Veneno Para Vivir [EN EDICIÓN]

3

Estamos en silencio , bueno sólo puedo escuchar el sonido de mis dedos y las teclas y una respiración leve. El después de repetirme todo lo que quería en la tesis se metió en unos papeles y me ignoró por completo. Ya llevo mas de 30 hojas y esta vez de verdad espero que quede listo. Los ojos me empiezan a arder y tengo que sacar mi lentes, noto que la luz de mi celular esta parpadeando, lo saco con cuidado y veo los mensajes por debajo de la mesa, todos son de Sun.

📱Sun (6:15) : ¿Oppa, llegaras temprano, verdad?

📱Sun (7:22) : No se ha escuchado nada por un buen rato pero no quiero salir. Llega temprano ¿Si?

Son apenas 8:25 y las ansias por ya salir empiezan a llegar.

📱 (8:26) : Solo no salgas del cuarto, llegare lo mas rápido que pueda.

— Si quieres contestar el celular no lo ocultes cual ladrón —brinco por dentro y volteo a verlo, la pluma que tiene en la mano pega contra el escritorio varias veces y aunque su expresión es aburrida su mirada es una total advertencia de que algo no le agrada.

—Lo siento —inclino un poco mi cabeza y dejo el celular a un lado, este el cual ya es algo viejo pero no por eso no es algo que no funcione, vuelve a vibrar. Su mirada que ya se había alejado de mi vuelve al celular y de nuevo a mi, me pone nervioso, demasiado diría yo, lo tomo y veo el mensaje.

📱Sun (8:31) : Por favor, solo no tardes

No contesto por el hecho de que aun me sigue viendo pero vuelvo al teclado tratando de no prestarle atención. Unos quince minutos antes de salir me pide que le muestre lo que llevo, paso la laptop con cuidado y el la toma con fuerza. Apoya su barbilla en una de sus manos mientras sus ojos recorren con rapidez todas las palabras, y en realidad es un buen momento para poder verlo mejor. Sus labios son pequeños y delgados, por un momento pienso que puede traer algún brillo en ellos pero al pasar su lengua ese color rosa sigue ahí, su cabello negro hace un juego perfecto con su tez blanca pero en definitiva lo que mas me atrae son sus ojos, son tan grandes, negros y profundos. Sus pestañas son tan largas y con un enchinado natural que hacen sombras en sus mejillas. Es guapo. En definitiva es muy guapo, trago saliva y creo que se escucha por toda la oficina, sin aviso sus ojos se despegan de la pantalla y van directo hacia a mi, tengo que apartar la mirada lo mas rápido que puedo y hacer que encuentro algo interesante en las puntas de mis dedos.

— Bueno, no es ni la mitad de lo que yo pedí. Pero es aceptable bajo ciertos términos —vuelve a la pantalla y lee de nuevo en silencio. — No lo imprimas hasta que yo diga. ¿De acuerdo? — asiento en silencio y ve la hora en su reloj —ya casi dan las nueve. Puedes irte. —comienzo a guardar todas mis cosas y el también cierra algunos folders con documentos y los mete en un portafolio.

— ¿Puedo hacerle una pregunta? —despega la vista de su celular y asiente —Podríamos no se... acortar una media hora las sesiones. No puedo llegar tan tarde a casa.

— No —dice sin siquiera pensarlo, creo que mi cara lo dice todo cuando el vuelve a hablar —no ha pasado ni una semana ¿Y quieres que acorte las sesiones, solo porque no aguantas unos comentarios sinceros?

— No, no es eso pero...

— Mi respuesta sigue siendo no, tal vez cuando estés mas adelantado con tu trabajo lo considere, pero por ahora no. —acaba con una mirada asesina y con un movimiento de cabeza me dice que salga de la oficina. Resignado suspiro y salgo lento, no voy viendo hacia el frente y tropiezo con el chico que tiene sesión antes que yo.

— ¿Qué haces aquí Wonwoo? —pienso en disculparme pero Seungcheol habla primero, el chico de cabello entre negro y azul muy oscuro pasa sus ojos por mí y él varias veces hasta que habla.