Capítulo Diecinueve

170 31 77
                                    

Un cielo rojizo, con grietas sobre la barrera que impide que los portales sean abiertos.

Simple mente hermoso

Todo empezó hace cuatro días, terminaba de hablar con Gideon cuando el primer temblor se presento, no parecía estar sorprendido, pero las personas empezaron a entrar en pánico.

Él cielo se tornó púrpura.

Ver correr a las personas, escuchar sus gritos, los grupos de salvaguarda no se daban a basto, no sabían lo que venía, y a mi era lo que menos me importaba.

Quiero ser egoísta de nuevo y solo enfocarme en encontrar a la persona que le destroce la vida.

De vez en cuando escuchaba la voz de Gideon hablando por el auricular, me había vuelto a ingresar en sus comunicaciones para que estuviera informado de todo lo que estaba pasando, ya no solo en la ciudad...sino en el mundo, a demás de que tal vez podría encontrar el paradero de Gumper, para poder ir a golpear una cara "angelical".

Lo encontramos.

Detuve mi andar cuando escuche a Mabel hablar por el auricular, tuve que aguantar las ganas de hablar, ya que se darían cuenta que estoy conectado con ellos.

Escuche que dijeron que habían encontrado el lugar donde al parecer desecharon los botes del material tóxico, debía ir a ese lugar.

Empecé a dirigirme hacía las afueras de la ciudad, pero el impacto de un pedazo de escombro que cayó a centímetros de mi me detuvo.

— Vaya, vaya, vaya, debo admitirlo Bill eres persistente — escuche detrás de mi esa voy molesta y simplona — ¿Qué perdiste para estar de un lado al otro en la ciudad? Podría ayudarte a buscar

— Mmm...déjame pensarlo — hice que el mismo escombro que me habia lanzado fuera hacía él...pero se estrelló contra una barrera

No, no, no, hijo mio esa no era la respuesta que quería, tus padres no te enseñaron a respetar a los demás

— Responde, ¿Donde esta?

— ¿Quién? — me sonrió cínicamente

No estoy para juegos, dijiste que querías un arma, y justo después de eso Dipper desapareció

— ¿Dipper? — hizo una mueca como si estuviera muy concentrado pensando en que le estaba hablando — Haa el chico castaño...pobre de él, cuando lo encontré estaba todo lleno de sangre y sin poderse mover, estaba llorando y tenía muchos raspones en la cara y el cuerpo...su brazo estaba muy lastimado, es muy triste que su único amigo lo considere un ARMA

Estaba arto, su sonrisa simplona me tenia hasta la coronilla, que insinué que no sabe de que estoy hablando y que después hable de como esta sufriendo Dipper, hace que me enoje mas, tenía que golpearlo yo, sentir su cara en mi puño, no en otro cosa...pero había una barrera a su alrededor.

— Mal, mal, mal...¿No puedes entender nada Bill?

— A que estas jugando, ¿Qué o quién está...

— Oh hablas de esto — toco la barrera como si fuera una puerta es un truco interesante ¿No es así? La persona que la esta haciendo le fue sumamente sencillo hacerla, tiene talento, y es mucho mejor que tú.

— ¿Mejor que yo? La persona que este haciendo esto debe ser un completo idiota que se deja manipular por ti — primero abrió los ojos sorprendido, para después empezar a reírse de una manera descontrolada

No seré como túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora