en tono de broma).

Fernanda acompañó a Rafael en todos los detalles del entierro de Ana y estuvo al lado de él todo momento. Sofía estaba al lado de Rodrigo consolándolo porque estaba siendo muy difícil entender todo. Larissa lloraba mucho, Fernanda se alejó de Rafael un poco y fue a abrazarla, pues tenía a Larissa como una hija también.

El entierro fue algo muy íntimo, sólo estaban presentes el sacerdote, los familiares y la familia de Fernanda. El hermano de Ana era un loco y no ligaba mucho a lo que le sucedía  y la cuñada no tendría como llegar pues vivía muy lejos.

Al terminar, todos fueron a sus respectivas casas y como el día había sido extremadamente pesado y necesitaban descansar.

Continua....