La misión

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Una mañana cualquiera, como las que tú tienes al despertar y no poder separarte de tus sábanas dandote hasta lo posibilidad de convencer a tus padres con excusas para no ir al colegio yo me dirigía a la oficina de mi tío bien temprano para informarme de mi siguiente misión. Me coloqué una de mis pelucas preferidas, color verde agua, unos pantalones al estilo militar medio abolsados, una musculosa negra y mis adorados borsegos.

Al entrar al establecimiento con una taza de café en mano, todo el mundo comenzó a saludarme con un inmensurable respeto al cual estoy bastante acostumbrada gracias a mi antigüedad, y yo devolví el saludo a unos pares diciendo el número de agente de cada uno y soltando alguna que otra broma. Lo sé, un plomo, una tortura china a estas horas de la mañana tener que pensar en los numeros de agente de las personas!, pero por un lado así podía practicar indirectamente la memoria y por otro tambien ya estabamos entre nosotros bastante acostumbrados, al fin y al cabo de muchos de ellos ni sus verdaderos nombres sabía.

Cuando llegue a la puerta de la oficina de mi tío entre sin tocar como solía acostumbrar. Estaba sentado en su reclinable del otro lado del escritorio con ese elegante traje negro que siempre usaba.

- hola tío - dije mientras me sentaba frente a él, colocando mis pies sobre el escritorio de manera despreocupada.

- hola Sara, cómo estás?- dijo sin siquiera mirar mis pies sobre los que podían llegar a ser papeles de gran importancia

- bien, muy bien. He venido por lo de mi nueva misión-añadí ahora sí un poco más entusiasmada

- ah, sí claro - dijo sacando una carpeta de los cajones del escritorio con una lentitud mortificante y dándomela con cuidado

> Su nombre es Ciro Folks, tiene con su padre adoptivo Frank Lucas una cede de narcotráfico en el sur de USA, Tennessee. Debes encontrarlo y sacarle información sobre todo el círculo mafioso: nombres direcciones, proveedores, compradores, etcétera. Y con la mesa de directores y consejeros hemos decidido que lo conveniente sería que te adentraras en su ámbito institucional y en el mejor de los casos enamorarlo, ya que tendrá demasiada protección por parte del padre como para raptarlo, sonsacarle información y encargarse de él<

- enamorarlo!? interrumpi. Yo no me relaciono con mis victimas, yo mato personas tío, y lo sabes perfectamente! además, si vamos al caso, esta no sería mi primer misión oficial en encubierto como para desconfíen des esta manera de mis habilidades- dije parándome y dando vueltas por la oficina mientras llevaba nerviosamente las manos a mi pelo- no puedo creer que aún a estas instancias y luego de tantos años no me creas capaz de una misión de rapto- le reproché más que enfadada

- esta misión es diferente Sara, y eres una de las agentes que creemos más capacitadas para este tipo de misión y para cualquier otra, cumples con los requisitos y edades como para infiltrarte con facilidad y de verdad creo que eres muy capaz pero debes hacerlo como se te ordena- comentó tratando de tranquilizarme

- lo intentaré - bufé acercándome y desparramándome nuevamente en el sillón frente a él

- gracias Sara, sé que lo harás de maravilla- me dijo esta vez un poco más sonriente - tu nombre será Lara Stone, tendrás hoy para empacar y mañana a las 9:30 horas parte tu avión para Tennessee.

- gracias- dije poniendo la carpeta bajo el brazo mientras salía de la oficina tratando de disimular mi descontento

- adiós y buena suerte Sara. Quiero decir Lara- me sonreí asombrada ante su entusiasmo

- gracias, adiós tío- dije realizando en broma el típico saludo militar y cerrando la puerta tras de mi

Suspirando me deje apoyar a un lado de la puerta y me di un poco de aliento, vaya desafío me habían puesto esta vez.

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