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Recuerdo mi primer beso, fue con el hijo de un amigo de papá. Recuerdo que era mas grande que yo, tal vez unos tres años mas grande y yo apenas tenia 12 años. Recuerdo que me rompió el corazón cuando lo vi a las dos semanas con una niña, no lo juzgo pero al menos pudo decirme que era bisexual y así no ilusionarme al extremo. Tampoco soy ese chico que se la pasaba de novio en novio y si salía con alguien no pasaba de la segunda cita. No voy a mentir, no soy virgen pero no lo he hecho en bastante tiempo.

Seungcheol pasa su pulgar por mis labios cuando se separa de mi.

— Espero que esto no lo tomes a mal — sus labios se han vuelto de un rojo leve y supongo que yo estoy más rojo que nada. ¿Qué debería hacer ahora?
¿Huir?
¿Pedir disculpas aunque el me haya besado primero?
¿Besarlo de nuevo? Esa es la mejor opción que se me ocurre.

— ¿Qué esperas para besarme de nuevo? — supongo que quiere saber si voy a aceptar que esto ocurra de nuevo. Y supongo que no solo hoy.  La cuestión aquí es ¿De verdad vas a llegar tan lejos solo con un beso?

Si.... ¿Por qué no lo haríamos? Solo por una vez, vamos a arriesgarnos.

Es la mejor respuesta que mi mente pudo dar, aun tengo mis manos sobre mis piernas y solo levanto una para acercar su cara a la mía. Siempre he pensado que un buen beso es el mejor orgasmo, y mas si besas a alguien como el. No se como lo hizo pero incluso me levanto del asiento para sentarse el y ponerme sobre sus piernas, vuelve a pasar su mano hacia mi nuca y sus labios se dirigen hacia mi cuello. Pero cuando uno de sus brazos rodea mi cintura me entra un miedo sin razón, así es como me agarra el viejo para retenerme cerca de el y mi primer impulso es poner mis manos sobre su pecho y alejarme de el, no se si es por el beso o por el miedo pero aun me cuesta tomar el aire perdido.

— Lo siento yo... no me gusta que me agarren así — mis manos se mueven inquietas entre ellas y veo el reloj y apenas van a dar las 7:00. — Creo que... no es correcto — Dices eso después de haberlo besado. El se levanta y pasa sus manos por su cabello hasta llegar a mi, pasa sus manos por mi cintura y acaricia mi piel por debajo de mi camisa, un escalofrío pasa por mi espalda y tengo que evitar soltar un leve suspiro.

— No es correcto que pienses eso después de haberme besado así — inclina su cabeza y dirige su boca hasta mi cuello, da unos leves besos húmedos e incluso pasa un poco sus dientes por el. Jadeo y paso mis manos a sus hombros, me pega más a su cuerpo pero como es más alto que yo me paro un poco de puntitas.

¿No dijimos que íbamos a dejar que las cosas fluyeran por una vez? La voz de mi mente habla pero aun sigo pensando que esto puede acabar mal.

Siente la forma de sus besos y dime que tan malo podría ser. Tiene razón, que tan a menudo encuentras a alguien con esos labios, nunca, así que deja de pensar y solo déjate llevar.

Creo que incluso puede escuchar las conversaciones en mi mente porque su siguiente movimiento es tomar mis piernas y alzarme hasta su cadera, nadie me había cargado así, ni siquiera cuando tuve mi primer novio me cargo así. Es fuerte y puedo sentirlo cuando paso mis manos por sus brazos aun cuando tiene el saco puesto, me sienta en el escritorio y creo que algunos de sus papeles han caído al suelo. Estoy en este situación y me preocupa que la laptop caiga al suelo, con una mano la cierro con cuidado y me canso que pase su boca por mi cuello, quiero volver a besarle así que me animo a voltear su rostro y besarle, no se en que momento paso pero ya se quito el saco y yo tengo mis manos en los botones de su camisa.

Entiendo que hayas estado varios días fantaseando con esto pero... ¿Aquí? ¿No es algo... arriesgado? ¿Y si alguien nos ve?

— Solo estamos tu y yo solos aquí a esta hora — supongo que puede leer mis pensamientos, termino con los botones de su camisa e intento quitársela pero el me detiene — Espero que no te arrepientas de esto después — su voz a bajado por lo menos unos 10 tonos lo que hace que cosquillas empiecen a aparecer en mi estomago. Niego levemente y pienso en volver a quitarle la camisa, es mas rápido que yo y quita la mía primero.
Vuelve a bajar sus besos hasta mi pecho mientras con unas manos rápidas abre mis pantalones, ya esta, ya no hay vuelta atrás después de eso. Tengo que levantarme para poder quitarlos bien y aprovecha para ponerme de espaldas hacia el,  sus manos podrían encender una chimenea sin necesidad de cerillos, son tan calientes en mi piel fría que tiemblo por lo que vendrá.
Besa mi nuca y deja de acariciar mi espalda para bajar su mano a mi punto dulce, jadeo y me inclino más sobre la mesa, empieza a mover su mano lentamente haciendo que suelte un leve gemido, ha pasado un largo tiempo desde que lo hice la última vez, incluso desde que me anime a hacerlo solo pero estar al pendiente de Sun y tratar de vivir decentemente me detienen a complacerme solo. Me acerco a su cintura y ya puedo sentir su bulto por debajo de la tela, lo acerca varias veces a mi y gimo mas alto.

Veneno Para Vivir [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora